Princess Demon (*TAE Y TN*)

CAP 19

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No soy un demonio de nacimiento, esa es mi realidad.

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Hace muchos años, en la época de mi juventud.
Yo era un frágil humano, enamorado de una chica, la mujer de mis sueños.
Pero eran tiempos difíciles, la típica historia de la chica rica y el chico pobre que no tenía nada para ofrecer más que amor.

Ella caminaba con su madre de la mano, tres tipos con armas antiguas caminaban tras de ellas, eran los guardias, encargados de mantenerlas a salvo y fuera de peligro por si a algún bandido se le ocurría la brillante idea de robarles o secuestrarlas.

Yo, un simple peón que cargaba costales de verduras, con harapos sucios y la cara llena de sudor.

Ellas se detuvieron junto al puesto de mi amo, mi amo era un hombre maduro, con un carácter poco accesible, siempre traía en la mano un fuete, lo utilizaba para dar miedo a los empleados y desde que entré a trabajar para él vi como golpeaba a tipos mayores que yo, por su atrevimiento con personas de alto linaje o por errores como mercancía faltante, a veces ellos ni siquiera tenían la culpa, pero nadie podíamos cometer el error de defenderlos, hay niveles en los que los de mi clase sólo seremos sirvientes y no somos nadie para ellos.

Él como buen empleador me llamó para llevar las provisiones que ellas habían comprado.

Ella, con esa mirada tierna, unos ojos color celeste que adornaban a la perfección su cara que tenía una piel suave y una sonrisa encantadora.

Ella me miraba y yo sabía lo que ella pensaba, asi como ella lo que yo pensaba, éramos el uno para el otro, pero las circunstancias nos obligaban a mantener nuestro amor en secreto.

"Tan bonita"

"Perfecta"

Me perdí tanto en su mirada que su señora madre se molestó y me llamó la atención por mi atrevimiento.

-¡¡Cómo te atreves a ver a nuestra señorita de esa forma!!? -Mi amo enfurecido me gritó y por quedar bien ante la señora me dió un fuetazo en el rostro. El ardor me recorre por todo un lado de la cara, tirado en el suelo sólo puedo escuchar como él se disculpa por mí y repite que no volverá a pasar.

"Injusto"

Desde el suelo puedo observar como ellas se alejan apresuradas.

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Días después de esa situación, ella pudo escapar por unos instantes de la gran casa donde vivían custodiada por sus padres.

-¡¡Tae!! -Ella corre a mí y me abraza. -Perdón, Tae, fue mi culpa que te pegaran... - Acaricia mi  mejilla, mientras que yo hago una mueca por que aunque no duele, ella debe sentir repugnancia a la cicatriz que a quedado.

-No fue tu culpa, cariño. -La abrazo en forma de consuelo.

-Me encanta que me digas, cariño. -Sus ojos brillan en ilusión. -Me hace sentir especial.

-Es que eres especial.

Y con eso planto mis labios en los suyos, uniéndolos en un beso tierno, delicado.