FANCY 👠 Mello (Mihael Kheel)

29 👠 Final€$

No tardé mucho en llegar a aquel hostal, fui en coche. Entre a la recepción pensando que vería a alguien o que alguien me vería a mí, pero no fue así. Miré el reloj en mi teléfono, ya habían pasado dos minutos de la hora acordada.

Decidí acercarme al mostrador y preguntarle a las dos chicas que había allí si había una habitación reservada a nombre de "Kelly", ya que ese era el nombre que usaba por aquel entonces. Me dijeron que no. Suspiré y pregunté si el nombre era el de "Katherine". Ahí sí.

Me dieron una llave colgada de un llavero de madera algo gastado con el número de la habitación tallado. Subí las escaleras que llevaban hasta ella. Metí la llave en la cerradura y abrí. Debí saber que, desde que pisé la recepción, no, desde que me acerqué a los alrededores de aquel hostal, estaría de mierda hasta el cuello.

Cerré la puerta a mi espalda, esperando que alguien me recibiera. No fue así. Miré la habitación con algo de desconfianza, sin saber muy bien qué pensar. Al entrar, recuerdo que había un pequeño pasillo que te llevaba a la única habitación, pero antes había un cuarto de baño. Era las ocho de la tarde, en verano, así que entraba el sol por la ventana. La habitación estaba completamente iluminada, incluido el baño. La puerta estaba abierta unos dos dedos, con la luz dada.

Fruncí el ceño, me puse frente a la puerta y le pegué una patada. Pensé que allí habría alguien que me esperaría por motivos de negocios o algo así. Ojalá.

A quién ví fue a Gyselle, la exnovia de mi novia, en la bañera con el agua teñida de sangre. Tenía las venas cortadas. Y estaba muerta.

Mi cabeza comenzó a dar vueltas. ¿Se había suicidado? ¿Y me había mandado un mensaje para hacerme sentir culpable? ¿O me había mandado aquel mensaje para que entrara en la "escena del crimen" y que quizás se me pudiera acusar de asesinato? Esa tía estaba loca, me podía esperar cualquier cosa.

Antes de que pudiera buscar una explicación medianamente lógica, oí como alguien habría la puerta con otra llave. Salí del baño y me encontré de bruces con Jessica.

-Katherine... - murmuró ella. - ¿Por qué querías que nos reuniéramos aquí?

Llegué a cerrar la puerta, al menos.

-¿Yo quería? - Pregunté confusa.

-Sí, mira, me mandaste este mensaje - contestó mientras sacaba su móvil. Me enseñó nuestro chat. Resultaba que yo le había mandado un mensaje de texto diciéndole que viniera a este hotel, a esta misma habitación y a esa hora.

Alguien me había tendido una trampa.

-¿Estás bien? - Preguntó ella. - Estás pálida.

Me bloqueé. Creo que fue la única vez que me ha pasado. No sabía qué hacer, aquella situación era completamente incomprensible.

No lo recuerdo, estaba demasiado confusa. El tiempo se me paró unos segundos y antes de que pudiera impedirlo, Jessica abrió la puerta del cuarto de baño.
FIN FLASBACK

Rexha suspiró y miró a Mello.

-En resumen, Jessica creyó que había sido yo - murmuró la joven. - Traté de explicarle que yo no le había mandado ese mensaje, pero ella insistía en que entonces me había equivocado y era para un supuesto cómplice. Le mostré el mensaje que me llegó a mí y me respondió diciendo que podía ser de ese supuesto cómplice. Yo estaba tan atontada que no sabía que hacer. Me dijo que era un monstruo y me dejó. Se fue de la habitación llorando y yo no... pues eso, que no sabía qué hacer.

-¿Pero la mataste o no? - Preguntó Mello.

-No, claro que no - contestó Rexha. - Alguien quería que lo dejara con Jessica, y solo conocía a dos personas que lo quisieran: Gyselle y mi padre. Y, vale, esa tía estaba mal de la cabeza, pero estoy segura de que no fue ella. Me cabreé muchísimo con mi padre y dejé de hablarle, aunque sí le conté qué había pasado. Él era el único que me podía sacar de un lío así, podrían haberme incriminado por asesinato.

-¿Entonces fue tu padre? - Preguntó Mello. - ¿De verdad crees que fue Ross?

-No fue él directamente... - murmuró la chica. - Fue Ryan.

-¿Tu amigo? ¿Raven? - Preguntó el chico. - ¿Por qué crees eso?

-Por lo que dijo antes de morir - respondió Rexha. - "Katherine... yo la maté... Ross me lo pidió... yo la maté... lo siento... no fue un suicidio... yo la maté". Ryan conocía mi verdadero nombre, él mató a Gyselle por encargo de mi padre y después, cuando le dije a mi padre que haría las cosas a mi manera, él le pidió a Ryan que me siguiera a todas partes. Debió de sentirse muy culpable después de pasar dos años con la persona a la que le había destrozado la vida. En el fondo, él fue una buena persona que hizo algo que no debía. No tengo ni idea de quién era, no sabía nada de su pasado. Solo sabía cómo era. Y Ryan fue un ángel que fue al infierno.

Rexha suspiró y le dio una última calada a su cigarrillo. Bajó un poco la ventanilla del coche y lo tiró.

-Oye, si no quieres acostarte conmigo, no hacía falta que te inventases toda esta historia - bromeó Mello.

Rexha rió.

-No me la he inventado, idiota - murmuró ella.

-Lo sé - contestó Mello. Se quedaron unos segundos en silencio, hasta que él volvió a hablar. - Entonces, después del Caso Kira, ¿volverás con ella?

-¿¡Qué!? - Preguntó Rexha. - No, ella ahora me odia porque soy un monstruo. Y razón no le falta.

-Pero ya "has resuelto el caso" - dijo Mello, haciendo comillas. - Sabes lo que pasó y puedes explicárselo.

La chica negó con la cabeza.

-No, da igual... - murmuró con algo de tristeza.

-Su apellido era Blake, ¿no? - Preguntó Mello.

-¿Eh? - Respondió la chica.

-Recuerdo que hace un tiempo, estabas leyendo una revista de Vogue cuando de pronto te... enfadaste, más o menos - recordó Mello. - Dejaste en la revista en la mesa y te fuiste. Vi la página, y recuerdo que aparecía una modelo llamada Jessica Blake, es ella, ¿no?

-Puede... - murmuró Rexha.

-Está en Japón, según ponía el artículo - respondió él. - Podrías ir a la agencia y preguntar por ella.

-¿Qué? No, no soy una psicópata - contestó la chica. - Mello, déjalo, esa historia ya llegó a su final.