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El doctor al ver el semblante preocupado de padre e hija se apresuro a explicar.

-Lo siento creí que lo sabían, los gastos médicos ya están cubiertos

-No entiendo, ¿Cómo que los gastos médicos están cubiertos?- está vez fue su padre el que hablo.

-Si lo prefieren,- mencionó el doctor con duda-.  Lo pueden checar en recepción.

Sam no dudo ni ún segundo en dirigirse al area de recepción, ella tenía miedo de que fuera un error de la clínica y al final tuvieran que pagar una cuenta inmensa.

Pero jamás imagino lo que la recepcionista le diría.

Pues la cuenta efectivamente había sido pagada y por más ni menos que el señor De La Rosa.

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-No tenías que hacerlo Lia- decía una y otra vez, Sam al teléfono.

-No te preocupes Sam, además, está vez, fue una decisión que tomaron mis padres.

-Yo no se...

Amy se vió interrumpida por su madre, quién le pidió el telefono para hablar personalmente con Samanta y ver si ella podia calmarla.

-Sam, cariño, tú no te preocupes, ya todo está arreglado.

Sam no podía con la  Verguenza.

-Señora De La Ro...- Escucho un carraspeo al otro lado de la linea y enseguida se corrigió-. Virginia, yo... se lo agradezco mucho pero, en verdad no era necesesario, yo no tengo como pagarle esto ahora mismo, pero en cuanto...

-Y no tienes por que hacerlo- interrumpio la madre de Lia -. Sabes que te queremos mucho, y que te consideramos parte de nuestra familia, y que tanto mi esposo como yo estamos felices y tranquilos de saber que podemos ayudar, no pienses en devolver algo que no te estamos cobrando, cariño- dijo Virginia con ese tono cariñoso tan caracteristico de ella-. ¿Como sigue tu mami?

-Ella está mejor, en verdad muchas gracias, yo...

-Ya Sam no lo pienses tanto, cariño, mejor disfruta estos días a tu mamá, y por lo demás no te preocupes que ya nosotros nos estamos haciendo cargo.- la interrumpio otra vez, esta vez usando un tono de regaño un poco fingido-. Te paso a Amy y saludame a tu mami, chao querida.

-Así lo hare virginia y en verdad muchas gracias.

Amy tomó el teléfono y siguió hablando con Sam por unos minutos más.

Más tarde se dispuso a descanzar un rato cuando escucho un toque en su puerta, y ella indico que podían pasar.

-Ey ¿cómo sigues?

-Ya más tranquila.

-¿Cómo sigue tu amiga?

-Su mamá está mejor, solo fue un susto, lo malo es que ella no podrá venir, prefiere quedarse en casa estos últimos días de vacaciones.

-Ya... pero la podrás ver dentro de una semana, exagerada.

-Lo se, pero yo quería que ya la conocieras.

-Eso sera pronto, no seas tan desesperada.

-Fastidioso...

Dijo Lia tomando una almohada y golpeandolo con ella, iniciando una guerra.

-Valla pero que divertidos- dijo Alex, entrando a la habitación- y se supone que el infantil soy yo.

-Envidioso- ataco Cris, lanzandole una a él.

-Sera mejor que bajen, me mando tu madre a avisarles que la cena está servida.

-Bajen ustedes, yo en un rato los alcanzo.

-Segura, ya sabes como es tu madre con eso de la puntualidad.

-Segura.

Cris salió de la habitación junto a Alex, quién de inmediato se dio cuenta de la cara de preocupación que tenía su amigo.

-Ey, amigo- llamo Alex pero Cris no contestó-. Ey, Cris, ¿Qué te pasa?- dijo tomandolo por el brazo.

-Llame a Sam, pero no contesta, no he tenido noticias suyas desde que llegamos- dijo con tono preocupado.

-Si que te pegó fuerte eso del amor- dijo burlon-. Tranquilizate igual ella lo está pasando de lo mejor en su viaje y tu preocupandote, ademàs si tanto te interesaba,  ¿por qué no la invitaste?.

- No podía arruinar sus planes...

-¿Es eso o que todavía no le dices quién eres en verdad?

-Las dos cosas.

-¿Por qué aún no le has dicho?, eso te puede jugar en contra, amigo.

-Ya lo se, no me pongas más nervioso de lo que ya estoy.

-Y... ¿Cuándo se lo piensas decir?, porque por si no lo recuerdas ya estamos a nada de entrar a clases y si no se lo dices tú, alguién más lo puede hacer y creo que eso sería peor.

-Se lo voy a decir regresando de este viaje, y realmente espero que ella sepa comprender el porque lo hice- dijo más preocupado que antes.

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-Sam, lo siento hija no debiste de haber cancelado tus planes por mí- dijo su mamá, afligida.

-No te culpes má, yo quiero estar aquí, ya los extrañaba.

Sam se había ofrecido a cuidar a su mamá esa noche.

-Pero, eran tus vacaciones, ¿Cómo  quieres que no me sienta mal por arruinarlas?,
Se que trabajaste mucho para poder ir.

-Aquí también puedo descanzar y estaré más tranquila si te cuido aúnque sea por unos días, no creas que ya te salvaste del regaño, Maria- regaño Sam, llamando a su madre por su  nombre-. ¿Por qué no estás comiendo bien?, que no entiendes que si tu no estás bien, nadie en esta familia lo va a estar, tú eres nuestro pilar mamá, todos te necesitamos a tí para estar bien- sollozo en los brazos de su madre.

Pues según los analisis que le  hicieron, habían arrojado que tenía una leve anemía, que si no se trataba a tiempo, podía desarrollar en algo más grave.

-Hija...

-Prometeme que te vas a cuidar, prometelo mamá.

-Te lo prometo hija, ya todo va a estar bien.

Sam la vio un poco mas tranquila.

Pasaron unas hora platicando y poniendose al día sobre la vida de Sam en la universidad.

-Enotonces... este chico, ¿Alex?

-Es grandioso mamá- dijo llena de ilusión.

-Oh, mi Sam, por fin está viviendo.

-Mamá...

-¿ Se están cuidando?, espero que sí por que es muy pronto para salir embarazada.

-¿Quién está embarazada?- interrumpió su hermana menor, entrando a la habitación junto a dos de sus hermanos y su padre, quién puso una cara de confusión total.

-¿Samanta?

-Nadie pá, solo estabamos palticando- dijo saliendo de la habitación.

Y una vez más checo su teléfono celular, solo para darse cuenta de que no tenía niguna llamada de él, y eso la estaba preocupando.

Por primera vez ella estaba experimentando ese sentimiento de ilusión. Y tenía miedo de que para Alex solo fuera un juego, y esa idea no se había ido de su cabeza desde que llegó a su pueblo, pues no había tenido noticia alguna de él, quién había prometido llamarla.

pero al encender él celular, entendió el porque tal vez no tenía registro alguno, pues el celular marcaba que no tenía señal.





















Entre La Amistad Y El AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora