Narra ___
Mayo, que hermoso mes, los pajaritos cantan, las nubes se levantan, el viento primaveral viene acompañado de un aire con toques veraniegos, todo es hermoso o eso debería decir, pero para mi mala suerte hay un dicho que dice: "En mayo no te quites el sayo".
(Sayo: Prenda de vestir de hechura simple y amplia que, a modo de túnica, cubre el cuerpo hasta la rodilla aproximadamente; era una prenda usada por artesanos y campesinos.)
Pues sí, justo lo que piensas, aquí estoy yo corriendo para llegar a la preparatoria seguida de los hermanos Miya en un intento de mojarnos lo menos posible.
- ¡Agh! ¿Cómo es posible que los meteorólogos se equivoquen por décimo sexta vez en el mes? - preguntó el peli plata.
- A este paso vamos a llegar enchumbados a clase. - dijo Atsumu.
- Dímelo a mí, miré el tiempo esta mañana antes de salir y decía que iba a hacer calor, por eso no me traje ni medias, ni camisa larga. Me voy a coger una hipotermia. - sentencié dramáticamente.
- ¡No por favor! Si te mueres ya no podré molestarte de camino a casa.
- Atsumu, cada día pienso más que yo heredé todas las neuronas cuando nacimos.
- ¡Oye, sin faltar eh!
- Si si, lo que tú digas. Ten ___, mi chaqueta, se te está empezando a transparentar la blusa. - dijo Osamu más normal de lo que pensaba.
- ¡Oh! M-muchas gracias. - la vergüenza se apoderaba de mi rostro.
- Bien, bien, ya llegamos a la preparatoria, venga todo el mundo a clase. - dijo bastante molesto Tsumu.
Osamu avanzó hacia la clase sin ninguna expresión, Atsumu hizo un amago de hacer lo mismo, pero yo lo tomé de la muñeca.
- ¿Qué te pasa?
- Nada, vamos a llegar tarde.
- No. - dije a la par que le agarraba más fuerte de la mano.
- Dime que te pasa.
- Ya nada en serio, vamos.
- Ummm. Te pusiste celoso.
- ¡Ah! ¿ Y esa acusación tan gratuita?
- No sé, tú sabras. - dije frunciendo el seño y poniendo morritos.
- Oh vamos ___, no te enfades ahora.
- ...
Se acercó a mi cara y puso su frente sobre la mía. ¡Madre mía que cerca! Se me va a salir el corazón del pecho. ¿Lo notará?
- Lo siento, ¿si? Ya no te enfades conmigo porfa, no me gusta verte así.
- Bueeeeeeeno. -dije cediendo.
- Yeyyyyy.
- Pero que sepas que no me gusta que te pongas celoso por cada cosa que me haga un chico.
- Vale, vale.
Acto seguido se acercó a mi oreja y me susurró.
- Estás muy linda cuando te enfadas. - dijo con voz seductora.
Juraría que hasta las piernas me temblaron. Mi rostro se volvió rojo, rojo, rojo, pero rojo tipo tomate.
- Te espero en clase Tomatito-chan. - dijo en tono burlón
Se acercó a mí y me dejo un lindo beso en la frente incrementando así mi sonrojo. Tardé unos pocos segundos en reaccionar, me cambié los zapatos y caminé con la intención de ir a mi clase, pero una voz estridente y molesta impidió que siguiera mi camino.
- Puag, voy a vomitar arcoíris por la boca. - dijo Rena con cara de asco.
- ¡No jodas! ¿En serio? Yo pensaba que se vomitaba por los ojos. - dije sarcástica.
- ¿Quién te crees tú para hablarme así?
- Tachiba ___, 17 años, clase 2-1. Un placer. - dije tendiéndole la mano de forma desafiante.
- ¡Ja! Escúchame zorra, cómo sigas así con Atsumu, tú vida va a ser un infierno. Él se merece a alguien mejor, corrijo, el me merece, así que deja de acercarte a mi hombre si no quieres acabar mal.
- . . . JAJAJJAJAJAJAJAJA. ¡Ay, ay que risa!
- ¿De qué te ríes estúpida?
- Bien. - dije poniendo una mirada asesina. - Ahora escúchame tú, me niego a insultarte para no bajar a tu nivel, pero te voy a dejar claras unas cuantas cosas.
-Primero, no soy una zorra, literalmente me describes como el reflejo de ti misma. - dije dando un paso hacia ella.
- Segundo, ni te atrevas a decir que harás de mi vida un infierno sin conocer previamente todas las cosas por las que he tenido que pasar. - dije dando otro paso.
- Tercero, Atsumu no es un objeto y mucho menos un premio que puedas obtener, él tiene su propio criterio y forma de hacer las cosas, así que no lo trates como algo que puedas ganar. - di otro paso.
- Cuarto, yo me acerco a quien quiera, cuando quiera, donde quiera y como quiera, tú no eres nadie para decirme con quien debo o no juntarme. - di un último paso acorralándola contra la pared.
- Quinta... y última cosa. Atrévete, atrévete a fastidiarme aunque sea en lo más mínimo y te juro por mi vida que serás incapaz de salirte con la tuya. - finalicé dándome la vuelta y dejándola sorprendida.
Agarré mis cosas y me fui de allí sintiéndome como una diosa, para mi sorpresa avancé unos pasos y me encontré con Suna aparentemente mirando su móvil y me fui con él a clases sin darle mucha importancia a que tuviese su teléfono en una extraña posición.
Pasaron algunas horas de clase a mi parecer interminables y no había visto a Rena entrar al aula, la verdad me daba igual, pero la sorpresa llegó cuando escuché que el director me llamaba por megafonía en mitad de la clase de lengua. Miré a mi profesora y estaba tan sorprendida como yo. El resto de mi clase me miraban extrañados.
Suna se levantó de su asiento y fue a hablar sobre algo con la profesora mientras yo recogía mis cosas para ir a dirección. Salí del aula y acto seguido salió Suna detrás de mí, dejando a los hermanos Miya con tremenda cara de preocupación.
- ¿Por qué saliste? - dije mientras ponía rumbo a dirección.
- Algo me da mala espina.
- ¿Ese es motivo para salir?
- Es algo que me da mala espina contigo ___. Dije que me encontraba mal que iba a ir a la enfermería, pero te voy a acompañar a dirección.
- Pero me llamaron a mí, no vas a poder entrar.
- Lo sé, esperaré fuera, pero te voy a decir algo.
- Claro dime. - dije algo preocupada.
- Vi lo que te pasó esta mañana con Rena.
- Oh ya veo. - dije algo avergonzada.
- No hiciste nada malo y mediste muy bien tus palabras con ella.
- Vaya, gracias.
- Ahora, si pasa algo con Rena en dirección abre la puerta y déjame pasar. ¿De acuerdo?
- Suna me estás asustando.
- Es una corazonada, pero confía en mí, soy un testigo.
-Bien, llegamos.
Suna me abrazó y temerosa abrí la puerta encontrándome con una escena que jamás pensé que me pasaría a mi.
¿Qué le pasará a ___ en dirección? ¿Por qué Suna tiene esta corazonada? ¿Los hermanos Miya se habrán enterado de lo que pasa?
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Te odio Miya Atsumu (Miya Atsumu x Lectora)
FanfictionÉl es el chico popular, ella una chica normal que no le presta atención como sus fans, pero el destino les tiene preparado un final completamente distinto al que ellos piensan. Esta es la historia de Tachibana ___ una chica de 17 años que va a la p...