XVI

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En serio, ver a Kita Shinsuke siempre lo dejaba sin aliento

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En serio, ver a Kita Shinsuke siempre lo dejaba sin aliento.

Justo como en estos momentos.

Aran sabía que lo iba a ver por la tarde y que él le entregaría su auto, lo sabía muy bien.

Lo estaba esperando apenas se levantó porque sabe muy bien que Kita es una persona puntual y que iba a llegar a la hora exacta.

Siempre ha sido así, Aran hasta cierto punto llegó a pensar que algún día podría predecir a Kita.

Sin embargo, estaba completamente equivocado.

Apenas abrió la puerta y Kita le entregó las llaves de su auto dijo:

—Lo siento.

A Aran todavía le costaba creer que Kita dijo esas palabras, principalmente porque no sabía por qué se estaba disculpando; no lo entendía en lo absoluto.

También es que le dolía un poco la cabeza por tanto beber.

—¿Por qué te disculpas? —fue lo que pudo pronunciar mientras tomaba las llaves—. No tienes que hacerlo, dudo mucho que haya pasado algo para que te disculpes y también dudo que sea tu culpa.

—¿Incluso si rayé tu auto?

—¡¿Qué?!

Kita mostró una pequeña sonrisa entre sus labios.

—Oh, estabas bromeando —guardó unos segundos de silencio y después dijo—. Tú nunca bromeas.

—Es cierto —aceptó Kita—. Solo quería ver tu reacción.

Aran soltó una leve risa.

—Pero no lo hiciste, ¿verdad?

Kita negó con la cabeza.

—No, por supuesto que no.

—Entonces no veo por qué te estás disculpando.

Vio como Kita tomó aire y lo observó directamente a los ojos.

Volver a ver esos brillantes ojos fijos en él era un espectáculo que siempre disfrutaba, los ojos de Kita siempre le han parecido unas preciosas y brillantes piedras.

Algo sumamente hermoso.

—Me disculpo por todo.

—Repito —Aran seguía confundido—. No entiendo por qué te estás disculpando.

—Me disculpo por todo el daño que te hice y en el camino yo terminé haciendo lo mismo conmigo.

—¿Cómo?

Aran salió un poco de su casa, no le interesaba estar descalzo, ni tampoco parecer que le acaban de dar un golpe justo en la cara.

Solo necesitaba comprender lo que estaba decidiendo Kita.

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