A regañadientes, Gulf se va con su madre a vivir a la mansión del novio y futuro marido de la mujer. Una vez allí, estos se encontrarán además de con el empresario, con Mew, su guapo y único hijo, el cual se queda prendado al instante del moreno, au...
Mew miraba fijamente al moreno, mientras que este permanecía con su boca entreabierta por la sorpresa y la posición.
—¿Creías que podías robarme sin más?—habló de nuevo.
Gulf bufó y se retorció en los brazos de este.
—Eres un jodido idiota, casi me da un infarto...joder, tan solo es una mísera bolsa de patatas.
El mayor se encogió de hombros y lo incorporó pero no lo soltó.
—Hey, sueltame ya, ok, quédate tus malditas frituras.
El mayor negó sonriendo.
—No creerás que voy a dejarte ir como si nada, a pesar de que me las devuelvas, si lo hago podrías volver a robarme en otra ocasión.
Gulf resopló molesto.
—Eres un egoísta, si me hubieses dicho que ibas a la tienda, yo habría ido también.
—Haremos algo, ¿Ok?.
El moreno lo miró dudoso.
—¿El qué?
—Yo te soltaré y te dejaré entrar aquí y robarme todo lo que quieras, si prometes que a partir de ahora, no vas a tratarme como una mierda sino como una persona...como a un compañero de apartamento, nada de insultos, malas palabras, nada de ignorarme o hacerme algún desplante.
Gulf frunció el ceño.
—Ni lo sueñes, puedes comerte todo hasta reventar, seguiré tratándote como me de la gana, no te soporto, odio tenerte cerca.
El mayor suspiró con pesar.
—Oye, ¿En serio qué te ocurre?, ¿Por qué eres así?
El moreno chasqueó la lengua con fastidio.
—No tengo porqué decirte una mierda, ¿y ahora vas a soltarme de una jodida vez o tendré que darte un rodillazo en los huevos?
Mew asintió entristecido y acto seguido abrió sus brazos.
—Ok, veo que seguirás igual.
Gulf lo miró furioso y entonces le tiró la bolsa a la cara.
—Haré lo que sea para que te largues, este lugar era solo para mi y tu no estás en mis planes.
Luego de eso, el moreno salió de allí y corrió a su habitación donde se encerró y volvió a tumbarse en la cama.
(...)
Más problemas no se hicieron esperar entre los chicos pues a la mañana siguiente y tras no dormir nada en toda la noche por estar pensando en Gulf, el cual tras la situación vivida entre los dos unas horas antes, creyó que seguía dormido en la habitación contigua a la suya, Mew se levantó y tras coger su toalla, se al baño.
...-¿A dónde crees qué vas?, yo soy el primero que usa el baño en las mañanas, así que te aguantas-lo detuvo el moreno cuando este iba a entrar.
El mayor se quedó de piedra al girarse pues se encontró con este desnudo de cintura para arriba.
-L-Lo si-siento, wow-él sabía que este tenía un cuerpo perfecto pero jamás lo había visto tan se cerca.
-Cierra la boca o comerás alguna mosca.... Hey, ¿Me estás oyendo?, apartate ya de la puerta, quiero ducharme, ¿o acaso quieres ser espectador?-habló este ante la petrificación de Mew.
-No...no emm, está bien, ve tu primero-balbuceó el más bajo apartándose.
Este estaba con una risa tonta en la cara además de un notorio nerviosismo.
—Oye, date prisa, debo ir a la mansión a coger mis cosas.
Gulf asintió y luego se metió en el baño cerrando la puerta.
-Oh joder-Susurró el mayor agarrándose la cabeza con las manos -...¿cómo puede ser tan rematadamente sexy?, pensé que iba a morirme frente a él, realmente esto va ha ser muy duro.
Este estaba muy sofocado y excitado y tras regresar a su habitación, se tapó la cara con una almohada y gritó eufórico para que no se le escuchara.
Cuando por fin el menor terminó de asearse salió ya vestido, entonces este se dispuso a entrar.
—Emm, cuando te vayas puedo acompañarte—Habló el moreno deteniendole—…necesito unas cosas que me dejé allá.
Mew asintió conforme.
—Está bien, en cuanto salga iremos en un taxi.
Bajo el agua, el mayor no pudo evitar pensar en el moreno desnudo y entonces una erección le azotó.
—Oh mierda, ¿Por qué sigues excitandote?—Se regañó—… eres un tonto, él no te soporta y jamás te verá como a un hombre.
A pesar de sus intentos por ignorar su erección, Mew no pudo, así que finalmente tuvo que hacerse una paja y aliviarse para poder salir y seguir con su vida.
Tras terminar su ducha y secarse, este se vistió la ropa del día anterior y salió, encontrándose al moreno perfectamente arreglado y con su cara de molestia habitual.
—Joder, creí que te habías ahogado... venga apurate, es tarde.
Mew resopló con resignación.
-Tranquilo, ten paciencia-se dijo a sí mismo en un susurro-...ignoralo tú también, él jamás cambiará y aún te queda todo un año para soportarlo.
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