Reencarnación para proteger (Goku en mushoku tensei)(subida regular)

26-DESCANSO EN LA ALDEA

Los días pasaron, viéndose como es que la maga se notó un poco afectada por las palabras del abuelo, dándose cuenta de cómo es que era más cariñosa de normal, la feral con su compañero, pero aunque le molestara no iba a reclamar, debido a que disfrutaba ver la paz y tranquilidad del saiyajin.

Así fue como pasaron tres días desde su llegada a la aldea firlen, en el cuál el saiyajin disfrutó el reencuentro con su familia, pero había algo que le llamaba la atención, que era lo que había tratado de averiguar en los últimos dos días, siendo algo que no había podido resolver hasta el día de hoy.

Se podía ver al saiyajin fuera de la casa de uno de los aldeanos, exactamente en la de la mejor amiga de su madre, o sea la conocida Sandra, viéndose como la mujer sonreía al ver al saiyajin, ya que era la segunda vez que lo veía desde que volvió al pueblo.

-¡Vaya Goku es bueno verte, todavía no puedo creer cómo has crecido!- exclamó Sandra con felicidad.

-Ya es la tercera vez que lo dice- dijo Goku con una sonrisa nerviosa.

-Ah es verdad lo siento, es que todavía es sorprendente ver el cambio, ¡fueron 5 años sabes!, ¿pero bueno qué es lo que se te ofrece Goku?- preguntó Sandra con curiosidad.

-¿Dónde se encuentra Safaia?, y por favor no mienta como la otra vez, ya que sé que se encontraba en casa la vez pasada- dijo Goku recordando como el día pasado que vino, dijo que no se encontraba cuándo la vino a visitar.

-Vaya eres impresionante, pero ahora en serio no se encuentra en casa- dijo Sandra rascándose La cabeza nerviosa.

-Veo que no miente- dijo Goku poniendo sus brazos en su nuca, notándose muy pensativo.

De la nada unas palabras le llamaron su atención, girando volviendo a ver la mujer que le daba una mirada preocupada.

-No te voy a mentir Goku, no sé que es lo que pasa por la cabeza de Safaia, desde el día que te fuiste siempre se notó muy emocionada por volverse mas fuerte, deseando que llegara el día en que volvieras, algo que mantuvo hasta la semana pasada, siendo el cambio cuándo llegaste, no sé qué habrá generado eso pero me preocupa, por lo que espero que lo puedas resolver, se encuentra en el centro comprendo víveres- dijo Sandra seria pero mas preocupada.

-Entiendo...- dijo Goku notándose más pensativo por lo que escuchó.

El saiyajin tenía la idea de cuándo se fue, la niña se canso de esperar una promesa tan dura, al ver que su viaje duró más de 3 años sin volver a la aldea, y estaba casi seguro que la niña le agarró un leve rencor por mentir sobre que se volverían a ver pronto, o al menos eso era lo que creía, ya que si su rencor se generó nada más su llegada, le hizo imposible saber por qué era, queriendo saberlo aún más, ahora que sabía que no era una rabieta por lo que había pensado.

Se veía una niña en el pueblo, la cuál se notaba como su cuerpo estaba bien formado, seguramente por hacer constantes entrenamientos, y eso se reafirma al ver como cargaba con facilidad un saco de verduras, pero algo se podía ver claramente, que era como es que tenía una cara triste, lo cuál cambió a una de enojo al escuchar una voz.

-Safaia cuánto tiempo... ¿podemos hablar?- preguntó Goku viendo seria a la niña que era casi de su misma altura.

La niña con molestia veía al saiyajin, tensando su cuerpo apretando con fuerza el saco en sus manos, acercándose a la cara de saiyajin mostrando su enojo, algo que el saiyajin vio con miedo, recordando la mirada que le había dado la mujer, que había rechazado en su vida pasada.