Chris Evans. |One Shots, Imaginas|

L o l i t a (four)

Antes de que pudieran decir acción, un hombre importante entró al set. Y lo conocías a la perfección, sin embargo, no estaba solo.

—¡Alto!—gritó Gary Oldman, y detrás de él, venía Tom Felton.

Tom y tú habían sido novios, lo amabas muchísimo, pero por temas de horario y trabajo ya no quisieron seguir, pues deseaban ser amigos en vez de pelear siempre.
Y ahora estaba aquí...

—¿Sucede algo? —preguntó Guillermo.

—La chica no grabará esa escena. Usen una doble o algo así. Ella no puede hacerlo —Gary era también como tu padre. Fue al primero que conociste en esa industria, y te quería.

—¿Qué? —dijiste saliendo del cuadro y acercándote a él —. No puedes decidir por mí, soy mayor de edad...

—_____, en serio... no quiero que te arriesgues, ni el señor Gary ni yo —Tom se acercó a ti, y tu corazón dio un vuelco.

Obviamente en los planes de Evans, no estaba que tu exnovio fuera.

—Tom, que gusto verte de nuevo —le diste un abrazo —. Sé que te preocupas, pero, esta película es todo para mí. Ahora es mi proyecto.

Felton negó. No estaba de acuerdo, y sería difícil que cambiara de opinión.
Gary se acercó a ti.

—Linda, me da igual lo que tengas que decir, no es no.

Robert se levantó. Sí, Gary había sido la primera figura paterna que tuviste, pero al final, se alejó un poco por el tema de su trabajo. Y Robert consideraba que tenía más derecho sobre ti.

—Disculpe, señor Oldman. Pero, _____ ya habló con todos nosotros y decidimos que  ella saldría en esta película, con todos los riesgos que representa. La vamos a cuidar de todo esto y no dejaremos que pase nada.

Tom se acercó a ti.

—_____, estoy realmente preocupado. Acepto esto, pero si Chris Evans llamó a Gary es porque le preocupas...

Tom no sabía que Chris estaba mintiendo. Que nadie debía saber que él era el que no quería que esa escena se filmara.

—¿Qué? —te dirijiste a él—. ¿Tú lo llamaste? ¿Por qué?

Chris alzó las manos, pero sabía que la había cagado en no decir que fuera secreto el quien los llamó.
A pesar de los problemas que había, no se iba a arrepentir.

—Esto es una jodida locura, ____—le dijo y negaste —. Hiddleston no es el problema, el problema será la sexualización que te van a lanzar. Entiende que no quiero eso para ti.

Gary asintió.

—Y por eso esta escena no se hará con ella.

Guillermo rodó los ojos. Sabía que su escena se haría. Le daba igual si era con doble o no, se haría. Porque esta era de las más importantes.

—____, no tenemos todo el día —te recordó Guillermo —. Arregla esto, por favor.

Asentiste.

—Voy a grabar la maldita escena, no es una pregunta.

Gary estaba nervioso. En serio te quería, y se preocupaba.
A Evans lo mataban los celos. Y a Tom le preocupaba tu seguridad.

—Con una condición —dijo Gary —. Quiero testigos. Es decir, gente que esté aquí y le conste que no te tocó de más.

No les quedó de otra más que aceptar.

(. . .)

Una hora. Tuvieron que esperar una hora.
Chris llamó a Sebastián, sabía que lo amabas mucho (como amigo), y esperaba que alguna actitud protectora de él te convenciera de no grabar.
Gary llamó a Emma, pero se encontraba ocupada, por lo que llamó a Jason, aquel que hacía el papel de Lucius en Harry Potter.

Tom no llamó a nadie más. Para él no era necesario esa condición.

Y tú llamaste a alguien también. Al favorito de los fans últimamente. A Evan Peters.

Cuando al fin estuvieron todos, decidiste hablar.

—Gracias, por venir. Espero que sepan que esto será incómodo para mí. Y que gracias a Evans muchos me verán casi desnuda. No sé como eso mejora mi situación, pero según él me quiere proteger —estabas molesta —. Iniciemos ya, el señor Guillermo no tiene todo su tiempo.

Tom no había dicho nada. Entendía, y aunque le parecía exagerado. No quiso opinar.

Se prepararon, y entonces se escuchó.

—¡ACCIÓN!

Tom comenzó a besarte, tú, al ser la niña graciosa de aparentemente 14 años, reías y te burlaba de la situación.
La escena carecía de diálogos tuyos, pero era una bastante fuerte.

Tom quitaba la ropa de Lolita, y reías. Ambos ya tenían la protección que simularía su desnudez.

Comenzaron los movimientos, simulando embestidas.
Las cámaras se acercaban a ti y hacías muecas de placer.

La escena estaba saliendo de forma perfecta.

Y entonces, luego de veinte minutos, se acabó la escena.

—¡CORTE! Estuvo perfecto, _____, Tom, fue increíble. Ahora viene lo difícil —dijo y tu asentiste.

Los demás no entendían eso. Creyeron que solo sería esa escena.

—¿No es todo? —preguntó Sebastian.

—No. Falta una escena importante.

Les dio cinco minutos exactos para preparase, preparaste tus sentimientos, y comenzó de nuevo.

Esta vez, Tom hacía muecas de placer, y tu personaje se quejaba, hasta que llegó la escena en la que lloraba.

Gritabas y pedías que parara. Y entonces las personas que estaban ahí, comenzaron a sentirse mal.

Chris estaba a nada de llorar. Verte así lo ponía mal.
Quería ir y abrazarte, quería quitar a Hiddleston y besarte. Pero era solo una escena, y eso mismo lo consolaba.

Gary cerraba los ojos de vez en cuando. Odiaba verte así, aunque no fuera Real.

Evan igualmente cerraba los ojos y tragaba saliva con dificultad.

Sebastian y Felton ya estaban llorando, en silencio, pero llorando. Sufriendo tu escena.

Robert estaba llorando. Pero no dejaba que fuera tan evidente.
Guillermo estaba impresionado con tu forma de actuar.
Con tu llanto, y con la fuerza de Tom para fingir placer.

—¡CORTE! QUEDA —gritó y sonrió asombrado.

El señor Johnny Deep estaba igual de impresionado.

—_____, eres una gran actriz, ven aquí —te pusiste tu bata Blanca y lo abrazaste. Luego abrazaste a Hiddleston, y así con cada uno, hasta que llegasta a Chris.

—Evans... agradezco que te preocuparas, pero no quiero que vuelvas a hacer esto —pediste.

—Claro, lo siento, lo siento —besó tu cabeza.

Caminaste hasta los demás de nuevo y los invitaste a ver la película.
Todos asintieron y pudieron disculpas, y todos prometieron visitarte.

Aún faltaban algunas escenas para poder terminar la película, pero eran menos, y serían importantes.

—Los veo luego. Adiós.

Chris se ofreció a llevarte a casa y aceptaste.

Lo único que le preocupaba ahora era... la reacción del público.

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Gary Oldman, en multimedia. Conocido por hacer a Sirius Black en Harry Potter.

Tom Felton, Draco Malfoy en Harry Potter.

Jason Issacs, Capitán Garfio en live action de Peter Pan.