On The Streets (Chaelisa)

Capítulo 1

Pov. Rosé

¡Fue suficiente Roseanne!-- grita mi madre.

No entiendo ¿Que hice madre?-- pregunto con miedo en mi voz.

¡Eres débil! ¡Necesitas entrenar más duro!-- responde con voz autoritaria.

Yo... Yo... Yo hago mi mayor esfuerzo madre-- digo bajando mi cabeza.

¡No es suficiente!-- grita dándome una bofetada.

¡Suficiente! ¡A mi hija no le tocas un pelo Sandara!-- dice mi padre colocándose frente a mí.

¡No te metas en esto Jinyoung!-- dice ella seria.

Tu problema es conmigo no con ella-- dice mi padre.

No me interesa lo que pienses Jinyoung, algún día ella y tu entenderán, porqué, hago todo esto-- dice suspirando--Entrena más fuerte, algún día me lo agradecerás-- me dice para luego retirarse de la habitación.

¿Te duele?-- pregunta mi padre tocando mi mejilla.

No, pega como una nenita-- respondo a lo que el ríe.

Mi pequeña Rosie, cuando aprenderás-- dice sonriendo.

Probablemente nunca-- digo riendo.

No tienes que hacerlo Roseanne-- coloca sus manos en mis hombros-- no es necesario que te mates entrenando, yo siempre te protegeré-- dice sonriéndome.

Lo sé papá, pero mi madre tiene razón necesito estar preparada para cualquier situación, estoy en riesgo constante y no siempre vas a estar a mi lado, además no dejaré que, me amarguen mi vida-- respondo encogiéndome de hombros.

En qué, momento creciste tanto-- suspira antes de seguir hablando-- cuando menos me lo espere me traerás a un imbécil a la casa-- dice riendo.

Bueno no pienso en eso, adoro mi libertad, pero no niego la posibilidad, de que, sea cualquiera-- digo agachando mi cabeza.

Sea quien sea-- dice subiendo mi cabeza con su mano—si, a ti te hace feliz lo aceptaré, pero si te hace sufrir... Lo mataré-- lo abrazo con todas mis Fuerzas, es el mejor de todos.

Gracias padre-- digo enterrado mi cabeza en su cuello.

Bueno ahora, tengo algo que hacer-- nos separamos del abrazo-- porque, no sales a dar una vuelta con tu primo-- dice.

Es una gran idea, nos vemos papá-- me despido con un abrazo y un beso en su mejilla.

Salgo de la sala para buscar a mi primo, vivimos en un barrio, a pesar de eso, vivo en una casa considerada una mansión, ya que, mis padres son los jefes de una de las pandillas más importantes del lugar.

Constantemente hay enfrentamientos, entre nuestra pandilla y la rival. Por eso siempre estoy en peligro, pero, me niego a ser la típica damisela en apuros, yo puedo patearle el trasero a cualquiera.

Subo las escaleras hasta llegar al cuarto de mi primo, toco la puerta, antes de, entrar, al no obtener respuesta entro y lo observo dormir en la cama. No pienso mucho mi siguiente movimiento y me le tiro encima para despertarlo.

¡Jimin! ¡Despierta dormilón!-- le digo mientras intento despertarlo.

¿Qué quieres Roseanne?-- dice adormilado.

Mi papa dijo que podíamos salir a dar una vuelta-- respondo y el rubio abre sus ojos como platos y se sienta en la cama.

¿En serio?-- pregunta ilusionado.

Si, Jiminie. Vamos cambiante te espero en mi cuarto—digo levantándome para dirigirme a mi habitación.

Les explicaré un poco. En una parte solitaria de Corea existe una pequeña ciudad dominadas por las pandillas, aquí la policía no tiene jurisdicción.

Las pandillas están dispersas por todos lados, de distintas clases y cada quien en su territorio, pero hay una lucha constante por el poder de la ciudad. Este, está en manos de dos pandillas claves, Alfa, que es donde, yo pertenezco dirigida por mis padres y Omega es nuestro principal rival.

Contantemente estamos atacando su territorio o ellos el nuestro. Es un asco ¿saben? Es decir amo a mis padres, aunque mi madre tiene carácter de mierda, me quiere a su manera y mis amigos. Pero esto no es vida, pensar que, en cualquier momento puedo terminar con una bala en el cerebro.

Llego a mi habitación, entro y me tiro a mi cama, quisiera poder huir de todo esto. Seria visto como traición y me buscarían para matarme por un tiempo, pero si me escondo el tiempo suficiente me darán por muerta y me dejaran en paz.

Lo único que, me detiene es mi padre, lo quiero demasiado y no soportaría estar lejos de él... aunque estoy consciente que para él siempre irá primero el poder,  podría pedirle a Jimin que venga conmigo y en cuanto a mi madre estoy segura que no le daría tanta importancia... aunque puedo estar exagerando.

Rosie ¿Estas lista?-- pregunta Jimin entrando a la habitación.

Si, vamos--respondo levantándome algo desanimada de la cama.

Vamos pequeña Rosie, no te desanimes, aunque no sea, un paraíso este lugar aún podemos divertirnos. Quizás nos pase algo interesante-- dice el rubio pasando un brazo por mis hombros.

Tienes razón, vamos a meternos un rato en problemas-- digo y ambos reímos.

Mi vida es tan impredecible que, me podría caer un meteorito o conocer al mismísimo presidente sin que yo me lo busque.