Bebé a bordo.

Capítulo 9

Bebé a bordo.

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Steve miraba ilusionado las carreolas y las cunas que exhibían en la tienda; Tony a su lado sonreía.

Habían pasado el tercer mes para entrar al cuarto. Las noticias eran maravillosas; su bebé estaba creciendo bien, su cuerpo estaba respondiendo positivamente gracias a la presencia del alfa. En resumen: las feromonas alfa de Steve eran una gran ayuda para la ausencia de la marca.

"—Estuve pensando en su situación, señor Stark. —El médico los miró ambos—. No sé cual sea su relación, pero la marca no tiene que ser forzada. Considero, aún con los títulos que tengo, que una marca no debe ser sólo por obligación, tiene que ser por un sentimiento compartido. —El doctor les extendió un folder con información—. Recopile datos. La falta de marca se nivelara, al menos lo suficiente, con las feromonas del alfa.

—¿Mis feromonas? —Steve miraba los papeles.

—Así es. —El doctor procedió a explicarles—. Cuando un Omega tiene dificultad para ser marcado, ya sea por una deformación en su glándula omega o su falta de aroma por alguna mutación genética, es bien sabido que los alfas los marcan con su aroma. El aroma de un alfa en el cuerpo del omega sirve para estabilizar las hormonas, modificarlo físicamente y advertir que ese omega ya está enlazado. El efecto dura máximo 24 horas, así que usted tendrá que cubrir con su aroma al señor Stark todos los días. —El médico miro al castaño—. Así el bebé también sentirá su presencia y el embarazo reducirá su riesgo.

—¿De verdad podemos hacer eso? —Tony leía los papeles.

—Ustedes si. —El doctor les sonrio—. Señor Stark, según lo que he observado, usted no rechaza el aroma del señor Rogers. Hay una gran compatibilidad. Sería un problema que su mecanismo no aceptará la esencia del alfa, pero no es el caso.

Tony quiso soltar un suspiro de alivio. Tenían otra opción. "

—Me preguntó si será buena idea comprar azul. —Steve lo regresó a la realidad—. ¿Y si es niña?

—Aún si fuera niña, el azul no tiene nada de malo, cap. —Tony llegó a su lado y miró la cuna—. Además, la cuna azul se ve mejor que la rosa o blanca.

Steve rio.

—Es cierto.

Ambos pidieron la cuna azul. Pronto siguieron con más ropa para donita. Compraron desde blanco y naranja, hasta azul y morado.

Habían varios colores en esas bolsas.

Tony después sugirió empezar a comprar pañales y biberones. Cuando su bebé llegara, tenían que tener absolutamente todo, hasta el más pequeño detalle.

Rogers estaba disfrutando de su pequeña salida improvisada. Steve era el tipo de alfa que ansiaba ser padre, y que sabría como serlo.

No había bebé con más fortuna que Donita.

—¿Quieres un helado? —Steve lo miró con ojos brillantes y sonrisa feliz.

Tony no pudo negarse ante aquella imagen.

Sé sentaron en una banca del supermercado y espero paciente a que Steve regresará con los helados. Minutos después, el rubio le dio el de chocolate.

—¿Has pensado en nombres? —Preguntó Tony rompiendo el silencio.

Steve analizó la pregunta por algunos segundos para después poner una mirada melancólica.

—... No creo que sea un buen nombre.

—Dímelo. —Tony lo miró atento—. Si es bonito puedo considerarlo.

Steve rio ante sus palabras. Cuando terminó de reír, suspiro.

—Bueno, pensé que si llegaba a tener un cachorro, le pondría James. —Steve sonrio mientras miraba el piso—. En honor a mi mejor amigo, mi hermano. —El omega lo miró alentandolo a continuar—. Bucky siempre fue un ejemplo a seguir. Era un alfa entre Alfas, conforme crecía más me convencía de que era genial. Me salvaba en situaciones difíciles, jamás me abandono cuando mi madre falleció, y me prestaba dinero cuando tenía una cita que seguramente terminaría mal. —Rio ante los recuerdos de un molesto James porque su rubio hermanito fue plantado—. James fue una parte importante en mi vida. Era la única familia que me quedaba.

Tony sonrio ante los dicho. Steve se sentía solo aún con 5 vengadores a su alrededor.

—Bien, entonces si es niño, le pondremos James. —Tony se dirigió a su vientre—. Tendrás un nombre genial, donita.

Steve sonrio mientras negaba.

—No tiene que ser ese necesariamente, sino te gusta...

—Me gusta, tiene una buena historia detrás. —Tony comió de su helado—. Hagamos esto, si es niño le pondremos James y si es niña le pondremos María. ¿Estás de acuerdo?

Rogers lo miró por largos segundos, su mirada lo recorría con verdadera admiración.

—Estoy de acuerdo.

Tony le sonrio.