“En ese caso, vale. Vamos” le dije cerrando la taquilla. Los dos empezamos a andar en dirección a la salida de la universidad.
“¿Dónde quieres ir?” me preguntó cuando llegamos a su moto y él se subía.
“No lo sé. Me da igual” le dije mientras me subía detrás suyo.
“Entonces, ¿me das vía libre para llevarte donde yo quiera?” dijo él mirándome de reojo.
“Espero no arrepentirme de esto” dije mientras le cogía por la cintura.
“Ya me encargare yo de que no lo hagas” dijo él antes de arrancar la moto y empezar a circular por calles pequeñas que no conocía de nada. “Hemos llegado. Ven” dijo tirando de mi mano.
“¿Dónde vamos?” le dije parándome de golpe.
“¿No me dijiste que te daba igual?” me dijo levantando una ceja.
“Si, pero ya no” le dije mientras me cruzaba de brazos.
“Venga Kath, no hagas de niña pequeña” me dijo tirando de uno de mis brazos.
“Dime dónde vamos” le dije sin moverme.
“No” me respondió.
“Entonces, no me muevo de aquí” le dije plantada en medio de la calle.
“No me dejas otra opción” respondió antes de venir hacia mí. ¿Qué iba a hacer? Entonces, me cogió a cuestas mientras empezaba a andar calle abajo.
“¡Suéltame!” le grité mientras pataleaba.
“No, haberlo pensado antes” dijo él ignorando mis gritos.
“Ashton que me sueltes” insistí un vez más, pero otra vez fue en vano. Él siguió caminando hacia donde fuera que se dirigiera.
“Hemos llegado” dijo al cabo de un par de minutos dejándome en el suelo delante de un pequeño restaurante. Pizzería La Pappardella.
“¿Dónde estamos?” le dije mientras me acababa de acomodar la camiseta que se me había levantado debido a la manera como me había llevado Ashton hasta aquí.
“En el mejor restaurante en el que vas a comer en toda tu vida” dijo él abriendo la puerta y poniéndose a un lado para dejarme pasar.
“No pienso entrar” le dije indignada.
“Eres muy cabezota cuando quieres ángel” me dijo mientras entraba para que viera que no se trataba de ningún truco. “Solo intentaba ser un caballero. Pero veo que el rollo este de los cuentos de princesas y príncipes no te va” añadió soltando una carcajada.
“No demasiado” le dije entrando detrás de él.
“Buenos días” dijo el camarero.
“Hola, queríamos mesa para dos” dijo Ashton.
“Por aquí” dijo entrando en el pequeño restaurante. Los dos entramos lo seguimos, seguidamente él nos señaló una pequeña mesa en la esquina. “¿Esa les parece bien?”
“Esa es perfecta” dijo Ashton sentándose. “Ángel, siéntate. No te separé la silla porque antes me dijiste que no te gustaba este rollo del cuento de princesas y príncipes. Así que vas a tener que separártela tú. ¿Crees que vas a poder?
“No te preocupes, puedo sentarme sola” le dije sentándome.
“¿Qué van a pedir?” dijo el camarero volviendo a la mesa.
“No lo sé…” empecé a decir.
“Déjame decidir a mi” dijo Ashton.
“¿Y porque debería hacerlo?” le reté con la mirada.
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inhale » ashton irwin
FanfictionKatherine Hill es la típica chica adolescente que parece tener la vida bajo control, hasta que algo se interpone en su camino cambiando su vida por completo. Lo que antes era una vida tranquila, se convierte en una montaña rusa. Y lo único que ella...