🐺 OmegaVerse 🐺

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La música a un alto volumen, retumbaba por todo el lugar. Las personas bailaban, saltaban o bebían hasta olvidarse de sus propios nombres.

Y allí estabas tú, en esa discoteca. Sentada en uno de los sillones del sitio, con una simple bebida en tu vaso, molesta con todo el escándalo y la mezcla de aromas que llenaban a esas cuatro paredes.

De pronto, de la multitud, un chico se aproximaba hacia donde estabas, para sentarse en el gran sofá manteniendo una distancia razonable de ti.

El muchacho llevaba una mueca tal como la tuya en su perfecto rostro, con sus ojos cerrados y cruzado de brazos.

----¿Te estás divirtiendo?---- Volteaste a verlo con una ceja alzada, chocando con sus ojos. Había tratado de hablar alto debido a la música.

Negaste con tu cabeza en forma de respuesta, arrugando los labios mientras tomabas del contenido del vaso que tenías en tu mano.

----Salgamos de este escándalo de lugar.---- Susurró en tu oído.

Y como si fuera por arte de magia, un brillo se instaló en tu mirada. ¡Por fin alguien que te pudiera sacar de aquella discoteca!

Él te tomó por tu muñeca izquierda y te fue guiando por todo el camino, riendo como dos niños pequeños, intentando esquivar a todos los que estaban bailando y bloqueando el camino.

Una vez fuera, comenzaron a caminar lentamente por toda la acera, alejándose cada vez más, sin rumbo alguno.

----Soy Lee Tae Yong, por cierto.---- El chico se volteó hacia ti extendiendo su mano derecha, esperando a que se la aceptaras.

----Y yo Park Lizzy.---- Estrechaste su mano y te diste cuenta de que eran tan delicadas como las tuyas, con dedos largos y finos.

Ambos se dedicaron una sonrisa amigable.

"Es un Alfa. "

Tu lobo lo percibió al instante, moviendo su cola con cierta felicidad. En tu corta vida nunca te habías topado con un Alfa tan hermoso como él.

Eran alrededor de las dos de la mañana y por las calles no pasaba ni un alma. Totalmente desierto, solamente podían ver muy pocos autos transitar.

En lo que continuaban caminando Taeyong y tú iban conversando sobre cualquier cosa que se les viniera a la mente. El Alfa era un muchacho muy divertido y conversador, y a veces un tanto torpe al caminar.

Pero de lo que no tenías idea, era que su sonrojo por ti, le llegaba hasta las orejas.

El lobo de Taeyong a pesar de ser un Alfa, era uno muy peculiar, aullaba y daba brinquitos dentro de él. Definitivamente eso no lo ayudaba mucho con sus nervios. ¡Estaba eufórico!

Llegaron a un bello parque, y el mayor se acostó sobre el pasto como si fuera un enorme colchón verde y tú hiciste lo mismo, justo a su lado, guardando una distancia razonable.

Ambos miraban hacia el cielo, aún se podían apreciar las estrellas que adornaban la madrugada, haciendo que los dos dieran un largo suspiro y luego rieran debido a la coincidencia.

----No sabía que a los Alfas le gustaban ver las estrellas.

----No lo hacen. Soy muy apegado a mi madre Omega y a veces me comporto como uno. Hago cosas que hacen los Omegas pero los Alfas no. Y mi padre y hermana mayor suelen enfurecerse conmigo debido a eso.

El aire se tornó de un aroma agrio, pero tu lobo potenció tu olor logrando que las orbes de Taeyong dejaran de tensarse.

"Leche y galletas con chispas de chocolate recién sacadas del horno."

El hermoso Alfa aspiraba tu aroma con una leve sonrisa y con los ojitos cerrados.

----¿Por qué estabas en la fiesta?---- Preguntaste con un tono dulce, apreciando su rostro. Él volteó a mirarte directamente.

----Buscaba distracciones. --- Su voz ronca sonaba algo melancólica. ----Me gustan más los sitios tranquilos y sin muchas personas, pero en ocasiones se siente...

----Solitario.

Taeyong te miró de una forma tímida, asintiendo con su cabeza, mientras sonreía levemente.

Las manos de cada uno se fueron corriendo poco a poco sobre el verde césped hasta entrelazar sus meñiques. Tanto tus ojos como los de él cargaban con un brillo especial y se habían comenzado a regalar pequeñas sonrisas debido al discreto tacto.

----Lizzy. ¿Puedo preguntarte algo?

----Claro. Lo que quieras.

----Sé que nos conocemos desde hace unas pocas horas pero... ¿Me dejarías cortejarte? Realmente me gustaría que te convirtieras en mi Omega.

"Tienes que aceptar. Quiero a ese Alfa."

Tu lobo interior aullaba de la desesperación y lloraba como un cachorrito.

----Por supuesto, mi querido Alfa.---- Soltaste emocionada, viendo cómo Taeyong se contagiaba con tu amplia sonrisa.

El lobo del chico estaba más que feliz, dando brinquitos y moviendo la cola sin parar, por fin había encontrado a su tan esperada Omega.

----¿Por qué no comienzo por acompañarte a tu casa? Ya casi va a salir el Sol.

----Es cierto. No me había dado cuenta. Me van asesinar cuando llegue.---- Te paraste rápidamente del suelo mientras lloriqueabas, teniendo a un divertido chico que se burlaba de ti ante tu comportamiento.

----Entonces mejor nos apuramos.

Se levantó aún sonriente y luego de sacudir su pantalón negro te extendió su mano esperando a que se la aceptaras.

Y no tardaste ni dos segundos en tomarlo y arrastrar a tu, ahora Alfa, por todo el camino hasta tu hogar.

𝐓𝐚𝐞𝐲𝐨𝐧𝐠 𝐑𝐞𝐚𝐜𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬  /𝐍𝐂𝐓/Donde viven las historias. Descúbrelo ahora