𝗕𝗔𝗡𝗖𝗢 𝗗𝗘 𝗘𝗦𝗣𝗘𝗥𝗠𝗔 ||𝐒𝐎𝐎𝐉𝐔𝐍

˖࣪ᝰ 12

Su carrito de compras estaba lleno de ropitas de diferentes colores, toallas para bebé, un peluchito, un par de zapatitos elegidos por Soobin ya que dijo que eran bonitos, algunos adornos para la habitación del bebé y una cuna.

Soobin había perdido a Yeonjun por estar mirando los zapatitos de bebés pero en el camino se topó con una carriola en exhibición, Esta estaba a buen precio y era bonita. No lo pensó demasiado, sería un regalo de parte de Beomgyu y él por adelantado.

 —¿Qué es eso? Ya tenemos la cuna —miró curioso la caja que Soobin cargaba.

 —Es un regalo, es muy pronto, pero quiero que sepas que Beomgyu y yo estamos para ustedes.

Los ojos de Yeonjun se aguaron mientras le agradecía. Soobin se rio con ternura para después caminar hasta él y abrazarlo.

Yeonjun no le iba a negar un abrazo, lo abrazó y se refugió en su pecho. Sabía que se veía horrible después de llorar así que intentó hacer hasta lo imposible por no llorar.

 —Esto va tomando forma, pronto ese bebé tendrá sus accesorios completos —dijo Soobin con una sonrisa.

Su mano temblorosa se dirigió a la pancita hinchada de Yeonjun, un sentimiento se instaló en su pecho, había sentido una corriente erizar su cuerpo. Sonrió, ese momento era hermoso.

 —¿Yeonjun?

Soobin apartó su mano y Yeonjun rápidamente aparto sus lágrimas y borró su sonrisa para mirar a su ex-novio.

 —No sabía que ya salías con otro, pensé que había roto tu corazón tanto como dijiste que lo hice —lo miró burlón—. Lo bueno es que me di cuenta la clase de chico que eres —hizo cara de asco—¿Ese bebé es de él?

Yeonjun sintió una punzada en su pecho. Sí, aún se encontraba reparando su corazón de todo el daño que ese chico le hizo cuando terminaron, escuchar eso y en su estado fue como una bomba llena de sentimientos y tristeza. Pronto comenzó a llorar silenciosamente mientras bajaba la cabeza.

Yeonjun lo notó, no lo iba a dejar así. Sus puños se apretaron, pronto lo encaró.

 —No te creas tan importante, ciertamente fue difícil para él, pero gracias a que tenemos buenos gustos logramos enamorarnos de una persona que sí vale la pena, no alguien mediocre como tú. Así como lloró por ti, así de rápido te superó porque no eres alguien irrelevante en su vida. Tú también deberías dejar de darle importancia porque para él tu ya no eres nadie. Primera y última advertencia, no te metas con el padre de mi hijo —amenazó.

El chico parecía asustado, en verdad Soobin daba miedo cuando se molestaba.

 —Allen, vámonos, creo que del otro lado del centro comercial hay otra tienda de bebés —la chica tiró del brazo de su hermano para sacarlo del lugar.