One Shots de nuestro Dorito favorito ❤
Todos los derechos reservados.
Agradecería que no usaran mis historias sin mi consentimiento ya que dedico mucho tiempo en ellas.
🥇1 en chrisevans (27.04.21 y 27.08.22)
🥇1 en historias (25.09.22 al 27.09.22)
...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
"Tú, yo y la playa. ¿Qué dices? Mañana estoy libre ✊️🤗. No puedo esperar a la reunión."
Dejo de desempacar la última caja de mi habitación y sonrio al ver el mensaje de Chris, el cual respondo rápidamente, sin dudar un segundo.
"Pasa por mi bien temprano. ¡Ya quiero verte! 🙈"
El viento fresco de la mañana se colaba entre las copas de los árboles y una sensación familiar se abrió paso entre mis entrañas. Cierro los ojos, sintiendo la caricia del viento en mi rostro y respiro con fuerza el aroma de la arena, y agua salada que habia en el aire.
No puedo contar las veces que habia soñado con volver a este lugar, con volver al lugar que tantas alegrías me había dado. Oigo a lo lejos la bocina de un auto y me dispongo a salir de mi ensoñación para volver dentro de mi casa, y dejar atrás la hermosa vista a la playa que hay desde el patio trasero.
Tomo mi mochila, guardo mi celular en ella y salgo de la casa cerrando la puerta tras de mí. Sonrio de inmediato al ver a Chris bajando del auto y chillo de felicidad al correr hacia él. Su risa se cuela por cada parte de mi ser y me abraza con fuerza en cuanto me arrojo a sus brazos.
—¡Dios, te extrañé tanto!—exclamo con alegría, besando varias veces su mejilla mientras mis piernas se enredan en su cintura.
—¡Y yo a ti, desquiciada!—afirma entre risas, sosteniendome por la cintura.
Unos ladridos eufóricos llaman nuestra atención y de inmediato suelto a Chris para poder ver a Dodger através de la ventana.
—¿Está contento de conocerme al fin o cree que ataqué a su padre?—pregunto entre risas al ver como Dodger me ladra y rasca la ventana para salir.
—Vamos a averiguarlo—bromea Chris, abriendo la puerta.
Dodger sale disparado del auto y de inmediato se tira sobre mi, saltando tan alto que logra lamer toda mi cara en segundos. Chris rie ante la emoción de su mejor amigo y yo solo dejo que Dodger me llene de baba ya que su padre no tiene la menor intención de separarlo de mí.
—Yo también estoy emocionada por conocerte—le digo a Dodger mientras rasco detras de sus orejas—, pero no pienso lamer tu cara, amigo.
Dodger me ladra en respuesta y me es imposible no darle un sonoro beso sobre el hocico.
—¿Terminaron de babosearse?—pregunta divertido Chris.
—¿Qué? ¿Estás celoso?—digo entre risas al cerrar la puerta trasera cuando Dodger vuelve a subir.
Chris hace una mueca pensativa y me dirige una mirada divertida antes de volver a subir al auto, y encaminarnos a un día solo para los tres.
En todo el viaje nos dedicamos a ponernos al día sobre nuestras familias y noto que nuestro vínculo como amigos no se deterioró ni por un segundo. A pesar de haber estado tanto años sin vernos, era increíble lo cómoda y confiada que seguía sintiéndome a su alrededor.