Ella es tan cursi | 𝓳𝓮𝓷𝓼𝓸𝓸

capítulo diez

Jennie.

Suspire frustrada, hoy era el día perfecto para cogerme a Jisoo, pero no he podido cometer mis seducciones hormonales, en el partido trate varias veces de besarla pero acercaba el hot dog, no, no era el hot dog que quería, este tenía ketchup, no leche.

El partido había acabado, los tigres ganaron y ahora la idiota esta se la esta pasando burlándose de mi.

-Dios y ese home run, con solo recordar tu cara al ver la bola fuera del estadio, una obra de arte -rodé los ojos y la pellizque ya cansada de sus burlas.

-Van haber más juegos, aún hay oportunidad -solo obtuve una risa burlona de su parte

-Oye Jiss...tengo ganas de ir al baño -comenté al ver un centro comercial donde seguro hay baños y tendré mi oportunidad de cogerme a la pepino cursi ésta, no importa donde sea.

-Claro, deben haber en ese centro comercial -correspondí a su sonrisa mientras caminábamos al centro comercial.

Empece a mirar en todos lados, buscando un baño vacío, mi sonrisa se agrando al ver un baño solitario por el alrededor, jalé a Jisoo conmigo al baño, no había nadie dentro tampoco.

-¿A dónde crees que vas? -le pregunte al ver su intención de abrir la puerta.

-¿Eh?, a ningún lado, solo pensaba esperarte afuera -negué inmediatamente tomando de nuevo su mano y acercándola a mi cintura mientras mi otra mano se iba a su nuca.

-Tengo una simple pregunta para ti, Jisoo mis dedos comenzaron acariciar su cuello lentamente notando su nerviosismo al tragar saliva-¿Por qué...estas evitando que te bese, hable y...toque como deseo? -sonreí al notar que volvió a tragar saliva.

-¿De qué hablas?, siempre evito que lo hagas -volví a negar acercándome a su oreja.

-Sí, pero esta vez lo hacías con algún propósito, la cosa es...¿cuál es el propósito? -eeje salir un suspiro en su oreja que hizo erizar su piel, la tenía en la palma de mi mano, o eso creía hasta que fuimos interrumpidas por el estruendo de una puerta de uno de los cubículos, adivinen quién.

-Estoy pensando seriamente que mi presencia oculta las excita, para cuando al fin lo hagan me mandan la dirección y me escondo en el baño -Park Chaeyoung nos regaló una sonrisa y se retiro caminando de manera extraña, pense que sería de sus problemas intestinales hasta que Lisa salió del mismo cubículo que ella colocándose bien los pantalones.

-Encanto Manoban -Lisa nos guiño el ojo y se fue.

Ya molesta por todas las malditas interrupciones agarre la mano de Jisoo y salí de aquel baño. Caminé a la salida del centro comercial dando pisadas fuertes, jalando a la pelinegra con fuerza, yo no me estaba dando cuenta que mi acompañante estaba casi por caerse no fue hasta que esta me detuvo y me halo a su cuerpo que reaccione.

-Hey, tranquila, ya tendremos nuestro momento a solas, solo tu y yo -Jisoo me regaló una calmada sonrisa que me hizo ruborizar, luego se acercó a mi rostro y no se por qué diablos había cerrado los ojos al sentir sus labios en mi mejilla dejando un cariñoso beso y diablos x2, era el mejor maldito beso que había recibido.

-¿Me das otro? -pedí por primera vez avergonzada por algo tan estúpido, aún así valió la pena al recibir otro beso en la mejilla de su parte.

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-Dios, fue tan lindo, sus labios son tan suaves, ahg, Jisoo es increíble -suspiré feliz tirándome a mi cama terminando de contarle todo a Nayeon, la cual solo se reía- ¿de qué demonios te ríes conejo? -le pregunte ya cansada de su risa.

-Te gusta Kim Jisoo -Esta vez fue mi turno de reír y con muchas fuerzas-.Ríete todo lo que quieras pero pareces una adolescente en su primer amor o en palabras hormonales, su primera masturbación -Nayeon salió de mi habitación dejándome sola y algo pensativa por primera vez en mi vida.

-¿Jisoo siendo mi primera masturbación?, ja, ni en sus sueños -reí mientras bajaba mis bragas y activaba mi dildo rosa.