Reencarnación para proteger (Goku en mushoku tensei)(subida regular)

23-DEMONIOS AMIGABLES

Un leve sonido de ramas partiendose se escuchaban, un gran dolor volvía al guerrero que estaba recuperando los sentidos, recordando todo lo pasado anteriormente con el demonio Badigadi, que a pesar de haber salido victorioso según las palabras de él, quién había terminado en peores condiciones no había sido nadie más que él mismo.

Es por eso que ya un poco más relajado vería su condición, viendo con curiosidad como la mayoría de sus heridas, estaban siendo atendidas con vendas improvisadas, sintiendo un poco de dolor en sus zonas más afectadas, que eran sus huesos rotos y varios de sus órganos heridos, los cuáles con una rapidez curó ahora que tenía las fuerzas para hacerlo.

Ya una vez hecho eso se quitaría las vendas, mientras empezaba a observar su alrededor, viendo con curiosidad la fogata que estaba encendida enfrente suyo, pero más por lo que sentía y veía, que era el ki de la persona que lo había salvado justo antes de caer inconsciente.

Su poder era increíblemente alto, lo que se reflejaba en su musculado cuerpo, también se podía ver como llevaba una especie de lanza con forma de tridente en su mano, pero lo que más le llamó la atención era su aspecto, un pelo verde acompañado de una gema en su cabeza.

Eso le hizo recordar a dos cosas, a un amigo del pasado que tenía un tercer ojo, pero más importante a algo que vivió en esta nueva vida, aunque sin poder llegar a recordar la razón de esa sensación de nostalgia, le quitaría importancia acercándose al sujeto con una sonrisa.

-¡Hola ¿fuiste tú el que me salvaste cierto?!- preguntó Goku con una sonrisa.

Una gota de sudor se formó en el sujeto, por ver la confianza con la que le hablaba el saiyajin, siendo algo muy poco común, ya que la mayoría reaccionaba con un gran miedo, sin ser el caso del niño, viendo como le sonreía despreocupado.

-Así es... ¿por qué no me tienes miedo?- preguntó el demonio con confusión.

-¿Por qué debería tenerte miedo?- preguntó Goku con confusión.

-Soy un superd, ¿acaso no has escuchado las historias de nosotros?- preguntó el superd esperando la reacción del niño.

Se podía ver como el pequeño hacía una expresión de concentración, recordando las historias de los superd, que era una raza temida entre la raza demoníaca, recordando como era un cuento que le contaba su madre para tratar de asustarlo, así una expresión de emoción se formó en su cara, al saber la respuesta.

-Así es, si no mal recuerdo era una historia sobre que los superd, si no te ibas a dormir te comerían- dijo Goku narrando lo que recordaba.

Una expresión un poco molesta se formó en la cara del demonio, pero era superada por la de duda que tenía, al ver al niño que a pesar de saber lo que era, no emitía ni una señal de miedo.

-¿Estás bien niño, por qué no tienes miedo?- preguntó el superd más extrañado.

-Qué pero si esos son sólo cuentos ¿por qué te debería tener miedo?, si fuiste tú quién me salvo, además no eres una mala persona- dijo Goku con una sonrisa sintiendo su ki con facilidad.

Una cara sorprendida sorprendida se formó en la cara del demonio, que no pudo ver más que con impresión al saiyajin.

-Eres muy raro- dijo el superd con honestidad.

El saiyajin al escuchar eso sólo ríe mientras se rasca la cabeza.

-Ya eres uno de los varios que me lo dicen.