SOUL MATE (GenSen)

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Un año. Había pasado un año desde aquello y Gen se había acostumbrado a escuchar la voz de aquel chico cuyo nombre aun no sabía. Había descubierto muchas cosas del otro en ese transcurso de tiempo. Y aunque fuera difícil de creer le había gustado hasta cierto punto.

“Buenos días. Quien sea que este allí. Si es que de verdad alguien está escuchándome, sé cuidadoso de no revelar nada de lo que diga a nadie por favor y gracias”

Ahí estaba de nuevo esa frase. Todas las mañanas la decía solo por precaución de que alguien de le estuviera oyendo y Gen estaba acostumbrado a oírla todas las mañanas sin falta al igual que el “Buenas noches” Y el siempre respondía.

“¡Buenos días! Espero que pases un buen día”

Había dicho Gen aunque el otro no lo oyese.

–  Me pregunto qué clase de cosas divertidas pensara hacer hoy mini genio-chan.

Se estaba preparando para ir a su trabajo. Tenía un montón de cosas por hacer.

Había estado todo ese tiempo escuchado toda clase de pensamientos por parte de su Soul mate y le parecía un chico excepcional, sea quien fuera Gen estaba seguro de que se había sacado la lotería al tener a tal genio como alma gemela.

Él creía que en un futuro no muy lejano ese chico seria definitivamente un reconocido científico y llegaría muy lejos. No estaba muy seguro de si le llegaría a agradar el campo en el que se especializaba como lo era la magia, pero ya vería como convencer al otro de que lo que hacía no era “ridículo” como solía pensar ese joven niño genio cada vez que alguien tocaba el tema y él pensaba de esa manera.

Gracias al otro ahora tenía todo tipo de conocimientos sobre cosas de ciencia. A veces era irritante, tanto que no soportaba oír la voz de alguien más en su cabeza y pensaba que era un verdadero martirio aquello, pero luego de tanto tiempo había entendido que no era tan malo cuando prestaba atención a lo que el otro estaba pensando, era hasta educativo e interesante. Lo que si era malo era cuando se es trasnochaba con algún experimento y no le dejaba pegar el ojo, y entonces Gen deseaba que ese otro chico creciera cuanto antes para poder establecer un horario y que el otro dejara de tortúralo.

Había asistido al doctor y explicado su situación.

“Eso es normal cuando su Soul mate es una persona joven y no sabe controlar si lo que está pensado será trasmitido a ti o no”

Había dicho el doctor.

“Por ahora no hay mucho que hacer, más allá de esperar a que el Soul mate crezca y sepa que está haciendo que todo lo que piensa lo escuche usted”

Rayos.

No le quedaba de otra más que esperar.

Y ya había pasado un año y nada aun. Gen estaba seguro de que faltaban al menos un par más de años para que ese chico le escuchara. Por lo que esperar se le antojaba demasiado lento.

Por eso él tenía un plan.

–  Voy a averiguar su nombre.