Draco Malfoy y el Heredero de Slytherin (#2)

Capítulo 12: La rosa dorada

Draco pensó que los Gryffindor se relajarían después de su intento de interrogarlo con la poción multijugos, o al menos esperaba que lo hicieran por sentir vergüenza. Pero enero llegó y aún mantenían una distancia cautelosa, aunque en menos medida. Evitarlo fue más complicado ahora que Hermione se encontraba en la enfermería convertida en gato.

Draco se rio a mas no poder la primera vez que escuchó lo que pasó con el gato de Millie. "¡No es gracioso!" Hermione seguía insistiendo.

"¿El señor Wilberforth? ¿Intentaste convertirte en el señor Wilberforth?" soltó, agarrando su estómago cuando empezó a dolerle de reírse tanto. Obtuvo miradas duras por parte del trio. "¡Millie piensa que intento asesinar al señor Wilberforth!"

Por sus miradas, ese argumento lo había hecho aún menos gracioso.

Estaba atrapada en la enfermería, lo que hizo que todos creyeran que la prominente cerebrito hija de muggles había sido la siguiente víctima del heredero. Las opiniones de que Draco era el heredero se debilitaron, ya que muchos dudaban que Draco hubiera atacado a su única amiga. Casi convenció a los compañeros de año de Draco, antes de que les admitiera que Hermione se encontraba ahí debido a un bizarro accidente de pociones. Entonces regresaron a llamarlo el heredero otra vez.

Hubo un problema al principio con las personas yendo a mirar como bobos, del cual Draco estaba consciente, debido a su necia insistencia de visitar a la niña a diario. Se encontró en compañía de Gryffindors más frecuentemente que en los últimos meses, simplemente porque sus visitas coincidían la mayoría del tiempo. Potter no pudo verlo a los ojos en las primeras dos semanas, aunque Draco presumía que tenía más que ver por su breve estadía en la cama de Draco, que porque sospechara de que fuera el heredero.

Eventualmente, Draco se cansó de las personas que intentaban asomar sus cabezas para ver, y les dejó saber a través de los Slytherin de segundo año: Justo como aquellos que hablaban mal de Draco Malfoy o sus asociados eran vulnerables a perder sus lenguas, aquellos que vieran imprudentemente a sus asociados eran vulnerables a perder sus ojos. Draco buscó y practicó el embrujo Conjunctivitis para respaldarse, pero fue suficiente con la advertencia. Y Ron terminó agradeciéndole a Draco por eso.

Aún no le hablaban más de lo necesario, para molestia de Hermione. Y ella le admitió en privado que Ron y Harry aún hablaban de él como si fuera el heredero de Slytherin cuando Draco no estaba cerca.

Atada a la enfermería, ella siempre estaba disponible para Draco, quien se encontró temiendo el día en que saliera, aunque eso lo hiciera un mal amigo. Pero forzó una expresión emocionada el día en que Hermione pudo dejar la enfermería, sin bigotes, sin cola, y libre de pelaje al inicio de febrero.

El entrenamiento de Quidditch subió de intensidad conforme se acercaba el partido Ravenclaw contra Slytherin, programado para el día 20. Flint los hacía reunirse tres veces a la semana, lo que combinado con las noches de vuelo en fin semana, las cuales Draco se negaba a dejar, hacían que su cuerpo estuviera exhausto y le doliera la mayoría del tiempo. Habría estado robando todo tipo de pociones para aliviarse, si los depósitos de Severus ya estuvieran abiertos para él. Debido a eso, guardó el segundo Filtro de la Paz que había recibido en navidad, de igual forma que los otros niños de Slytherin, y esperó que no necesitara usarlo contra Ravenclaw.

Hermione comenzó a enviarle cartas desde la Lechucería, y también a reunirse con él cada semana después de pociones para ponerse al tanto. Estaba contento de ver que aún usaba su brazalete, una vez que su brazo ya no tuvo pelaje. Si la H de Hermione que ahora también colgaba de ahí le hacía pensar que era H de Heredero, ella no lo mencionó.

La nieve comenzaba a derretirse en los terrenos, junto con la estridente sensación de terror que solía seguir a Draco a donde fuera que caminara por los corredores. Las mandrágoras estaban madurando. Lockhart declaraba que el heredero se había asustado de su proeza, casi siempre fuerte y al alcance de un exasperado Severus. Y Hermione, por supuesto, no había sido un ataque en navidad, solo un gato. De acuerdo con el cuaderno de Draco, no habría más ataques hasta mayo. Eso era reconfortante, excepto por el hecho de que las víctimas marcadas eran Hermione junto con Penelope Clearwater.