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Dejen su "hola" si quieren que les dedique un capitulo
xviii. reencuentro padre e hija
Astrid Mikaelson-Stilinski
Los ronquidos de Logan no me ayudaban a concentrarme, hace menos de treinta minutos mi padre vino a despedirse de mí, hizo una mueca al ver a Logan acostado en mi cama y abrazándome, pero termino resignándose.
Deje al lado la computadora para poder escribirle un mensaje a Jo, diciéndole que le había hecho el informe de biología como regalo de cumpleaños adelantado, mi mejor amiga me mando un montón de emojis de corazón.
También le respondí un mensaje a Elijah, aunque no se lo crean, mi hermano sabe ocupar algo de tecnología de este siglo, el mensaje decía si yo necesitaba algo de dinero, o alguna otra necesidad, en donde respondí que teniendo a Kol como mi banco personal estaba todo bien.
El gruñido frustrado de Logan resonó por toda la habitación, deje de mirar mi celular para mirar como el hibrido apagaba la alarma que había programado para bañarse y volvió a acurrucarse a mi lado para abrazarme.
—No quiero levantarme—su voz se escuchó ronca, se notaba que recién se había despertado, podría ser mi mejor amigo, pero su voz ronca y su acento británico a veces me hacían derretirme—¿puedo faltar?
—Ambos sabemos que el equipo no ganaría sin ti, corazón—le respondí mientras acariciaba sus cabellos, lo escuche suspirar.
—Haces que mi ego se suba a los cielos, bonita—pude verlo sonreír egocéntricamente—. Dios, es hora de levantarme, bonita, déjame de acariciarme o me voy a volver a dormir.
Solté una risa, pero obedecí y le dejé de acariciar el cabello, seguí ocupando mi celular mientras escuchaba a Logan levantarse y dirigirse al baño para una refrescante ducha.
—¡Subiste una historia mía durmiendo! —escuche su grito proveniente del baño—. Incluso durmiendo soy hermoso.
—Jo puso que te veías horrendo—con mi pesar me levante de mi cama para poder ir a ver a mi hermano, estaba con visita en su cuarto.
Mi mejor amigo soltó una maldición para la mujer lobo, lo que me saco una sonrisa, camine por el pasillo de la casa para luego abrir la puerta que daba con el cuarto de mi hermano.
Vi a Danny sentado al lado de mi hermano, y por el otro extremo estaba Derek leyendo.
—Danny, hola—lo salude sonriendo.
—Hola, As—me correspondió la sonrisa.
—¿Qué haces con el idiota de mi hermano? —pregunte de forma curiosa mientras me acercaba a ellos.
—Tarea—se encogió de hombros— ¿Por qué él tiene sangre en su polera? —apunto a Derek.
—Sí, tiene terribles derrames en la nariz—le explico mi hermano con nerviosismo.
