The goddess' heart 🫀 beta version

That night

(Editado)
*si en los comentarios ven que se menciona a un Luke, se refieren a Llyr, hubo un cambio de nombre*
🫀
1537

El sol se había ocultado hacía casi dos horas, lo único que ahora iluminaba el cielo era la tenue luz que la luna junto a las estrellas emanaban.

Mavra nadaba tranquila, junto a un cardumen de peces, que chocaban juguetonamente contra ella, la pequeña sirena solamente sonreía y continuaba nadando entre los cientos de peces, dando vueltas y acariciando cuidadosamente las anémonas y algas.

Siguió a los peces hacia la superficie, estando ella unos cuantos metros por encima de ellos, a pesar de que tenía prohibido nadar en la superficie hasta que cumpliera doce años, de cualquier forma, ella siempre subía para ver el amanecer y el atardecer, aunque jamás había sacado ni un solo dedo del agua, solamente miraba el cielo teñirse de distintos colores a través del agua.

Mientras nadaba hacía la profundidad, donde habían flores de colores, un ruido ajeno a los peces atrajo su atención.

Se quedo quieta y dirigió su vista hacia arriba, curiosa, comenzó a nadar lentamente hacia la superficie.

Parecían cantos, pero, eran diferentes a los que había escuchado toda su vida.

Permaneció mirando fijamente hacia arriba, con unas inmensas ganas de descubrir que era todo ese ruido, parecía divertido.

Parecía estar hipnotizada, hasta que una gran sombra cubrió la superficie, sus ojos se abrieron en sorpresa, soltó un pequeño grito y entonces comenzó a nadar rápidamente hacia los peces, alejándose lo más posible de los humanos.

Mientras ella intentaba acercarse a ellos, notó cómo todos los peces comenzaban a nadar hacia ella a toda velocidad, no perdió el tiempo en preguntas y se giró, escapando de lo que fuera que los peces estuvieran escapando.

No fue lo suficientemente rápida.

De un momento a otro, sintió algo chocar contra su cuerpo, intentó alejarse de esa cosa rasposa y gruesa, pero estaba rodeada de los peces, nadando como locos en todas direcciones, intento escapar, pero no había ni un solo agujero y sus uñas aún no eran tan largas, comenzó a jalar de la red, pero era demasiado gruesa.

Con cada segundo que pasaba sentía su cuerpo apretarse más contra los cientos de peces, costándole moverse cada vez más, gritó de pura desesperación, mientras aún intentaba no darse por vencida.

Y mientras la red se elevaba hacia la superficie, Mavra gritó y gritó por ayuda, cada vez más fuerte, hasta que dejó de sentir el mar contra su cuerpo.

Sintió las lágrimas correr contra su rostro, alargó el brazo de forma inútil y llamó nuevamente a su madre.

Ante su grito,el canto alegre junto a las risas de los humanos se habían detenido por completo.

-¿Que demonios fue eso?-preguntó uno en voz alta.

-No se.-respondió otro, mientras ocho hombres subían por completo la red, con ayuda de una gran polea.

Mavra se obligó a mantenerse en silencio, a pesar de lo mucho que deseaba llorar y gritar, podía sentir a los peces moverse descontrolados contra ella, sin poder respirar.

-¿Sirenas?-preguntó otra voz, sacando un cuchillo de su bota.

-Tal vez...estén alerta.-respondió la misma voz de la primera vez.

Mavra soltó un silencioso jadeo al sentir como su cuerpo caía al piso junto con los peces, apoyó sus pequeñas manos contra la extraña y desconocida superficie.