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Yeonjun deseaba con todo su corazón un bebé, estaba
tan solo, no servía para el amor era un hecho. Cada vez
envejecía más, dentro de unos pocos años tendría menos
posibilidades de pod...
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Después de dejar el hospital llevó a Yeonjun a casa pero antes de dejarlo se aseguró de dejar las cosas donde este se lo pidió y posteriormente verificar que estuviera tranquilo y relajado para caminar de regreso a su auto.
-¿Seguro qué estarás bien? -el alto preguntó mirando al mayor.
-Lo estaré, gracias por todo -sonrió.
-Estamos en contacto, si necesitas ayuda con la decoración de la habitación del bebé aquí estoy. Beomgyu debe llegar mañana y probablemente vengamos a visitarte.
-Me parece bien, son bienvenidos cuando quieran -sonrió.
Soobin asintió. Estaba por entrar a su auto cuando Yeonjun lo llamó.
-¡Soobin! -sonrió feliz-. Gracias por lo de hoy, me la pasé increíble y también gracias por lo de Allen...
-Lo podemos volver a repetir cuando quieras. Y por lo de ese idiota ya sabes que estoy para ayudarte con él y con cuantos más se atrevan a hablar mal de ti o de tu bebé.
-También es tu bebé, tonto -se rió.
Soobin se unió a su risa mientras asentía para el embarazado.
-Es cierto, también es mi bebé delante de esos idiotas.
Yeonjun asintió siguiendo con el juego. Soobin paró de reír de a poco para mirarlo sonriente. Yeonjun también lo miró, ninguno decía nada solo se miraban en silencio hasta que el alto dio un paso adelante para cortar la distancia con Yeonjun, dándole un abrazo.
Los ojos de Yeonjun se abrieron grande al sentir el cálido cuerpo del contrario.
No tardaron demasiado así, Soobin le volvió a sonreír para ahora agacharse a la altura de su vientre. Las manos de Yeonjjn se movieron nerviosas mientras apretaba su suéter celeste con dibujo de un tierno conejo blanco.
-Seré tu padre postizo, descansa y no le des tantas náuseas a tu padre -sonrió.
Yeonjun quería llorar. El alto pronto se reincorporó para despedirse una última vez y entrar a su auto. Yeonjun regresó a su casa para mirarlo alejarse por la esquina y al fin cerrar la puerta. Rápidamente regresó a su habitación donde había dejado la carpeta que el doctor Lee le había entregado.
Antes pasó por la habitación que sería para su bebé. Tomó el peluche de zorrito que había comprado y con esto en sus brazos se adentró a su habitación.
Se sentó en su cama después de soltar un suspiro. En esa carpeta estaban los resultados del examen de paternidad. Aún no sabía la identidad del chico solo sus iniciales y podría ser cualquiera pero quería estar más seguro antes de ponerse en busca de él para mantenerse alejado todo lo posible.
El doctor Lee se lo había propuesto, él también quería saber si estaba en lo correcto al suponer que el último bote de muestra había sido usado en Yeonjun o en alguien más. Lo bueno era que eso no tenía ningún riesgo del que podría correr el bebé, al contrario, aprovechó el examen para hacer otras muestras y saber si el bebé nacería con complicaciones o con alguna enfermedad.
