˖࣪ᝰ 06

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Yeonjun contaba con una gran cantidad de dinero para los gastos que llevaría su embarazo, su bebé y para los suyos propios, pero un dinero extra no le vendría mal, además de que prefería mantenerse haciendo cosas y estar activo

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Yeonjun contaba con una gran cantidad de dinero para los gastos que llevaría su embarazo, su bebé y para los suyos propios, pero un dinero extra no le vendría mal, además de que prefería mantenerse haciendo cosas y estar activo. Así fue como ese día tuvo la increíble idea de buscar otro empleo, el anterior donde trabajaba era muy pesado y podía dañar a su pequeño. Estaba agradecido de ser una persona trabajadora y ahorradora, pues estaba perfectamente preparado para la llegada de un bebé.

Salió de casa dirigiéndose a las pequeñas tiendas que se encontraban cerca de su hogar, estaba en busca de algo tranquilo y que no requería tanta fuerza, pensaba en algo así como cajero o ayudante en alguna tienda pequeña.

En todos los lugares a los que había preguntado si necesitaban ayudante la mayoría le decía que ya tenían completo a su personal y algunos otros lo denigraban por mencionar que estaba embarazado.

Tomó un descanso al fin, había estado caminando sin descanso, su condición no estaba a su favor, debía descansar para no dañar a su bebe. Caminó un poco más hasta que se encontró con una cafetería. A pasos lentos llegó hasta el mostrador donde pidió un té para después de pagar y preguntar si necesitaban un empleado más, al obtener una negativa tomó su té helado para sentarse al aire libre. Tenía hambre, ahora ya no solo bastaba con su batido de plátano y chocolate, su bebé quería algo más pesado. Mordió su labio, no quería ir a comer porque todavía le faltaban tiendas por preguntar por el empleo.

—¡Hola! —escuchó una voz alegre que se le hizo muy conocida.

Se giró, encontrándose con el chico alegre de la pastelería. Sonrió para él, invitándolo a tomar lugar en su mesa.

—¿Cómo estás, Beomgyu? —preguntó sonriente.

— Estoy bien —suspiró un poquito— Ayer saliendo del trabajo tuve un colapso emocional, pero estoy mejor ahora —sonrió— ¿Cómo está usted y el bebé?

—Lo siento tanto por eso, Beomgyu... Yo estoy increíblemente bien y estoy seguro de que mi bebé también.

Beomgyu sonrió feliz por el mayor. Detrás de ellos se acercaba la pareja del chico que al reconocer a su novio decidió llamarlo, llamando la atención de ambos chicos.

— Amor...

El alto guardó silencio al pasar la mirada de Yeonjun a su acompañante.

Beomgyu se levantó de su lugar para presentarlos. Yeonjun le regaló una sonrisa al alto y el contrario imitó su acción.

— Él es mi novio, se llama Soobin —los presentó sonriente—  Amor, él es Yeonjun.

Ambos hicieron reverencia para posteriormente darse un pequeño apretón de manos.

Soobin lo reconoció enseguida, era el chico de sonrisa bonita de aquel banco de esperma. Por lo que podía recordar el doctor lo había felicitado por su bebé... ¿Tendría que preocuparse? Claro, podría ser otro chico y no precisamente al que buscaba.

—¿Ya desayunó? —Beomgyu preguntó.

Yeonjun negó apenado, solo había tomado un batido ¿Eso contaba como desayuno completo? Su estómago rugió, su bebé estaba hambriento.

— No... Sólo tomé un batido y salí de casa. Estoy en busca de un nuevo empleo y no quiero que pase de hoy, así que me propuse conseguir algo y más tarde almorzar —mordió su labio con nerviosismo.

— Hyung, venga con nosotros, iremos a desayunar y después Bin me llevará al trabajo, donde de hecho, ayer antes de cerrar colocaron un anuncio de empleo —dijo emocionado— Además el desayuno es importante y más para el bebito que crece dentro de usted.

Yeonjun asintió agradecido, no le vendría mal comer algo acompañado de ese lindo y alegre chico, mucho menos ahora que parecía haber encontrado un lugar donde trabajar. Así que después de aceptar la invitación se puso en pie para caminar junto a ellos.

Yeonjun le regaló una última sonrisa para mirar al alto y tomar la bebida que este le entregaba. Caminaron un poco más hasta que llegaron a un hermoso auto color negro. El alto le abrió la puerta a su pareja y luego corrió hasta a él para repetir la acción. Yeonjun le agradeció con una pequeña reverencia para pronto montarse en el auto.

—¿Qué se le antoja, Hyung? —preguntó.

Yeonjun no sabía que decir, tenía tantos antojos en ese momento. Beomgyu se rio un poco al notarlo indeciso.

— Iremos por algo grasoso, me imagino que el bebé estará de acuerdo.

Y su estómago volvió a rugir. Beomgyu se rió con ternura para después indicarle el lugar a su pareja.

Beomgyu era un chico realmente agradable, en todo el camino no paró de hablar y eso era algo que a Yeonjun le gustaba, normalmente era muy hablador y le agradaba que no sea el único que habló en todo el camino.

Pararon en un Automac, al parecer desayunarían hamburguesas de ese restaurante de comida rápida. Nunca las comió excesivamente pero eran buenas y en ese momento su bebé ansiaba comer.

El alto condujo hasta el trabajo del menor, aparcando en un estacionamiento para bajar y caminar hasta las bancas publicas más cercanas.

— Adelante, Hyung, comamos y vayamos adentro —sonrió.

Beomgyu le entregó la hamburguesa que había pedido y sin más comenzaron a comer. Beomgyu y Yeonjun aún comiendo no paraban de hablar. Por su parte, Soobin los miraba en silencio, había algo en Yeonjun que lo ponía a pensar mucho. Tenía que admitir que era guapo, parecería uno de esos chicos que alguna vez miró en alguna revista o drama de los que Beomgyu veía, pero por lo que sabía, era sólo un simple chico en espera de un bebé de una inseminación artificial.

Terminaron de comer minutos antes de que Beomgyu comenzara su turno en el local. Yeonjun les agradeció por esos pocos minutos que estuvieron juntos y por tomarse el atrevimiento de invitarlo a desayunar junto a ellos.

Beomgyu se despidió de su novio con un besito en sus labios, Soobin acarició sus cabellos con cariño, sonriéndole en forma de despedida. La mirada del alto regresó a Yeonjun, este rápidamente hizo reverencia en cuanto sus miradas se encontraron.

Con el estómago lleno y su bebé agradecido con la pareja era momento de preguntar por el empleo.

Con el estómago lleno y su bebé agradecido con la pareja era momento de preguntar por el empleo

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𝗕𝗔𝗡𝗖𝗢 𝗗𝗘 𝗘𝗦𝗣𝗘𝗥𝗠𝗔 ||𝐒𝐎𝐎𝐉𝐔𝐍Donde viven las historias. Descúbrelo ahora