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Capítulo 28 "¿Quién es Jane?"

“Si, esa fue una noche muy larga” le dije riendo.

“Solo esperemos que no hayan muchas más así” dijo ella mientras bebía un poco de chocolate de la taza.

“Esperemos…” dije yo sonriéndole.

“¿Se puede?” oímos que preguntaba alguien desde la puerta, las dos nos giramos para ver quién era y nos encontramos con un peluche. Segundos después, apareció Calum mirándome con cara de arrepentido.

“¿Qué quieres?” le pregunté.

“Vengo a pedir perdón” dijo él estirando los brazos para ocultarse detrás del peluche, el cual llevaba un cartelito que ponía en letras grandes “SORRY”.

“Bueno, yo creo que me voy” dijo Lily levantándose de mi lado.

“Gracias por todo” le dije sonriendo.

“No hay de que” me respondió mientras cogía las dos tazas y salía de mi habitación.

“Kath…” empezó Calum mientras se sentaba a mi lado.

“No lo entiendo” fue todo lo que le dije.

“Lo siento… Sé que no debí hacerlo… Pero es que…” dijo dejando al aire la última frase.

“Es que… ¿Qué?” le pregunté para que siguiera la frase que dejo a medias.

“Ashton lleva jodiéndonos desde que empezamos a salir. No sé el motivo pero me tiene hasta los cojones y hoy exploté…”

“Eso no era motivo para pelearte con él.”

“¿Vas a enfadarte conmigo por eso? ¿Vas a dejar que se salga con la suya y acabemos cortando?”

“¿Porque tendría que querer Ashton que cortáramos?” le pregunté confundida debido a que cada vez que me adentraba un poco más en la vida de Ashton me dejaba aún con más dudas.

“No lo sé. Yo no estoy en su mente” dijo Calum. “Pero de algo puedo estar seguro, a Ashton no le gusta que salgamos.”

Yo me quede en silencio pensando en el posible motivo por el cual Ashton no quería que yo y Calum saliéramos. Pero no era capaz de llegar a ninguno coherente, sobre todo teniendo en cuenta que desde la primera vez que nos vimos Ashton me ignoro.

“Entonces…” empezó Calum mientras volvía a poner el peluche delante de su cara. “¿Vas a perdonarme?” me dijo él haciendo voz de niño pequeño.

“Mmm… Puede…” le dije sonriente.

“Y… El viaje a Canada… ¿Sigues viniendo conmigo a conocer a mis padres?” me preguntó él mirándome con cara de cachorrito.

“Mmm... No sé, no sé… ¿Me vas a recompensar en Canada?” le pregunté.

“Eso tenlo seguro” me dijo guiñándome un ojo. “Aunque si quieres puedo empezar ahora” dijo mientras me cogía la cara con las manos y unía nuestros labios en un beso apasionado mientras me tumbaba en la cama. Seguidamente mordió levemente mi labio inferior obligándome a abrir un poco la boca para dar paso a su lengua. Pero el sonido de mi teléfono nos interrumpió una vez más.

“Cal…” susurré apartándome de él y levantándome para coger el teléfono.

“Juro que la próxima vez que nos interrumpan llamándote, voy a coger ese teléfono y lo voy a tirar por la ventana” dijo señalando mi móvil mientras yo soltaba una risita.

“¿Diga?” respondí al teléfono.

“Kath…” oí la voz de Eve entre sollozos. “¿Podemos hablar?”