Capítulo 47

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ALEXANDER

Ella siempre dijo la verdad, ¡maldita sea!. Todo este tiempo quien estuvo equivocado he sido yo

Después de esto ya no sabía que más hacer con mi vida. Desde hace años mi único objetivo había sido tomar venganza contra ellos. Pero con lo que paso hoy las cosas habían cambiado

Rebecca y Patrick no habían querido dejarme solo por temor de que volviera a recaer en el alcohol

Esta vez en lugar de perder la cabeza decidí cambiar mi actuar. Hice una llamada y salí de la casa a pesar de las objeciones de todos los que se encontraban ahí

Llegue al restaurante y me dispuse a esperar hasta que la persona a la que cité llegara

—Espero que lo que tenga que decir sea de verdad importante señor Matthews

Me puse de pie para recibirlo

—No se imagina cuanto le agradezco que haya aceptado mi invitación señor Cooper

Jim tomó asiento —Bien Alexander, si vine aquí fue porque me lo pediste como un favor, por que como bien sabes después de lo sucedido con mi hija, mi opinión y respeto por ti ya no existe

—Eso lo sé muy bien Jim y es por eso por lo que lo cité

—Te escucho

—Como bien ya lo sabe, el inicio con su hija no fue el mejor

—Sin duda

—Se que he cometido muchos errores señor, pero algo de lo que no me he equivocado es en los sentimientos que tengo por Lea

—A ver Alexander, no estoy entendiendo nada de lo que me estás diciendo, ¿Por qué me has citado?

—Yo... no lo sé, tal vez solo necesito un consejo paternal y digamos que mi padre no es la persona indicada para ello, además de que he perdido todo contacto con él y usted es la única persona a la que respeto y admiro 

— ¿Quieres que hablemos de hombre a hombre? — asentí —bien entonces te escucho, prometo mantenerme neutro ante la situación

—Se lo agradezco mucho. Como ya sabrá el inicio de la relación entre Lea y yo no fue la mejor

—Fue demasiado evidente — dijo dándole un sorbo a su café

—Se que he actuado mal, maldita sea siempre lo he hecho mal, pero simplemente no sabía como actuar ante una mujer como Lea, usted mejor que nadie conoce la mujer que es

—Es una gran mujer Alexander y no simplemente lo digo porque sea mi hija

—Estoy consciente de ello Jim y precisamente fue eso lo que me hizo amarla, ella me hizo perder la cabeza... la cordura. Me enamore perdidamente de ella, la amo y fue precisamente ese amor el que me hizo perderla

—Estoy al tanto de todo lo sucedido, prácticamente tuve que obligarla a hablar. Desde un inicio como dices, no actuaste bien. ¿Por qué tomar el camino fácil Alexander?. Ese fue tu primer error, Lea es una mujer libre, detesta que le digan lo que tiene que hacer, pero bueno lograron superar esa etapa y continuaron... hasta que ocurrió ese problema. ¿Tenías pruebas suficientes para acusar a Lea de semejante idiotez?

—Los celos me cegaron en su momento

— ¿Solo en ese momento?

Suspiré —Todo este tiempo — dije finalmente

— ¿Además tienes idea de lo que le hiciste a Nick?

—No, de eso si yo no soy culpable, estoy de acuerdo que por mis antecedentes y mis malas acciones me señala como el principal sospechoso, pero le juro por mi familia que yo no tuve nada que ver con eso

— ¿Entonces quien más pudo haber hecho algo así?

—No tengo la menor idea, pero es algo que voy a averiguar para limpiar mi nombre

—Eso no bastara Alex. Lea no olvidara nada de lo que has hecho y sobre todo dicho. Además ahora ella esta con Stefan y no veo conveniente que te interpongas en esa relación o que vuelvas actuar de mala manera para obtener ventaja de ello

—No es tan fácil Jim, estoy perdido... no sé que hacer, ¿Qué harías tú?. Estoy consciente de que he actuado mal y créeme que estoy arrepentido... muy arrepentido pero todo lo que he hecho ha sido por amor

—Un amor poco enfermizo, ¿no lo crees?

Lo mire atentamente, él tenía razón — No se puede negar lo que ha sido muy evidente

Suspiró — La situación es complicada, he visto cuanto dolor le causaste a mi hija así como también todos los problemas que le has causado en su nueva vida. Así como también estoy consciente de que los hombres actuamos antes de pensar y por un lado muy mínimo entiendo la situación en la que estuviste... eso no quiere decir que te justifique

—Lo entiendo— dije apenado

—Escucha Alexander, no eres un mal hombre, solo un hombre impulsivo y eso te ha costado mucho. Mi primer consejo seria que aprendas a controlar tus emociones, con todo respeto y espero no te moleste, pero esa es una gran diferencia entre Stefan y tú. Él es muy analítico, primero investiga y después actúa, cosa totalmente contraria a ti

—¿Me esta diciendo que si quiero recuperar a Lea tengo que actuar como él?

—No, lo que estoy diciendo es que te enfoques en ti. Me has dado a entender que hay muchos aspectos de ti que no te agradan, ¿no es así? — asentí — entonces empieza a hacer algo por ti, deja de lado a Lea y a todos, primero debes sanar para poder continuar

—Soy un maldito desastre, lo se

—Esta en ti cambiar eso o seguir viviendo en la miseria emocional en la que estas

Tenía razón no podía seguir así pero tampoco sabia por donde comenzar y al parecer Jim lo notó

—Lo primero que deberías hacer es comenzar a hacer las cosas bien, dejar de atormentar a los demás, cambia tu actitud. Es más ¿Por qué no tomas terapia? — lo mire sorprendido y él rio ante mi reacción — no estoy diciendo que seas un psicópata, has actuado como uno... sí. Pero estoy seguro de que ese el primer gran paso para comenzar de nuevo

—¿Algún consejo para tratar de conseguir el perdón de tu hija?

—Lea es un ser humano maravilloso... pero no es perfecta, ella también ha cometido errores

—Para mi es el ser humano más perfecto del mundo

—Y ese es un gran error que la mayoría cometemos. Durante mi matrimonio con la madre de Lea idealizamos demasiadas cosas, pero cuando ves la realidad de las cosas es cuando comienzan los problemas porque nada resulta ser como tú pensabas

—Ojalá y todas las cosas fueran o sucedieran como las idealizamos

—Idealizamos tanto las cosas que después duele demasiado cuando nos topamos con la realidad. Es lo que paso con ustedes, idealizaron demasiado en un periodo muy corto de tiempo y todo se les salió de control, pero nunca es tarde para tratar de enmendar los errores del pasado

—¿Entonces que es lo que tengo que hacer?

—Sabes perfectamente por donde comenzar

Tenia un pequeño indicio de que era lo que tenía que hacer

—Sabia que tú eras él indicado para esto Jim, te lo agradezco mucho

—Agradéceme actuando de la manera correcta

—Lo intentaré — me puse de pie dispuesto a irme

—Alexander — Jim me detuvo

—¿Sí?

—Deja que Lea decida que es lo que quiere por si sola

—Sera un poco difícil hacerlo de esa manera — le aclaré — Lea no quiere verme

—Si realmente quieres su perdón... ya te darás una idea para poder hablar con ella... pero el respeto y la libertad, ante todo, no lo olvides

Asentí —Lo tendré muy en cuenta

Jim de igual manera se levanto — Haz lo que tengas que hacer muchacho — me tendió la mano y yo se la acepte inmediatamente

—Lo haré...

Entre Sus Brazos (ESM2) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora