𝑶𝒃𝒔𝒆𝒔𝒔𝒊𝒐𝒏 | norenmin 🍶

𝐕

Jaemin invito a Renjun a su casa para comenzar un proyecto de clases en el cual era en grupos, pero la noche llego más rápido de lo esperado.

— Bueno, creo que avanzamos mucho, ya debo volver a casa. — Aviso Renjun poniéndose de pie.

— Espera. — Lo detuvo Jaemin tomando la mano del castaño.

— Ya es tarde, ¿Puedes quedarte aquí hoy? — Agregó sonriente.

— Literalmente vivo enfrente, puedo solo cruzar y ya. — Habló entre risas.

— Por favor, siempre estoy aquí solo. Quédate conmigo esta vez.

— Esta bien, iré por mi ropa y vuelvo.

— No, yo puedo prestarte ropa, no te preocupes.

Renjun no se alarmó por la invitación de su amigo, ya que era normal ¿Verdad? Los amigos podían dormir en el mismo lugar, como una pijamada, sería divertido.

...

Las horas pasaban con normalidad, ambos cocinaron pizza y luego jugaron algunos juegos de mesa que Jaemin guardaba para ese tipo de ocasiones, parecía una noche normal, hasta que el pelinegro abrió la boca.

— Tengo un juego que quiero probar contigo, Renjun.

— ¿Ahora qué? Dijiste que querías jugar a esto y luego iríamos a dormir.

— Pero este es un juego divertido y te va a gustar, estoy seguro.

Renjun cedió ante el insistente Jaemin quien salió de la sala por un momento y al volver apareció con algunas botellas de alcohol.

— Oye espera, no pretendes que tomemos eso ¿Verdad?

— Si no, no sería divertido, tenemos que estar a un punto de que ya no recordemos nada.

— Jaemin tenemos clases mañana.

— Te daré un remedio especial y estarás como nuevo.

Renjun volvió a aceptar lo que decía el pelinegro, después de todo, solo sería una noche y mañana volvería a la normalidad completamente.

— Por favor explícame el juego.

— Bien, pero no te alarmes.

— Ya dilo de una vez, y luego veremos si jugamos o no.

— Bien, primero, tomaremos un poco.

Jaemin mezclo en los vasos distintos tipos de alcohol, el suficiente como para embriagar a alguien con solo un par de tragos.
Tomaron hasta perder la cordura, al menos Renjun, el pequeño había cambiado completamente, reía incluso si nadie hablaba, mientras Jaemin quien tenía resistencia al alcohol lo veía tiernamente.

— Bien, ahora, explicaré las reglas del juego.

— Ya quiero ir a dormir.

— Pronto iremos a dormir.