Después de despertar a todos de un sueño eterno, Sasuke, había seguido su camino, esta vez no en busca de venganza, sino en busca de poder o al menos al principio; puesto que poco después de esa decisión llegaron a sus oídos más trivialidades que la...
Después de haber escuchado las palabras del ojinegro, Sakura había intentado convencerlo de que no lo hiciera, pero él ni siquiera le había prestado atención. Poco tiempo después ella intentó leer su mente y se topó con un: "Ni lo intentes" de parte del Uchiha, estaba cansada así que decidió regresar al punto de reunión y dormir, aunque al volver se encontró con unos bandidos que no fueron ningún inconveniente para ella, se recostó y cayó en un sueño profundo.
Sasuke no entendía las acciones de la pelirrosa, pero no le dio importancia y decidió irse a entrenar.
Horas después, al terminar, regresó donde deberían estar sus compañeros, quienes no se encontraban, no había nadie, a excepción de Sakura, quien estaba inconsciente. Se acercó a la oji-jade, que estaba algo apartada. Ella no tenía sábanas, ni almohada, solo se había quedado durmiendo en el frío suelo siendo cubierta por un manto de chakra. Sasuke recordó lo sucedido con Itachi y sintió curiosidad de saber qué tenía ella de especial. Algo llamó la atención del pelinegro, una pequeña mancha de sangre pintada en la tierra y muy cerca de la boca de Sakura, quien tenía los labios teñidos de rojo.
Activó su Sharingan e indagó en los recuerdos de la kunoichi. Quería saber que estaba soñando, cual era su temor, su peor pesadilla...
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__ Están muy lejos, ¿Hinata ves algo? __ preguntó Naruto a la oji-perla.
__ Sí, pero solo hay dos, están muy unidos, no veo a los demás.
__ ¿Percibes algo más?
__ Varios rastros de chakra, todos son... extraños...
__ Hinata... __ dijo el rubio pasándose frente a ella__ regresa a la aldea esto puede ser peligroso...
__ Naruto-kun... no me iré... Quie-quiero estar conti-tigo... Quiero ayudarte.__ dijo sonrojándose.
Naruto estaba conmovido por la inocencia de su querida Hinata, él simplemente asintió para después acercarse y acurrucarla entre sus brazos. Pocos segundos después le dio un tierno beso en sus labios y se acercó a su oído:
__ Está bien, pero no te separarás de mí, en caso de ser necesario debes ir siempre con Neji, ¿de acuerdo?
Sellaron el trato con otro tierno beso y se dispusieron a continuar su camino.
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