El corazón de Saint latía con fuerza. Sentía que su pecho iba a estallar. Perth le ofrecía todo lo que siempre había querido. Y eso lo asustaba a muerte. ¿Qué si lo perdía? ¿Y si perdía a Perth? Eso lo destruiría.
—¿Ángel?
—Tengo miedo, Perth —susurró Saint.
—¿Y crees que yo no? —se burló Perth—. Nunca he conocido a nadie en mi vida que me afectara de la forma en la que lo haces. ¿Qué pasa si estoy tomando la decisión equivocada aquí? ¿Qué pasa si tú decides que no soy el Dom para ti después de esto? ¿Qué pasa si tratas de dejarme otra vez?
Saint negó.
—No, si me comprometo contigo y llevo tu collar, yo nunca te dejaré.
—Tú estabas usando mi collar antes, Saint, y trataste de dejarme.
—Eso no era un collar real —insistió Saint—. Eso era algo que utilizaste para mostrar tu propiedad. No significaba nada para ti, por lo tanto, no significaba nada para mí.
—Buen punto. —Perth se echó a reír y le dio al collar en su mano una pequeña sacudida—. Pero este es uno diferente, ángel. Éste significa algo para mí, y te lo estoy ofreciendo.
Saint no podía mantener sus manos alejadas, le temblaron cuando las acercó para tocar el collar de suave cuero. Quería esto tanto, ¿pero podía confiar en él, sobre todo después de que Perth trajo a otro sum a la casa?
—¿No traerás a casa a otros sumisos? ¿No habrá más otros sumisos, y punto?
—No, tú eres mi único sum.
—¿Contrato exclusivo?
Perth sonrió.
—Por supuesto.
—¿A tiempo completo?
—No me gustaría que fuera de otro modo.
—¿Tengo que seguirte llamando Maestro?
—Sólo cuando estemos haciendo una escena, de lo contrario puedes llamarme Perth. —Sonrió de nuevo—. O querido, o cielo o cariño. Me conformo con cualquiera de ellos.
—¿En serio? ¿No te importaría que te llamase cielo o algo así?
—No, en absoluto.
—Parece que realmente estás aceptando todo esto, de repente. Sólo hace un poco, estabas dispuesto a follar a otro hombre. ¿Cómo sé que esto no es sólo para que puedas obtener un pedazo de mi culo?
—Porque hace un rato, yo no sabía cuánto me dolería si te fueras. —La sonrisa dejó los labios de Perth, y de repente se veía muy serio—. Realmente sabía antes de lo sucedido con Kain que estaba tomando la decisión equivocada. Lo envié a su casa, Saint. No me lo follé. Me di cuenta de que causarte dolor me estaba destrozando, y no me gustó cómo me sentí cuando supe que te había causado dolor.
Saint arqueó una ceja. Ese era un gran discurso para un Dom tan controlado como Perth parecía serlo, pero ¿era suficiente?
—Así que, ¿qué pasa la próxima vez que no haga algo que quieras?
—Voy a palmearte el culo.
Saint parpadeó, luego, lentamente, comenzó a sonreír.
—¿Lo prometes?
—Por supuesto. —La sonrisa de Perth era contagiosa, y Saint se vio incapaz de resistirse a elevar sus labios en los extremos—. Puede ser que incluso te vende los ojos y te ate mientras lo hago.

ESTÁS LEYENDO
Chaud et Froid
FanfictionHola Bueno no pensaba hacer otra adaptación, pero me la pidieron y es de una de las autoras que me encanta así que me decidí a hacerla, espero les guste. Dentro encontraran la Sinopsis. Tori PS