POV ELENA AMBROSETTI
-Un placer- dijo la mujer que venía de la mano de Duval. Ella solo miraba a Alexander, y de una manera extraña.
Miré a mi esposo y se notaba incomodo, nervioso y bastante confundido.
¿Qué estaba pasando?
-Finalmente conozco a la joven pareja exitosa- comentó Daniel.
-Para nosotros es un placer conocerlos a ustedes- respondí, ya que Alexander no decía nada.
-Les presento a mi novia, Alexa Russo-
¿Alexa Russo?
Abrí los ojos sorprendida.
¡ALEXA RUSSO!
La mujer que había dejado a Alexander por su primo. La culpable de que él creara muros en su corazón.
Ahora sabia porque estaba tan raro, ella era la causa.
-¿Comenzamos con la reunión?- preguntó Alexa.
Solo asentí con la cabeza. Tomé a Alexander de la mano para sacarlo de su trance y guiarlo para el lugar que debía tomar. Él pareció entender y caminó conmigo.
-Es ella- susurró.
-Lo sé- respondí.
Y esa mujer parecía que no estaba nada afectada de verlo, pues actuaba como si fueran dos desconocidos. Tal vez ella lo había olvidado.
-Te escucho, Alexander- mencionó Duval.
Mi esposo solo sacudió la cabeza, y comenzó con la reunión.
Conforme pasó el tiempo, él se desenvolvía como si ella no estuviera aquí, y solo se centraba en una de las cosas que mejor sabía hacer: Negociar.
Todos lo mirábamos por la manera en la que se expresaba y como fluía haciéndolo; no era la primera vez que lo veía hacerlo, pues siempre estaba en sus reuniones, pero me sorprendía su profesionalismo. Probablemente, si tuviera a Dylan delante de mí, no podría decir ni una sola palabra.
Cuarenta minutos habían pasado, y la junta por fin estaba por terminar.
-Me gusta tu idea y lo que quieres hacer- comenzó Daniel -Y me gustaría que se negociara en más de una reunión-
No entendí lo que decía.
-Me quedaré algunas semanas en la ciudad, y durante todo ese tiempo quiero que estemos en contacto para finalizar el trato- dijo el hombre.
Alexander solo sonrió falsamente.
-Estaría encantado- mintió.
La pareja se levantó y nosotros los imitamos.
-Nos retiramos, pero estamos en contacto-
Ambos estrecharon sus manos.
-Adiós, Alexander- habló Alexa por primera vez desde que había empezado la reunión.
Nadie se despidió de mí, no me afectó, pero me desconcertó.
Ambos nos quedamos en silencio, mirándonos, intentando saber que iba a pasar o que acababa de pasar. Y así nos quedamos por algunos minutos.
La puerta nos sacó de nuestro trance.
-¿Podemos hablar a solas?- preguntó Aarón mirando a Alexander.
-Elena y yo ya sabemos que Alexa está aquí- respondió él -Ella acaba de estar en reunión con nosotros-
-¿Por qué?- cuestionó confundido.
ESTÁS LEYENDO
¿Para Qué Quedarme? #2
RomanceAlexander y Elena eran la pareja perfecta, pero, ¿esa perfección superaría todos los obstáculos? No sólo se trataba de amor, pasión y dulzura, ahora se había convertido en un juego de confianza, madurez, y sobre todo, dejar atrás a los fantasmas...