¡Quédate conmigo! Mi niñato

-05-

-extrañar mierdas no es lo mío- le hablo y levanta una ceja.
-Disculpa ¿me has llamado mierda?
-Aparte de eso eres un retrasado-ruedo los ojos.

¿Que creía? ¿Que iba a ser una niña llorona como antes?
¿O q me iba a quedar callada siendo amable con quién me destruyó en su momento? ¡No! Ya no soy la misma y ahora estoy más que feliz, a este imbecil le haré la pinche vida miserable waa ja ja ja ja
- ¿es que no sabes quien soy?-Se aceca a mi lentamente y levanta una ceja
-¡¿pregúntame si me importa?! ¡¡Anda haszlo!!- y me levanto de la silla y me le acerco
-No te atrevas a decir una grosería más- frunce las cejas y ya veo como camina para quedar frente a mí.
-COMES, MIERDA, ESTUPIDO.-digo palabra por palabra y me cruzo de brazos.
- Te advertí
- Me importa
De inmediato me agarra de las muñecas y trato de soltarme entre empujones y caminamos a donde acaba de salir
- ¡que mierda haces suéltame!-Le grito.
-¡¿No que no te importaba?!- le sonrió como el demonio que llevo dentro.
-ok vamos.- y ahora yo lo agarro y entramos, es un cuarto grande con una minibliblioteca , y un escritorio con muchos papeles, hay cuadros de colores grandes.
-¡¿quién diablos eres?! Y ¿ que hiciste con mi Megky?- me pregunta y solo volteó los ojos.

-Soy Rebecca, ¿Que parte no entendiste? ¡¡¡ Y NO ME VUELVAS A LLAMAR MEGKY !!!-le grito enfrente de su cara bonita. Y me sonríe de una manera que párese un puto psicópata. Cruzo mis manos para disimilar que estoy seria.

-¡MEGKY!-me grita y le tiro una patada en los meros huevos a la velocidad de un rayo.-Ahhh ¡¡¡eso duele!!! ¡Maldita sea! Ah!-  se agacha y sonrió y me le río viendo como se retuerce.

- vuélvelo a decir y no lo vuelves a escuchar.-  me le acerco susurrándoselo en su oído.

-Rebecca devuélveme a mi Niña-dice después de levantarse y hacer caras de dolor por cada movimiento que hace.
- ¿cual quieres? ¿Aquella que lloró por un estupido como tu? ¿Aquella que era estúpida por ti?-observo como su mirada se suaviza , se lleva las manos a la cabeza y grita.
-¡¿De que cojones me estas hablando?!
-Olvídalo siempre serás un estúpido-y salgo corriendo del cuarto, cuando llego a la puerta para salirme, me detengo y volteo a verlo esta sentado en su escritorio.-Dame mi castigo y dile a mi supuesto padre que esta muy mono y del asco el director que compró para mi.
-Te quedarás después de clases a limpiar la cafetería, ahora vete, malcriada.
-Tu vete a ver culos y deja de fingir alguien que no eres, mierda defecada.-salgo y me dirijo a el campo, necesito reflexionar ¡¿qué mierdas pasó allí adentro?!, me dolió la parte baja de la cabeza, me la agarre y me senté em el campo, sostuve con dos manos mi cabeza, ella quería volver, se lo permití.

Llámame cuando quieras Megan.

"Eso hare, Gracias"
Imposible olvidar al chico que te gustó por primera ves, no puedo evitar reír conmigo misma mientras arranco el maldito césped . El imbécil que te trato como princesa y luego enfrente de su mejor amigo le dijo que era una niña fea  que daba asco, ¿como me enteré? Pues mi hermano y su mejor amigo tiene la culpa, ya que los idiotas olvidaron unos videojuegos en la casa de el mejor amigo de mi hermano, me llevaba bien con ellos, amaba a este estúpido que  hablo mal de mi, y al ir em busca de sus videojuegos estaba el y su mejor amigo, el burlándose de mi y él queriendo desmarcarar, ese día que escuché sus palabras recuerdo que sólo corrí de vuelta a casa y me encerré en mi cuarto.
Pasaba llorando, sus palabras habían derrumbado mi autoestima, me sentí del asco como sus palabras, me daba miedo verme en el espejo, mi hermano me preguntó que sucedio y sólo le respondí que  un niño en el camino me trató mal, y siguió jugando con su amigo, y yo simplemente derrumbándome, fatal, porque sus palabras fueron fuertes a tan sólo una niña de 11 años que se enamoró de un universitario que le regalaba helados, dulces y la llevaba al cine, tratándome como una princesa, entendí que era la Fiona.