Tengo ganas de ti - Luimelia //Segunda parte A3MSC// COMPLETADA

Capítulo 13: Parte 2

A la mañana siguiente, teníamos que ir a preparar ya el show. Iba a ser por la noche y aquello parecía un hervidero de nervios. Todo el mundo andaba de un lugar al otro y no podía parar de hacer cosas. Paula sudaba terminando con la coreografía. Pablo me tenía hasta arriba de tareas que casi me hacía no poder hablar con Paula ni para desearle suerte. Por lo que cuando la cogí finalmente una hora antes del espectáculo, me pareció casi mentira.

-¿Qué? ¿Estás nerviosa?- pregunté acercándome.

-¿Nerviosa?- respiró entre cortada- Nunca....- me miró- ¡ESTOY ATACADA!

-Tranquila- reí volviendo a agarrarla- todo va a salir bien, ¿ok?- le intenté tranquilizar- ¿Qué tal si te ayudo con el maquillaje?

-¿Tú?- me miró casi creyendo que era en broma.

-Oh, vamos- le cogí el estuche sacando las cosas- Tengo una cosa que hacer, Pablo no me coge para que haga algo y estoy contigo- empecé a retocarla- Buena idea, ¿no?

-Buena idea- se dejó esta finalmente tocar- ¿Amelia?

-¿Sí?- la miré.

-¿Cómo terminasteis Luisa y tú?- dejé las cosas sobre la mesa y la miré.

-¿A que viene esa pregunta ahora?

-Yo he preguntado primero...

-Pero yo soy la que tiene derecho a saber por qué te interesa- me defendí ya que, la verdad, no tenía muchas ganas de hablar del tema.

-Porque soy tú novia, ¿por ejemplo?- suspiré, no quería decirle nada, pero estaba confusa sobre el tema.

-Bueno...

-¡Amelia!- y la vocería de Pablo, nos interrumpió- ¡Amelia!

-¡¿Qué?!- refunfuñé mirándolo.

-A la zona de sonido, ¡YA!

-Ok- suspiré mirando otra vez a Paula- Después de todo esto lo hablamos, ¿ok?

-Pero...

-¡Amelia!- la miré, con Pablo así, era mejor irse.

-Ok- asentí dándole un pequeño beso.

-Te juro que hablamos después- salí corriendo por que sabía que Pablo me mataba.

Me dirigí hacia la zona de sonido y me puse los cascos cuando Pablo llegó a mí, no me salvaba de él ni aunque estuviera en la zona donde me indicaba:

-Amelia...

-¿Sí?- lo miré- Ya estoy. No me tienes que gritar ni nada.

-Lo sé- se mostró esta vez más tranquilo- es solo que quiero que vallas probando el sonido, ¿ok?- asentí- No me falles- negué.

Gracias a dios, me dejó a solas después de casi todo el día detrás de mí. El lugar se iba llenando y poco a poco, hasta yo empecé a notar el nerviosismo, y eso que yo no actuaba ni nada. Aun así, me intenté concentrar en el trabajo, necesitaba el dinero.

-Amelia- se acercó de repente uno de los trabajadores- teléfono- observé su mano que traía el principal.

-¿Para mi?- asintió entregándomelo a la fuerza.

-La próxima vez, vas tú. No soy criada de nadie-me respondió este de malos modos.

La verdad, que mal humor tenían todos con el estreno del programa:

-Diga...

-¿jade? Soy yo, María.

-¿María?- pero por qué me llamaba al trabajo- ¿Qué pasó? ¿Está todo bien?