Todoroki siempre ha tenido problemas en su visión en su ojo izquierdo desde niño, y desafortunadamente con los años no ha ido mejorando mucho.
Tras una visita no prevista a Recovery Girl y una citación de su padre, se concluye que tendrá que usar l...
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"¡Muevan sus traseros apestosos, ya se acabó el tiempo!"
"Disculpa, pero todavía no hemos terminado aquí". Anunció el más alto con voz fría y cerró la puerta nuevamente careciendo de la fuerza brusca del anterior.
"¿Qué estás haciendo?" Habló nervioso imaginando las expresiones perturbadas de los demás.
De seguro sus compañeros pensaban que estaban haciendo otro tipo de cosas en el armario. Probablemente Mineta los estaría dotando de ideas o Ashido los estaría declarando como una nueva pareja, cuando no podría estar más equivocada. Pero se supone que nadie haría esas especulaciones ¿verdad? Sólo habían estado tomado de la mano, un gesto totalmente normal entre amigos. Aunque ninguno de sus amigos solía hacer eso y tal vez era un gesto más privado y Midoriya solo lo había visto comúnmente entre parejas, pero Todoroki le había dejado claro que solo eran mejores amigos. La situación también fue completamente diferente aunque no sabía porque había preferido sostenerlo de la mano, pero ahora todos debían tener una idea diferente y Todoroki, siendo ajeno de lo que se esperaba que hicieran ahí, solo actuó inconsciente.
Midoriya intentó levantarse preso del pánico apunto de volver a abrir la puerta para dar explicaciones, pero un tirón lo devolvió a su posición inicial y se dio cuenta con demora.
Sus manos todavía continuaban unidas.
"No puedo dejar esto así", habló calmado y su voz profunda volvió a sacar a Midoriya de sus pensamientos. Luego prosiguió con voz firme totalmente determinado "estás dudando de ti mismo, de tus habilidades... no dije todo eso para hacerte sentir mejor, pensé que ya eras consiente de todo eso, sólo necesitaba decírtelo—" dudó un momento antes de apretar su mano izquierda, ahora más cálida, y continuó "Decirte lo importante que eres para mí... no estoy arrepentido de nada de lo que dije y ninguna palabra va a cambiar mi parecer porque esa es tu esencia. Solo señalé lo evidente y no dudaré en hacerlo cuando vuelvas a dudar de ello".
Midoriya casi podría jurar que esto era un sueño aún cuando lo había comprobado antes, pero lo que más lo convencía de que no era así era el firme agarre del otro sobre su mano. Eso debió estar bien, como un ancla que te mantiene en su lugar o un soporte que lo mantiene firme, pero en cambio solo sintió como parte de su estabilidad se deslizaba mientras sus palabras se repetían en la mente de Midoriya como un bucle.
Comenzó con una lagrima solitaria que se deslizó por su mejilla pecosa hasta su mandíbula. Otras más se sumaron, empapando sus pestañas y surcando sus mejillas, hasta que no las pudo detener. Un sollozo débil escapó de entre sus labios y sus hombros temblaron como último intento de mantener la compostura.
'A veces los héroes también lloran'
El recuerdo se agitó en su mente y dócilmente su resistencia se fue.
