𝐓𝐚𝐞𝐲𝐨𝐧𝐠 𝐑𝐞𝐚𝐜𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 /𝐍𝐂𝐓/

♥️ Tú eres mi chico ♥️

Taeyong y tú llevaban una relación de más de dos años, y tenían el privilegio de vivir juntos.

Una tarde, decidiste preparar una cena especial para ambos, porque una de las cosas que siempre te proponías, era hacer feliz a tu novio. Además de que siempre era agradable que él degustara de tus platillos.

Él miraba la televisión tranquilamente en la sala. En tanto tú, ya estabas en la cocina, lo suficientemente concentrada con todo lo que ibas a necesitar.

Cuando comenzaste a cortar los vegetales, accidentalmente te heriste con el cuchillo en el dedo índice de tu mano izquierda, provocando que brotara un poco de sangre del pequeño rasguño.

----¡Auch!---- Exclamaste frunciendo el ceño, observando a tu dedo.

----¡¿Qué te pasó?! ¡¿Fue algo grave?! ¡¿Quieres que llame por una ambulancia?!---- Te preguntó él, cuando en menos de cinco segundos, ya se encontraba en la cocina con cara de preocupación.

----No es nada grave, sólo es una pequeña cortadura. Debí tener más cuidado con el filo del cuchillo.---- Le respondiste sonriendo para tranquilizarlo, mientras le mostrabas la herida.

Se acercó a ti un tanto serio, y tomando tu muñeca derecha, te llevó hasta la sala y te sentó en el sofá del lugar.

----Espera un momento aquí. Prometo no tardar.---- Dijo dando una leve sonrisa, para luego irse hasta la habitación, de la cual regresó con un frasquito de agua oxigenada, un pedacito de algodón, y una curita.

Se acomodó en posición de cuclillas frente a ti sin decir una sola palabra.

Tomó delicadamente tu mano izquierda, que era la misma  accidentada, y humedeciendo el algodón en el agua oxigenada, limpió todo rastro de sangre sobre tu diminuta herida.

Cada vez que Tae se comportaba contigo de estas maneras tan cariñosas y cuidadosas, tan sólo te quedabas observándolo con ojos de amor. Y una amplia sonrisa se dibujó en tu rostro.

En ese momento cada característica de sus orbes te parecían más que perfectas: Su cabello castaño cayendo sobre su frente, sus ojos marrones llenos de ternura y sus labios rosáceos y delicados.

----No me gusta que te hagas daño.---- Se expresó tiernamente después de terminar su trabajo, para quedarse viéndote a los ojos.

Sin haber borrado tu sonrisa, tomaste con tus dos manos su rostro cuidadosamente, y te acercaste poco a poco hasta dejar un corto beso sobre su boca.

----Gracias, mi amor.---- Dijiste después de haberte separado del beso, sin haber quitado tus manos de su rostro.

Notaste cómo las mejillas de Taeyong se calentaron mientras se quedaban viendo frente a frente, dando una imagen graciosa y adorable.

----D-déjame cocinar  por ti.---- Tartamudeó después de unos segundos. ----Creo que ya has hecho muchas cosas por hoy.

----Tae, yo sé que tu cocinas delicioso. Pero en serio quería hacer esto yo sola para sorprenderte.---- Apretaste tu agarre, logrando que los labios de tu novio se abultaran más.

----¿Y si cocinamos juntos?---- Habló de una forma extraña, gracias a la nueva posición de su boca. No se podía negar, se vio realmente gracioso así que reíste divertida.

----Trato hecho, mi rosita bonita.---- Te levantaste y te fuiste caminando hacia la cocina.

----¿Qué te he dicho sobre llamarme de esa forma?---- Caminaba tras tuya gruñendo.

----No es mi culpa que tu bella cicatriz tenga forma de una rosa.---- Levantaste  los hombros con despreocupación.

----Pero eso no significa que debas llamarme así.---- Hizo un puchero frente a ti para tomarte de la cintura.

----Está bien, bebé.---- Sonreíste derretida por completo ante su encanto.

----Así me gusta más.

Apretó aún más el agarre sobre tu cintura para acercarte hacia su cuerpo y besar lentamente tus labios.

A lo cual cediste encantada, moviéndolos a su ritmo.

Te amo Lee Taeyong. En serio lo hago.