Capítulo 25

1.3K 124 39
                                    

—Tanjiro, buenas tardes.

—Norman, hola.

El pelirrojo suspira y mira hacia su novia, que dormía plácidamente en su cama.

—Llamaste a Emma para saber mi número ¿Necesitas algo?

—Sí, es sobre el torneo que viene.

—¿Oh? Si acepto sobornos.

—¿Qué?

—O también puedo darlos, te puedo ofrece ochenta mil euros si me dejas la final.

—¿Q-,? ¿Ah? N-, No era eso.

—Ah... cien mil.

—¡N-, No quiero sobornos!

—Uh... ¿Cómo? —Norman hablaba con alguien más— Ah, ciento cincuenta.

—¡No sobornos, Norman, no sobornos!

—Uh... será difícil ganarte... veinte mil por una apertura.

—...

—...

—Norman...

—Sí, sí, bien ¿Qué es entonces?

Tanjiro suspira.

—Cuando vaya a Londres ¿Me podrías acompañar?

—Ay ¿Me estás pidiendo una cita? Me sonrojo...

—¡Que no!

Norman ríe.

—Bien, sí ¿Con cuanto tiempo irás? Yo tenía pensando ir con 10 días de anticipación, aunque ahora que con Mikasa nos llevamos bien... quizás veinte.

—Yo pensaba ir con un mes ¿Podrías?

—Mmm... un mes lo dudo, veinte sería lo máximo... ¿Y si llamas a Mikasa? Te enviaré su número, también el de Kazuto.

—Bueno...

—Mikasa es buena gente, aunque no te recomiendo decir nada de su prometido, se pondría furiosa.

—Uh, vale, me avisas si cambias de opinión.

—Entendido, hasta luego, Tanjiro.

—Adiós.

Cuelga la llamada y se sienta en su cama.

Suspira y revisa los contactos que Norman le había enviado.

—Mujeriego veloz y Fuerte Simp... ¿Qué son estos apodos?

Los nombres eran fáciles de descifrar. Mujeriego era Kazuto, que según oyó a él lo seguían muchas mujeres y Simp era seguramente Mikasa, tomando en cuenta lo que Norman le acababa de decir.

Cambia los nombres y envía un mensaje a Kazuto.

Responde casi al segundo.

Dos mensajes después lo llama.

—Hey Tanjiro ¿De dónde sacaste mi número?

—Norman me lo pasó, me parece raro que respondieses tan rápido.

—Sí, es que ya tenía tu número.

—¿Eh?

—Emma nos lo pasó a todos la última vez que nos reunimos allá en Japón.

—¿Enserio? Entonces yo era el único que no tenía sus números...

Kazuto ríe.

—¡Nee, Kazuto...!

Club de Artes - TanjiKanaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora