April Golden
La chica dorada de Hufflepuff
Nunca en su vida había escuchado el nombre de Cedric hasta su tercer año en el colegio Hogwarts de magia y hechicería
Cedric Diggory
El chico dorado de Hufflepuff
Claro que sabía de Golden no solo eso...
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Nervios, Cedric tenía tantos nervios la primera prueba sería en tan solo unas horas y aún no sabía con certeza qué hechizo usaría para defender su vida de un enorme dragón, no había dormido esas últimas semanas y Goldy lo había notado así que esta se dio a la tarea de buscar una manera en la cual pudiera ayudar a su novio en la primera prueba y la encontró ahora solo faltaba encontrar a Cedric quien seguramente estaría tan ocupado con todas esas personas que lo buscaban para hacer preguntas acerca de cómo se sentía en la primera prueba, Goldy logró encontrar a Cedric en el gran comedor.
— ¡Tejón! — Goldy gritó llegando a lado de Cedric tomando asiento colocando los libros que tenía con ella.
— ¿Qué pasa linda? — Cedric preguntó al ver a su novia tan agitada.
— Lo tengo — Goldy pronunció orgullosa de si misma mientras buscaba una hoja en específico de uno de los libros— Ambos sabemos que derrotar a un dragón no será muy fácil.
— Goldy estaré bien— Cedric interrumpió a Goldy intentarlo calmarla colocando su palma en la espalda de la menor.
— Déjame terminar Diggory— Goldy dijo sería — Eres bueno en prácticamente todo, pero eres excelente en Transformaciones.
— ¿Qué hay con eso? — Cedric preguntó un poco confundido.
— Aún no tienes un plan ¿Cierto? — Goldy preguntó a Cedric.
— Si te soy sincero realmente no lo tengo — Cedric respondió avergonzado bajando un poco la mirada.
— ¡Genial! — Goldy gritó ganándose la atención de todos los presentes en el Gran Comedor aunque no había muchas personas ahí.
— ¿Tú tienes uno? — Cedric preguntó atento a Goldy, esta sonrió y asintió repetidas veces.
— Tal vez deberías utilizar la transformación— Goldy propuso como orgullo de sí misma después de todas esas horas dentro de la biblioteca buscando alguna manera para poder combatir a un dragón.
— ¿Quieres que me convierta en un dragón? — Cedric preguntó confundido— Goldy se que soy bueno en transformaciones pero no lo soy a ese nivel además no soy un animago — Cedric dijo un poco avergonzarlo al tener que explicarle eso a su novia.
— ¡Eso no idiota! — Goldy gritó golpeando ligeramente el brazo derecho de Cedric.
— No me digas idiota — Cedric mencionó con un puchero y abriendo más sus ojos de lo normal.
— Lo siento tejón es solo que a veces puedes ser muy distraído — Goldy dijo mientras acariciaba el esponjado cabello de Cedric.
— Está bien lo acepto puedo llegar a ser muy distraído — Cedric contesto con vergüenza haciendo reír ligeramente a Goldy. — ¿Qué tienes en mente? — Cedric preguntó parándose de la mesa de Hufflepuff seguido de Goldy, comenzando a caminar en dirección a la sala común o algún lugar del cual Goldy no está muy segura donde era.
