14. Destinados a entenderse- Mewgulf - Terminada

Dieciocho

El día de la boda de Pen y Lukkade llegó al fin y un más que nervioso Mew esperaba fuera de la mansión, junto a un molesto Gulf, el cual no dejaba de resoplar y maldecir mientras caminaba de un lado a otro.

Algunos invitados hablaban mientras esperaban y combatían el aburrimiento en los jardines de la mansión donde tendría lugar la ceremonia.

...-Crees que terminará pronto este suplicio -dijo el moreno haciendo una mueca.

-Cualquiera diría que no estás feliz-habló el mayor con sorna-... al menos deberías disimular por nuestros padres.

-¿Feliz?, ¿bromeas verdad?, Estoy harto de esto.

-Hola-se escuchó una voz familiar tras ellos.

-Hey hola lindo, que bien que llegaste.

El moreno miró con confusión como su castaño amigo besaba la mejilla de Mew y este le correspondía gustoso.

-Vaya, estás increíble Gulf-habló nuevamente Saint.

El moreno chasqueó la lengua con fastidio.

-Wow tu si que lo estás, precioso-hablo entonces el mayor, al ver que su hermanastro no decía nada al respecto.

Este se sonrojó.

-Oh, tu siempre tan adulador Mew.

De repente, Janis una de las guapas ayudantes de la empresa apareció para saludar muy cariñosamente también.

-Hola hermosa, ¿Como estás?

-Muy bien, oye, este es tu hermano, wow, no exagerabas, es muy guapo.

El mayor asintió al igual que Saint mientras que Gulf realmente molesto, hizo caso omiso al cumplido y a la mano extendida esta.

Tras unos segundos, la chica la retiró atónita pues el moreno se giró sin hacérsela besado como habían hecho el mayor y el castaño.

-Esto es tan hermoso Mew, gracias por invitarme.

-De nada preciosa, anda vamos y entremos a la casa para ver si los novios ya están listos.

Tras verlos alegarse, el moreno apretó sus puños y soltó un pequeño grito.

-Aaaah, lo odio.

-Eres muy exagerado amigo-dijo Mild a su espalda

Gulf se giró y lo miró con molestia.

-Idiota, joder, al fin llegas-... Nadie en esa familia es de mi interés, ni lo será jamás.... De veras compadezco a mi madre, en menuda se ha metido.

El novio salió en primer lugar, entonces los invitados fueron tomando asiento en los bancos colocados para la ceremonia.

Cuando la música comenzó a sonar, Pen y Mew, el cual ejercía de padrino caminaron por el pasillo hacia el altar, donde junto al sacerdote esperaron la llegada de la novia y el otro padrino.

Minutos después, hermosa y radiante, la madura modelo caminó del brazo de su hijo, mientras los invitados expectantes por su belleza los miraban embobados.

Así que allí estaba este, malhumorado y teniendo que aguantar los cuchicheos de los presentes y lo que era peor, las risueñas y cómplices miradas entre Mew y Saint, sentado en los primeros bancos donde se sentaban los familiares más allegados.

Unos novios realmente muy nerviosos se dieron el si quiero, se intercambiaron los anillos y firmaron el acta matrinonial, seguidos de sus testigos.

La ceremonia fue corta pero muy intensa y Pen y Lukkade irradiaban amor por los cuatro costados, aunque sus hijos no dejaron de mirarse y hacerse señales y únicamente Mew les felicitó al terminar.

Tras tirarle los pétalos de rigor, los recién casados y sus invitados caminaron hasta las mesas colocadas al otro lado del gran jardín.

Allí, todos alzaron sus copas y brindaron por la linda pareja y acto seguido, unos preparados y elegantes camareros sirvieron una exquisita comida.

Los novios eligieron un menú variado y una tarta muy bonita y hermosa, la cual a todos estaba gustando y entre baile y baile, los invitados rieron y disfrutaron de la fiesta.

De repente se escuchó un gran estruendo que procedía de la casa, luego unos gritos, entonces la música cesó y tanto los novios como sus invitados corrieron a ver que sucedía.

Lukkade tuvo un mal presentimiento y este se cumplió tras ver a su hijo completamente ebrio en el suelo, peleándose con su hijastro.

-¡Gulf hijo!, ¿Qué demonios estás haciendo?

Rápidamente, Pen y otros separaron a los dos chicos.

-¡S-Soltarme idiotas!, ¡Soltarme ya!, ¡Voy a matar a ese bastardo!-gritó el moreno tambaleante.

Todos miraron al mayor, el cual se limpiaba la sangre del labio.

-¿Qué ha ocurrido hijo?-preguntó el empresario mirándolo mientras Saint se acercaba y se abrazó a este.

-Lo siento papá- habló Mew-...no ocurre nada, solo un malentendido.

El castaño negó mirando a Gulf.

-Él empezó a golpearle sin más, ha bebido mucho y ....

-¡Callate maldita puta!-le gritó entonces el moreno sin dejarlo terminar.

Lukkade suspiró con resignación y se acercó a su hijo.

-Cariño, anda ve a acostarte, por favor, mañana estarás mejor.

-Si hijo-continuo Pen-... es mejor que te acuestes, hablaremos mañana de todo esto.

Gulf bufó y finalmente se soltó del agarre.

-Yo no soy tu hijo y no pienso quedarme aquí por más tiempo, me iré a mi maldita casa.... y vosotros- dijo entonces mirando a Mew y a Saint-...no quiero volver a veros en mi vida.

Tras irse el moreno, Pen dispersó a sus invitados para que siguieran con la fiesta, luego miró a su hijo.

-¿Qué ha pasado Mew?, ¿Por qué os peleaste así en nuestra boda?

Este suspiró con pesar pero no habló.

-Nos estábamos besando y de repente Gulf vino y tras gritarnos barbaridades, empezó a golpear a Mew-habló entonces Saint-... estaba como loco, no sé que diablos le pasó.

El empresario miró a su hijo muy afligido.

-Mew, creí que viviendo juntos, aprenderíais a llevaros bien pero creo que lo he empeorado todo.

Mew chasqueó la lengua incrédulo.

-No es tu culpa papá, anda ve con tu esposa y olvidemos esto.

Pen asintió conforme.

-Está bien hijo, ya hablaremos.

Tras irse Pen, Mew miró al castaño.

-Anda Saint, vamos, te llevaré a casa.

-Pero es tempran...

-Estoy cansado, por favor.

Saint asintió con pena.

-Si, claro, iré por mi chaqueta.

......

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