Nuevo destino...nuevos amigos ( Calum Heaslip ) PAUSADA

CAPITULO 9

Termino de cantar y los tres salen aplaudiendo. Siento como mis mejillas comienzan a coger calor, y seguro que a enrojecerse también.

-Parad. Lo hago fatal.

-Mentira.-Me dice Carlos.- Lo has hecho bastante bien.

-Mi primo tiene razón.-Habla esta vez Calum.

-Haber canta tú.

-Em... no, yo no canto.

-¿Como que no cantas? Ya puedes empezar.-Lo agarro de la mano y le obligo a levantarse.- Venga canta.

-No voy a cantar.-Dice esta vez serio.

-Calum olvida lo ocurrido.-Dice uno de los mellizos, no me doy cuenta de quien es ya que estoy mirano a su primo.

¿Pero que le pasa? Hemos quedado en que todos cantaríamos. Él también tiene que cantar.

-Algún día tendrás que volver a cantar. ¿O piensas no cantar nunca más? -Dice ahora el otro hermano.

¿De que hablan? Me rayo. No soy capaz de saber de que eestán hablando. Calum... no. No y no. Calum no es mi Calm. No es mi rubio. La verdad es que cuando lo conocí y escuché su nombre me vino a la cabeza pero este no es él.

-Me rayo. ¿Alguien me dice de que habláis?

-No. No voy a cantar y punto.

Me comienza a doler la cabeza. Simplemente escucho una discusión entre los primos. No tiene un tono alto, parece más bien broma pero aún así no me gusta nada.

-Bueno parad. La culpa la he tenido yo.-Intento decir para que se callen y paren pero nada no me escuchan.- ¡Quereis parar de una vez! -Subo el tono de voz a la vez que me coloco entre los tres.

-Yo me voy.-Dice dándose la vuelta.

-No vas a ninguna parte.-Digo sujetándole del brazo.

-No eres nadie para decirme a donde debo o no de ir.-Me responde con tono borde.- Ni que fueras mi madre.

Se desace de mí y comienza a caminar. Los dos hermanos se quedan asombrados.

-Dejadme hacer lo que me de la gana es mí vida. -Dice antes de salir de la habitación.- Y quitate esa camiseta hazme el favor.

-En mi vida. Seguro que no sabes ni lo que significa.

-O puede que sí.-Cierra la puerta.

-¡Te odio! -Grito antes de que halla dado más de un paso de la puerta.

Una lágrima sale de uno de mis ojos y recorre mi mejilla. Carlos y Dani se miran entre si y miran la dirección por la que ha salido su primo.

-Menudo idiota...idiota no imbécil.-Susurro sin que ambos hermanos se lleguen a enterar.

Me siento en uno de los colchones. El dolor de cabeza a aumentado y todo comienza a darme vueltas. Me tapo la cara pero aún así continúa.

-Chicos... creo que me voy.

-¿A dónde vas a ir?-Pregunta Dani mirándome con cara de preocupado.

-En tu casa no hay nadie.- Sigue Carlos a su hermano.

-Me encuentro mal. Todo me da vueltas y me duele la cabeza.

-Quedate aquí sentada que ahora vuelvo. Voy a por algún medicamento para el dolor de cabeza. Dani ve a por un vaso de agua por favor.-Dice Carlos a su hermano.

Pasan unos minutos y ninguno de los dos llega. Tengo calor y no hay ninguna ventana abierta. Me acerco a intentar abrir alguna de las del balcón pero no consigo abrirlas. Me decido a salir afuera. Abro la puerta y salgo. Para mi sorpresa ahí está Calum. El que se gira para ver quien soy. Se dispone a levantarse pero paso por su lado dejándole atrás.

-Tranquilo que ya me voy yo.

-Sofi,... lo siento.

-No sientas nada. Lo echo, echo está.

-Soy un idiota, bueno un imbécil. No debía de haber dicho nada. Pero no pienso volver a cantar en mi vida.

-Mira que me da igual lo que hagas, pero por una tonteria mira la que se ha armado.

-La culpa la he tenido yo enserio. Nadie me soporta. Ni en Mallorca ni aquí. Bueno aquí solo llevo una semana, pero ya veo que estais deseando de que me valla.

Sus palabras hacen que me salga una sonrisa. Al menos se da cuenta de sus errores no como otras personas.

-¿Pero que dices tonto?

-Que soy un imbécil y por eso todo el mundo me odia. Toda España seguramente.

-¿Cómo que toda España? -Pregunto sin saber de que está hablando.