MUTE

XVIII

"𝑵𝒊ñ𝒐𝒔 𝒕𝒓𝒂𝒗𝒊𝒆𝒔𝒐𝒔, 𝒏𝒐 𝒉𝒂𝒚 𝒐𝒕𝒓𝒂 𝒑𝒂𝒍𝒂𝒃𝒓𝒂 𝒑𝒂𝒓𝒂 𝒅𝒆𝒇𝒊𝒏𝒊𝒓𝒍𝒐𝒔"

El lugar era una mezcla de la naturaleza con la modernidad.

Caminos de pavimento serpenteaban entre los árboles, aptos para sillas de ruedas, Iban desde las cabañas hasta el comedor, junto con otros que llevaban hasta miradores sólo para pasear.

Junto con el mismo edificio donde estaba el comedor se encontraba una enfermería, en el exterior un playón daba lugar a mesas, bancos y una linda vista a un lejano lago entre los árboles.

Recorriendo el lugar, encontraron una piscina climática techada con todos sus equipos para personas de movilidad reducida, junto a varios juguetes para el agua.

Youngjo y Hwanwoong decidieron esperar a que llegaran sus menores para buscar una cabaña con cuatro camas disponibles para su grupo, mientras, Seoho y Keon fueron a acomodarse en una de las primeras cabañas, las designadas para los organizadores.

Vieron a otras personas comenzar a llegar al lugar, algunos hasta con perros de asistencia, que hacían a Hwanwoong sonreír ampliamente por lo lindos que eran.

Youngjo por su parte intentaba adivinar qué podrían tener cada una de esas personas, aunque muchos parecían totalmente sanos y eso lo confundía un poco.

-¡Kim Youngjoooo!

Aquel grito lo hizo mirar hacia todos lados, aunque no estaba preparado cuando su hermana apareció detrás de él para abrazarlo y estrujarlo con fuerza, claro que con el peliplata quejándose y Hwanwoong riendo por la escena.

-Estúpida, me asustaste.

-Pero a Woongie le da gracia.

-Si, Si, lo que digas-Hwasa le revolvió los cabellos.

-¡Wow! Miren esas entra...

-Que no me estoy quedando calvo, Hyejin.

-No, para nada, sólo te creció la frente.

Su hermana le dedicó una dulce sonrisa al rubio luego de darle un zape a su hermano, saludándolo con un abrazo más delicado, contrario a lo que hizo con el peliplata.

Se quedó hablando con ellos un rato hasta que Youngjo por fin le hizo la pregunta que había comenzado a inquietarlo.

-¿Qué haces aquí?-Interrumpió a su hermana, quién tardó un segundo en recordar por qué.

-Ah si, ¿Recuerdas que había empezado clases para ser policía?-El chico asintió-Conocí a un chico del mismo curso que yo, sufre epilepsia y lo habían invitado a este campamento, me pidió venir con él en pocas palabras.

-¿Epilepsia?-Repitió Youngjo.

-Si bobo ¿Qué dije?.

-Ya la conoces, esa de las convulsiones-Hwasa rodó los ojos.

-Como lo conozco, sé cómo ayudarlo cuando tiene una y se siente seguro conmigo, así que me molestó hasta que dijera que sí-La chica terminó con una sonrisa-Aunque en realidad acepté cuando me enteré que mi hermano y mi cuñado vendrían.

-Todo sea para molestarnos.

-Molestarte, Ravn, específicamente a ti-Corrigió la chica-Hwanwoong todavía me cae bien-Añadió, haciendo sonreír al chico mudo.

-¡Estoy viendo doble!-Gritó Leedo de forma burlesca al ver a los hermanos Kim.

En sus años de amistad, apenas había visto a Hyejin unas cuantas veces y el mayor tiempo que habían estado hablando había sido unos diez minutos en el cumpleaños de su amigo.