Chris Evans | One Shots

O.S 3: "You would be my Peggy?"

|Chris Evans|

—A qué hora viene el camión de la mudanza?—preguntó Chris desde el sofá.

—A las 11.

Volteé un segundo a mirarlo y sonreí con dulzura al ver que estaba acostado en el sofá, boca arriba y con un brazo cubriendo sus ojos. Me acerqué a él y con cuidado me agache lo suficiente como para robarle un beso. Chris pasó su mano libre por mi pierna desnuda, ya que llevaba un vestido floreado por la rodilla, pero lo detuve cuando llego con sus caricias hasta detrás de mi muslo.

—Evans, tenemos que terminar de empacar—dije en tono acusatorio pero divertido.

—Pero a nadie le hace mal un descanso—comentó entre risas mientras seguía con su brazo sobre los ojos.

Ignorando su insinuación, tomé una caja y seguí guardando las cosas que habían dentro de un mueble del living. Esa era la ultima habitación que quedaba y a cada minuto la ansiedad, y la melancolía se hacían presentes. La casa de mis abuelos había sido mi hogar y el de mi hermana desde que eramos pequeñas, desde que nuestra madre falleció en un accidente hace muchos años atrás. La vida pasó, mi hermana se casó con Chloe, yo dediqué mi vida a estudiar y luego mis abuelos dejaron de estar. La casa quedó sola y con ella la oportunidad de que mi hermana, Sarah, tuviera un hogar con su esposa. La verdad es que ella ya no quería volver a este lugar, ya que a diferencia de mi, los recuerdos que habitan aquí solo hacen que recuerde que estamos solas.

—No puedo creerlo...—susurré emocionada al encontrar un disco de vinilo de mi abuelo que creía perdido.

—¿Qué encontraste?—preguntó curioso Chris al mirarme desde el sofá.

—Algo que mi abuelo amaba—comenté con una enorme sonrisa al sacar el disco de su estuche y ponerlo en el tocadiscos. Bajé lentamente la púa y a los segundos comenzó a sonar una de mis canciones favoritas. (Pueden escucharla arriba 👆)

Chris se sentó lentamente en el sofá y me observó con atención desde allí. Sonreí con ternura al recordar a mis abuelos bailar en esa misma habitación cuando yo era niña y no pude evitar moverme al compás de la música. Noté por el vidrio del mueble que Chris me estaba mirando con una hermosa sonrisa en su rostro, por lo que volteé y estiré mi mano hacia él.

—Ven—pedí con mi mano, la cual él tomó al acercarse a mi—. Esta era la canción de mis abuelos—conté con una media sonrisa al colocar su brazo detrás de mi cintura para que comenzara a bailar conmigo—. Cuando ellos bailaban en esta habitación, yo me sentaba en el sofá a observarlos... imaginando que algún día yo lo haría con alguien a quien amara.

Chris sonrió enamorado y comenzó a balancearse al ritmo de la música mientras yo recostaba mi sien en su hombro. Sin darme cuenta cerré los ojos y me dejé llevar. Tal y como solía hacer mi abuela al bailar con el hombre de su vida. Chris acarició mi frente con la punta de su nariz y descendió hasta darme un suave beso en los labios. Luego me hizo girar y me atrajo a sus brazos nuevamente, haciéndome reír como una tonta enamorada.