Proyecto Niña Maravilla - 2023 (ABDL)

Capitulo 30 Una tarde, Una confesión

Sala Multiusos

- Muñequita, por que no te vas a la colchoneta, y me esperas allí un momento, mami va a limpiar este desorden

- Esta bien mami

Vanessa obedeció con gusto, gateando se movió hasta la colchoneta . . . sentía algo de pena por dejar que otros limpiaran sus desastres, pero en su rol de muñeca no tenia mas opciones . . .

Mientras gateaba Vanessa sintió de nuevo su estómago retumbar un poco, aun no superaba la comilona que se dio en el almuerzo, moverse era difícil. . . . .

Al llegar a la colchoneta, cayo sobre esta exhausta, abrazándose a sí misma, y sobándose la pancita . . . . . "Uff necesitare todo el día para recuperarme" pensaba algo inquieta . . . .

Se sentía bastante bien acostarse . . . ya estaba un poco menos llena que antes, pero el estomago le seguía doliendo un poco, y continuaba algo revuelto todavía . . . . pero francamente ya eso no la estresaba, ni siquiera le preocupaba . . . . . . mientras seguía acostada podía observar desde allí a Isabell recogiendo la comida y regresándola al recipiente de plástico con mucho cuidado, desde sus ojos daba la impresión de ver una amorosa madre recogiendo los desastres de su bebita traviesa . . . eso le hizo gracia a Vanessa, . . . . . ciertamente era vergonzoso pero ver las cosas con una nueva perspectiva, le recordaba lo bien que estaba haciendo su trabajo . . . . y como Isabell se estaba creyendo absolutamente todo . . . eso era lo que mas importaba. . . .

Vanessa comenzó a entrecerrar sus ojos . . . "creo que me está entrando algo de sueño"

. . . . . . . . . . . . . . .

Unos minutos mas tarde

Vanessa abrió sus ojos de golpe cuando sintió que la colchoneta se hundía a su lado . . . . . . . era Isabell, había terminado de limpiar el reguero de la comida y ahora estaba junto a ella . . . .

- Perdón muñequita, no quería despertarte . . . .

- Tranquila mami, no pasa nada (Vanessa se restregó los ojos con sus manos)

- ¿De casualidad tienes sueño? muñequita

- No mami, estoy bien

- ¿Segura que no te gustaría dormir un poco? Si estas cansada dímelo

- Estoy bien mami, lo prometo

Vanessa intento levantarse pero Isabell no se lo permitió . . . . . la miraba dulcemente, y le acariciaba el cabello

- ¿Qué pasa mami?

- Quédate acostada un poco más, me encanta verte así . . .

- Claro mami

- Muñequita, dime algo . . . ¿Qué piensas de lo que te confesé recién? . . . .

- ¿Qué pienso? . . .

- Es algo importante para mi saberlo . . . .

Las miradas de Isabell y Vanessa se entrecruzaban . . . . desde arriba, Isabell observa apasionadamente a la hermosa muñeca con la que llevaba tantas horas compartiendo . . . . esperando una respuesta al tipo de confesión que nunca había realizado antes en su vida, si era franca consigo misma . . . . siempre había querido compartirlo, pero de las muñecas en su casa jamás podría esperar una respuesta, por lo que hablarlo con su nueva muñequita era algo único y especial . . . . . además, . . . en el pasado en algunos momentos cruzo por su cabeza la idea de compartirlo con otra persona, encontrar a alguien con sus mismos gustos que ella parecía ser un sueño . . . . pero como mujer poderosa, había aprendido la importancia de no confiar fácilmente en otras personas, alguien de su estatus simplemente no se arriesgaba aunque su corazón se sintiera atrapado y con ganas de ser libre . . . pero ese día . . . en ese momento, había encontrado a su muñequita, unas cuantas horas la habían ablandado lo suficiente como para permitirse compartir sus sinceros pensamientos . . . .