The Black Love #1 [✔️](Historia Sirius Black)

Capítulo 11: Superación

     Sirius caminó hasta su habitación, cerró la puerta con cuidado y la trabó. Cuando por fin estuvo solo, se sentó contra la puerta y pequeñas lágrimas recorrieron sus mejillas. Dolía, cada palabra de lo que le dijo eran ciertas y le dolía. No sabía porqué no podía olvidarse de ella, si ni siquiera salían. Él había superado a muchas chicas, con las que salía por semanas, tan solo de la noche a la mañana. Tal vez Meissa no sólo le gustaba, tal vez él se había enamorado de ella.

•••

     Shira al ver a Sirius alejándose de Mei, se le acercó con lentitud. Rápidamente pudo observar que Mei estaba con lágrimas en sus ojos. Se sentó a su lado y la abrazó de costado.

     —Oye, tranquila… ¿Quieres contarme lo que sucedió?

     —Sirius dijo que no me quiere volver a ver, dice que yo lo lastimó. Tú tenías razón el de verdad gusta de mí, creo que se enamoró de mí y rompí su corazón —dijo sollozando.

     —No digas eso, tu no lo hiciste a propósito. Mei tu eres una gran mujer y súper inteligente, no llores por ningún hombre. Menos por algo que no te debería afectar.

     —¿Por qué no debería afectarme?

     —Por qué es él que quiere alejarse, él debería estar mal, no tú. Tú no querías ser su amiga en primer lugar, ¿Verdad?

     —Es verdad, pero luego le tomé cariño. Me gusta pasar tiempo con él, es un excelente amigo. Tal vez, si yo no me hubiera comportado de esa forma, él seguiría siendo mi amigo.

     —No, no digas eso Meissa. Él cometió un error antes y tú lo perdonaste, ¿Ahora tu cometes el error y él decide no volver a hablarte? Me parece que tú eres la víctima aquí —dijo Shira, defendiendo a su amiga.

     —Gracias Shira, pero no es lo mismo. El me quiso hacer una broma y se arrepintió, en cambio, yo lo acuse de un montón de cosas. El me confesó que gustaba de mi y me pidió una oportunidad, y yo me fuí. ¿Cómo pude haberlo hecho? Soy cruel, soy muy mala —dijo secándose las lágrimas. Miró a Shira y agregó —: De todos modos, no fue lo peor que hice.  Durante las vacaciones le escribí cartas, como si nada hubiera sucedido.

     —Amiga no puedo animarte, lo siento, pero va contra mis principios como lector.

     —¿Shira, bromeas? ¿De qué principios me hablas? —Le pregunto Mei, mientras secaba una última lágrima.

     —Hablo de que jure que cuando un personaje hacía lo que tú hiciste, yo siempre estaría del lado del que se quedaba —dijo Shira, apretando los dientes.

     —¡Shira, soy tu amiga, no un personaje de tus novelas! —bramó Mei.

     —Eso es lo que piensas —dijo en voz casi inaudible.

     —¿Que?

     —Nada, vamos a comer algo, eso te subirá el ánimo.

     Mei y Shira se fueron al Gran Comedor. Shira tomó todas las cosas dulces y las puso en un plato. De pronto Meissa pasó de estar triste y deprimida, a tener un shock de azúcar por tantos pastelitos de calabaza.

•••

     Remus había pasado unas vacaciones normales. Él y los demás merodeadores, se habían quedado en la escuela. Él se había disculpado con Sirius un millón de veces, pero Black le repetía que él no tenía la culpa.

     Se dirigió a la habitación. Quería buscar una bufanda, ya que afuera hacía demasiado frío. Cuando quiso ingresar al dormitorio, se encontró con que la puerta estaba trabada. Pensó con seriedad en sí tocar la puerta o no. Tal vez Sirius o James la habían cerrado, porque alguno estaba con una chica. Luego recordó que James solo tenía ojos para Lily y que Sirius no superaba lo de Meissa. Finalmente tocó la puerta con cuidado y Sirius le abrió.