15 dias

Capítulo 19 "Verdad que te engañé: Día 13"

Domingo 21 de Agosto 02:30 a.m. Día 13.

Desperté agitada luego de la peor pesadilla que pude haber tenido, mi respiración estaba descontrolada, sentía las gotas de sudor correr por mi cabeza, el miedo seguía en mí.

Yo había sido la asesina de Ethan, luego había matado a Henry ¿Qué quieres de mi, mente? Te gusta torturarme a través de pesadillas, que malvada.

A ver ¿Qué culpa tengo yo?

Revisé mi celular, eran las dos de la mañana, ahora tendría que intentar volver a conciliar el sueño, aunque dudo que sea posible: esta pesadilla ha sido de las peores ¿Si mi mente quería darme un mensaje? Hay muchos casos de personas que cometen un crimen pero luego no recuerdan que lo cometieron ¿Si yo soy uno de esos casos? Mi mente está tratando de darme una señal para que reaccione y me de cuenta.

Cuando tu mamá decía que veías muchas películas...en tu caso es verdad.

Me puse bien en mi cama, en una posición cómoda, después de esa pesadilla iba a ser casi imposible que lograra quedarme dormida.

Apenas cerraba los ojos, la imagen de mí matando a Henry invadía mi mente, las lágrimas no tardaron en salir, yo no era una asesina, no quería ser una asesina, no quería estar sin Henry.

¿Lo admitió? ¡Lo admitió!

Abracé la almohada que tenía más cerca, ocultando mi cara llorosa en ella, me dolía el pecho con tan solo imaginar que mis amigos y Henry habían muerto en mis manos. Tenía que separar la realidad de mis sueños, Henry estaba vivo, yo no maté a Ethan, tampoco maté a Diana, mucho menos al oficial Dante, yo no era una asesina. Tenía claro eso, pero no dejaba de engañarme, pues una parte profunda en mi mente gritaba "asesina" como si me recordara siempre que la sangre de otros hubiera corrido por mis manos.

Recuerda: la pesadilla se convirtió en realidad y la realidad en una pesadilla.

No podía dormir, por lo menos habían pasado unos cuarenta y cinco minutos, yo no había podido conciliar el sueño, sabía que había una manera de dormirme ¿Estaba dispuesta? La respuesta es sí, ya había tomado muchos riegos, uno más no significaría nada, además el podría decir que no o sí, si decía que no solo tendría que afrontar la noche sola, si decía que sí al fin podría dormirme.

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Domingo 21 de Agosto 03:50 a.m. Día 13.

Lo esperé en la sala de estar, con unos pequeños toques en la ventana anunció su llegada, por impulso sólo lo abracé, necesitaba sentir que estaba vivo, que no lo había matado, dejando la pesadilla en eso, una pesadilla.

-¿Te drogaron que estás tan cariñosa?- preguntó la voz de Henry, demostrándome que era real, que él estaba acá conmigo... con vida.

Droga...mamá... ¡Mi madre me drogó! Espera ¿Qué día es? ¿Cuánto tiempo hizo efecto la droga?¿De verdad mi propia madre se atrevió a drogarme?¿Algún día podré confiar en alguien? Por lo menos tenía la respuesta a la última pregunta, Henry, él era mi salvación, por más que a veces desconfiara de él, sabía que siempre podría contar, confíar, él no iba a traicionarme, Henry nunca haría algo que lo arriesgara a hacerme daño o a perderme.

-¿Alice, estás bien?- me preguntó en voz baja -Ayer vine a buscarte para investigar pero nunca respondiste ¿Pasó algo ayer?-.

Sí, mi madre me drogó porque por alguna razón ella sabe que investigamos, entonces prefirió drogarme antes que hablar conmigo. Obvio no le puedo contar eso.

¡Cómo que no! ¿Qué necesita hacer el pobre chico para ganarse tu confianza?

Lo tomé de la mano, se sentía cálida.