Los títeres del amor (Terminada)

El plan esta en marcha

Thomas McAdams

La noche estaba tan aburrida sin ella, estaba a lado de Sara, su platica era tan banal y aburrida, deseaba estar en este momento con Alicia, siempre la necesitaba.

-Que tanto piensas Thomas, no te di la invitación para que tu mente esté en quien sabe donde.

-Tienes razón, debería ser un caballero, pero pónmelo fácil, no eres la persona más fácil de tratar.

-Bien, llévame a bailar, me estoy poniendo de mal humor, porque no mejor me besas, las chicas dicen que lo haces muy bien.-dijo sonriendo.

En tu vida, no eres ella.

Daxton siempre era tan inoportuno y agresivo, pero en este momento estaba tan de acuerdo con sus palabras.

-No me lo tomes a mal, pero no deseo besarte, estoy aquí por otros asuntos, fui claro contigo.

-Esto no era parte del trato, eran las invitaciones por una noche contigo, tú mente y tu cuerpo están perdidos en quien sabe quien.

Ella se colgó de mi cuello queriendo besarme y yo la aparte, ella insistía tenerme, pero yo no la deseaba ni un poco, yo estaba perdido por Alicia, no había más chicas para mi, solo ella.

No has escuchado que no quiere nada contigo.-dijo Alicia volteando los ojos y dirigiéndose a Sara.

-¿Tu quien rayos eres? ¿Por qué te metes en donde no te llaman?.-maldijo por lo bajo.

Me molesto tanto que le hablara así, justo cuando iba a articular palabra Alicia contesto.

-Estos son mis asuntos porque tienes tus brazos encima de mi novio.-mencionó molesta.

No ponía negar que ella me defendiera ante Sara como suyo me ponía loco, solo quería llevarla a un maldito cuarto y hacerla mía, hacerla gemir mi nombre, mi pene estaba tan duro con su presencia, se veía increíble con ese vestido que se ajustaba a su cuerpo, ese pecho, toda ella, era demasiado para mi.

-Chicas basta, Sara, ella tiene razón, es mi novia y la amo con todo mi ser, jamás haría algo para dañarla.-mencione sonriéndole.

-Ya oíste Sara, márchate ahora.-mencionó riendo.

Ella hizo unas cuantas bromas, la bese y la lleve a la pista, hasta que mi estúpido padre llegó a interrumpirnos, menos mal que antes ya había avisado a Alex que algo no me cuadraba, debía ser una trampa, mi padre siempre creía que iba un paso adelante, pero esta vez no, no mas.

-Haz llegado hijo y también tu Alicia, que sorpresa tenerlos aquí, no recordaba tenerlos entre los invitados, debí olvidarlo.

-Mierda.-dijo Alicia por lo bajo.

-Cuida esas palabras, ahora tráiganlos, no quiero que los presentes se enteren de lo que haré con ustedes, debo agradecerle a Sara, pensé que no serían tan tontos de asistir, pero henos aquí, la familia completa. Por fin estamos todos juntos.

-Que familia, no somos una hace mucho.

Nos llevaron a una habitación, seguro era la nueva sala oscura, así le llamaba mi padre al lugar donde disfrutaba maltratar y asesinar a sus enemigos, pero esta era nueva, aún podia respirar el olor a nuevo.