"Hunger" [GS]

XII

Huir, huir y nuevamente huir, se volvía tedioso ¿no?

¿Pero de que exactamente huye? ¿De él o de ella misma?¿De lo que pasó o de lo que está por pasar? ¿Por que no podía ser reacia y tomar una decisión?

Suspira con pesar, como a menudo lo hace mientras se cuestionaba una y mil cosas respecto a ella, respecto a su situación, respecto a su vida ¿que rumbo tomaría su vida de ahora en adelante?

Al corree y luego caminar sin rumbo, termina encontrándose con un colega en su división...

—Buenos días Iguro-san— Dice mas por respeto y educación que por gusto.

—Igualmente—probablemente el responde por lo mismo, ya que al cabo ellos sólo se relacionan por temas laborales, nada personal.

Pero de algún modo, terminaron caminando hombro o a hombro, o bueno, uno al lado del otro.

—¿Porqué estás aquí?—Dice por fin el pilar de la serpiente, kaburamaru saca la lengua, como si de algún modo estuvieran sincronizados.

—¿Eh? ¿Que acaso no puedo estar aquí?—Responde ella con altivez en su voz.

—Me refiero a qué haces por aquí, casi nunca o mejor dicho nunca rondas por acá—Aclara el joven

—Emm, bueno—ella mira disimuladamente hacía ambos lados, em busca de una respuesta que no la delatara—quería despejarme un poco, ya sabes...—

—comprensible, no estamos en una situación fácil—

Vuelven a un silencio un tanto incómodo, ya que no suelen relacionarse, esta situación era un tanto extraña.

Iguro-san, siempre tan callado y lleno de misterio, me pregunto quién ronda en tu cabeza.

—¿Alguna vez te haz enamorado?—Suelta de golpe la más baja.

El pelinegro se tensa en su lugar e interrumpe su caminar.

—¿Dije algo malo?—Dice con un deje de preocupación.

Pasan unos segundos hasta que oye una respuesta.

—No, es sólo que me sorprendiste—

—Oh, lo lamentó—Ella baja su mirada, no quiso hacerlo sentir incómodo, y la verdad, ni siquiera lo consideró.

—¿Tengo que contestar eso?—se le ve nervioso.

—Si no quieres no—

Luego de decir lo último, vuelven al punto de inicio, caminando hacia quién sabe dónde por quién sabe cuánto tiempo.

Él es silencioso, introvertido, sin embargo no se aleja a si mismo como lo hace Tomioka, y aún no termina de entender la relación que tienen ellos dos, pero al parecer al de vendas no le agrada para nada el de coleta, pero bueno, tendrá sus motivos, Giyuu no es alguien muy agradable después de todo.

Ni siquiera sabe bien por qué le gusta, quiere decir, le llame la atención, debe admitir que tiene un cuerpo tallado por los dioses "o por los entrenamientos" y tiene un rostro... pasable, pero su actitud era horrenda, no socializaba con alguien a menos que...

—Sí—

Sacada de lugar, se detiene y le lanza una mirada con confusión más que cualquier cosa.

El la capta, y de inmediato le aclara—si me he, ya sabes, ena... enamo...eso...—

Vaya, Kouchou no creyó que su colega tuviera una lado tímido.

—¿Cómo sabes que lo estás?—

—Lo siento—El pilar suspira—pienso en ella casi todo el tiempo, es vergonzoso admitirlo, pero creo de algún modo, aquella persona ilumina mi vida, quiero estar al margen, pero simplemente me aferro más y más, es complicado, de expresar, de transmitir, y me siento solitario al saber que estoy tan cerca, pero a la vez es tan inalcanzable—

—¿Te hace sentir mal?—

—Depende de como lo veas, quisiera estar con ella siempre, pero ese es justo el problema—

—Lo lamento, pero yo lo veo del lado negativo—

—lo vemos...—Le interrumpe el chico.

—¿Fue espontáneo, o se dio con el tiempo?—

El chico piensa por un momento.

—Ambos, fue espontáneo, pero a medida que pasó eo tiempo se fue incrementando—

—Ya veo—¿Ella no estaba enamorada?

Ya ni se lo que siento hacía mi misma.

—Aprecio este sentimiento más que a mi vida misma—continuó—sin embargo a veces quisiera despojarme de él, y exterminarlo por completo—

—Creo que lo entiendo, hay veces en que me parece repulsivo, no por la persona, si no que por mí—

—Al parecer pensamos lo mismo—

Sin previo aviso, una curvatura se forma en sus labios, le agrada la idea de que alguien la comprenda, o por lo menos la entienda.

—Kouchou—él llama su atención a lo que ella alza la cabeza, dando a entender que lo escucha—ahora iré con Kanroji-san, así que me despido—

—Bueno, entonces... ten un buen día—

Obanai finalmente posa sus heterocromáticos ojos sobre los suyos y sostienen la mirada.

Shinobu piensa que sus exóticos ojos son lindos, un pensamiento bastante pasajero a decir verdad.

—No sé que te está pasando, pero...

"Buena suerte descubriéndolo, y descrubriéndote"

Espero y lo averigües pronto—El chico se voltea y su serpiente lo mira.

Ella, estática, finalmente lo entiende, amplia la apertura de sus ojos y pestañea rápido.

Aquella mirada, la había percibido en ella, y la había percibido en Tomioka, aquella mirada cargada de una ilusión quebrada que no llegará a algun lado, más que a lo que su corazón se permita. "contención" por algún u otro motivo contienen el remolino de emociones dentro de sí, y llegó a una conclusión. No le gustó.

Avanza en rumbo dirección en la que quedó parada, el sol sin duda se había desplazado, pero aún no estaba en su máximo punto, faltaba para el mediodía.

Unos pasos rápidos se oyen, y se detienen justo detrás de ella, no era necesario voltear, sabía perfectamente de quién se trataba.

—¿Que hacías con el?—su voz se entona más seria de los acostumbrado.

—¿Qué? ¿Te tengo que decir acaso?—Le gusta jugar con él, tentar a su suerte—¿o te molesta?—

No sabe que expresión tiene exactamente, pero de seguro tiene el ceño fruncido, los ojos más abiertos de lo normal, los labios juntos, muy pegados y la cabeza gacha. Sonríe para si misma, lo conoce tan bien, pero no sabe nada de él, irónico.

—Lo hace—

"No me gusta que toquen lo mío, aún más si se trata de ti, cuando ni siquiera yo mismo puedo tocarte"

—¿Quién lo diría de tí, eres un saco de sorpresas?—Ella sonriente fastidiaba un poco al chico, sólo un poco.

—¿Soy un saco...?—Murmura el de ojos azules, y sacude su cabeza, ese no era el punto—tch, eso ni es lo importante.

Tomioka duda, sabe que es sólo un impulso pero no pudo detenerlo, y cuando fue consciente de todo, se encontraba abrazando por la espalda a la menor.

Era cálido, confortable, Tomioka suele ser molesto, no lo iba negar, pero de algún modo, ese sentimiento de posesión, no, de protección ...le agradó y le agradaría lo que restaba de su vida...

Te quiero tener a tí, no lo entiendo, pero no quiero nada más que no seas tú.

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Por fin actualicé! Perdón por la demora, así que escribí un capítulo un poco más largo, eso, no me odien plis 💞

Recuerden que los amo y cuídense de covid, como siempre, salgam solo si es necesario, usen alcohol gel y laven sus manos, cuídate a ti, y cuida a todo, que esta pandemia la venceremos juntos....

Yaaa sjshhs, parezco comercial del gobierno jskajsja...