Capítulo 28: Navidad

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El invierno llegó a Nueva Orleans, un clima frío y húmedo, toda la familia encerrada para una navidad llena de emociones, aún así, Elijah y Hayley tratando de animarnos a Nik y a mi, en lo único que pensamos es nuestra pequeña bebé lejos de nosotros para mantenerla a salvo, estando en un luto que precia una eternidad y tratando de manger el animo aún en navidad con la familia incompleta.

Sentada en la sala apareció Hayley con una sonrisa y entusiasmo para animarme con una taza de café en la mano y se sentó a mi lado agregando segura.
—Danica, se que lo que están pasando Klaus y tú es difícil, pero hoy es noche buena y quisiera que mi hermana esté feliz con su familia aún que no estemos todos.
Respiro hondo y veo a Hayley a mi lado con una sonrisa de lado a lado con una blusa negra de piel junto con pantalones de piel negros con unos botines, ya preparada para navidad, y menciona sin más cuestionando.
—¿Aún no te haz arreglado?
—No. Pero lo haré Hayley. Se que no e sido muy buena compañía estos últimos días desde que llegaste a Nueva Orleans.
El recinto decorado de navidad y el árbol, fui a mi habitación donde Klaus está sentado en la cama serio y lo observo de reojo me siento a su lado y tomó su mano y digo honesta.
—Klaus, no se cómo sobrellevar esto, se que hiciste todo para protegernos, solo que no hemos estado el uno para el otro, no hemos podido hablar.
—Amor, no te culpo de nada.
Menciona Klaus viéndome tomando mi mano dándonos apoyo.

Saque un hermoso vestido rojo con unos ligeros tirantes, me arregle me puse unos tacones negros y Klaus a mi lado con un traje negro bajamos a la sala principal viendo un hermoso árbol de navidad con regalos y las luces brillando, Elijah y Hayley parados esperándonos, Elijah con su traje azul y Hayley ya arreglada con vestido negro sentados en la gran sala con música navideña al estilo de nueva Orleans,  una cena familiar cantado y hablando de todos los sucesos de lo que vivimos, conociendo a mi hermana mayor que no sabía que tenía, los Mikaelson haciendo una fogata en honor a Rebekah que hacia falta.

Nos preparamos alrededor de la fogata, cada uno escribiendo un deseo para el siguiente año, Klaus tomó mi mano y susurro a mi oído.
—Dime tu deseo Lobita.
—Traer a nuestra hija de regreso con nosotros es en lo único.
—Haremos que suceda, amor.

La noche fue tranquila con la familia sentados en una mesa cenado con comida criolla de Nueva Orleans y sus famosos beignets un delicioso pan frito con azúcar glass, Klaus sentado a mi lado tomando mi mano y Hayley junto a Elijah sentados juntos, compartiendo experiencias y sucesos de la vida.
Klaus y yo tratando de mantener el espíritu navideño por Hayley y Elijah para mantener la esperanza en este día especial, aún faltando varios integrantes en la mesa.

Con la esperanza de traer de vuelta a nuestra y hija a casa con nosotros y hacer de Nueva Orleans su hogar.

La chica del Híbrido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora