Seducción [+18]

Capítulo 1

Orgullo herido

Aaron Cavanaugh

Londres, 7 de julio.

Bufete de abogados Wembley, Cavanaugh and associates.

— Esto es una estupidez. ¡Como van a humillarme de tal manera!— hablo furioso.

— Nadie te está humillando, no seas dramático.— Violet habla desde su escritorio.

— Soy el único abogado penalista que siempre se ha encargado de este bufete. ¡Y ahora quieren traerme a una novata para que me reemplace!

— Entiendelo, Cavanaugh, el bufete cada día crece y crece. No puedes hacerte cargo de todo tu solo. Eres de los mejores, si, pero eso no quiere decir que tengas que hacerlo todo tú solo.

Tengo más de tres años siendo el único abogado penalista de este lugar, ahora se supone que debo compartir mi puesto con una jovencita estudiada, graduada con honores y suspuestamente capacitada para el puesto.

No soy machista, sé que esta es una profesión para ambos sexos, pero no es para nada justo que deba compartir mi puesto solo por haber perdido un caso en toda mi carrera.

Me dirijo a mi oficina sin decir nada, sé que esto es algo que no voy a ganar y no gastaré más energía en ello.

Era una persona difícil, bastante, de hecho, mucho más si se trataba de mi trabajo, soy orgulloso y egoísta cuando de eso se trata, sabía que actuaba de una forma inmadura por este tema pero no me importaba, me molesta que por haber perdido un caso por primera vez en toda mi carrera crean que soy insuficiente.

— Tú pesadilla llega mañana.— se burla Dylan entrando a mi oficina con una carpeta en las manos.

— No me interesa.

— Jasmine Monroe, 22 años, amsterdamesa.— empieza a leer ignorándome.— Dos años graduada, entró a la universidad con solo 16 años. Tiene un año ejerciendo esta carrera y mírala, ya estará en uno de los mejores bufetes del mundo.— adula con orgullo.

— Novata.

— ¿No sabes que no debes subestimar al enemigo?

— Sal de mi oficina, Dylan.

— ¿Sabes qué? tengo el presentimiento de que esta "novata"— hace comillas con sus dedos.— Traerá cambios a este lugar. ¡Estoy emocionado!— sale de mi oficina casi dando saltos.

Es tan inmaduro, no entiendo cómo lleva años de matrimonio.

¸.*☆*.¸

— Solo tienes el orgullo herido, tienes años encargandote tu solo y ahora te sientes inútil. Y solo porque perdiste un caso por primera vez.— Benjamin toma de su cerveza.

Las personas a mi alrededor y también mi consciencia deben dejar de recordarme tal dato.

— No necesito que me digas lo que ya sé.

— ¿Ya viste alguna foto o algo? ¿es linda?

— No sé y tampoco me importa.— miento.

Muero de ganas de ver el aspecto de mi pesadilla.

— Solo espero que un día no vengas a casa diciéndome que te la quieres tirar.

— ¿Por qué hablas como si yo fuera un mujeriego?

— Porque tienes meses sin sexo, Aaron.— pongo los ojos en blanco ante su comentario.— No digo que por estar soltero debas ser un promiscuo, pero hombre, no sé como sobrevives.