Chris Evans. |One Shots, Imaginas|

Todo el tiempo.

Nota: Es la primera vez que escuchó está canción xd (perdón vivo en una cueva) así que hice lo que pude y así lo quise interpretar :3 les amo 💓

Chris Evans.

Era algo que pasaba muy normalmente en mi relación con Chris. Ambos sabíamos que se arreglaría, o eso pensaba él.
Yo pensaba en ya dejar todo, en alejarme, en dejarlo ir... Pero luego él aparecía en mi casa, me sonreía, me besaba y entonces todo quedaba arreglado. Aunque no estuviera totalmente de acuerdo.

Esta relación con Evans estaba siendo tóxica, estaba siendo horrible. Pero cuando me besaba entonces... Podía mandar todos los consejos a la mierda, porque lo amo.
Y porque estoy perdida en él. Perdida en ese hombre tan perfecto, ese hombre de ojos azules y perfecto rostro.

- Chris...- Llamé su atención y me miró.- Amo cuando me besas...pero.

- Pero quieres hablar de lo que pasó, ¿Verdad?- Dijo rodando los ojos. Y Asentí.- Amor, ya hablamos de esto, estuviste un poco histérica, no quisiste escucharme, no quisiste aceptar que estabas celosa solo por un beso que...

- Un beso en los labios de tu puta ex.- Recordé y otra vez sentí ese maldito nudo en mi estómago.- Evans, ¿por qué me hiciste eso? Te he dado todo lo que tengo, ¿Por qué mierda lo hiciste?

- No lo sé, _____. Se veía muy sensual con esa falda y no me pude contener...- Confesó como si fuera algo normal.- Todas mis novias lo han entendido, no sé porque es tan difícil para tí. Eres algo castrosa a veces.

Lo miré y alcé una ceja, el sabía que si volvía a decirme así me habría perdido para siempre.

- Vete a la mierda Christopher.- Escupí y salí de su departamento.

No iría al mío porque de sobra dé que iría ahí para encontrarme, no quería ir con otra persona que no fuera mi mejor amiga, pero estaba en Londres.
Me había invitado a ir y a quedarme un buen tiempo, y claro que dije que no por estar con Evans, y ahora no puede por la maldita cuarentena que estamos atravesando.
Llegaré y me desinfectare debido a que Evans besó a esa mujer y sepan los dioses que cosas tendría.

Tomé mi teléfono y marqué un número en especial.

- ¿Bueno?- Preguntó extrañado en el otro lado, seguro que no esperaba mi llamada.

- Rubén, ¿Puedo ir a tu casa? No estoy bien.- Le dije y comencé a sollozar.

- Claro que sí, _____. Siempre eres bienvenida. Trae lo que necesites, pasaremos la cuarentena juntos.- Sonreí y le agradecí para luego colgar.

Conduje con cuidado, y claro que me puse cubrebocas porque seguramente me multarian si no lo llevaba puesto.

Llegué a su casa y en cuanto me vió supo que yo estaba por los suelos.

- Pasa... Puedes ducharte y hablamos cuando termines.- Me sonrió y Asentí llendo directamente al baño junto con mis cosas. 

(. . . )

La mirada de Rubén me estaba dando a entender que me tenía lástima en vez de compasión. Y como odiaba la lástima.

- Deja de mirarme así.- Le pedí y entonces miró al suelo.- Sé que la cagué por no haberlo terminado antes, pero es que...

- Parece que te tengo lastima ¿No?, Pero no es así. Más bien te estoy empezando a odiar, y no quiero eso, ______.- Se acercó y tomó mi mano.-  Sabes que todos mis amigos te adoran, tienes muchos amigos para pedir consejos, ____. Y solo acudes a Tony y a mí, porque sabes que somos los que más nos sinceramos contigo, pero hay veces en las que decides irte con Arath o con Alejandro, porque hay veces en las que te dicen que lo intentes, y sé que lo hacen porque no quieren verte llorar, pero por favor, linda, sabes que yo quiero lo mejor para tí, y sabes que Dalton también.