CAP 16
PHOENIX
¿Ahora que haría?, tenía algo dentro que me controlaba y yo no podía hacer nada, todo por ese estúpido trato, la única solución que había era hablar con el pelirrojo ese, pero como lo voy a encontrar.
Gruñí enfadada, esto me pasaba por no pensar las cosas antes de hacerlas, y encima recordaba la carita que había puesto Zercán cuando le dije eso, y el corazón se me comprimía en el pecho.
De un momento a otro me vino un dolor muy agudo en el estómago, estaba hambrienta, me levante y creció el dolor, gemí adolorida.
- Parece que tienes hambre אהובי. Escuche una voz muy conocida. gire mi cabeza y lo vi, a él, al pelirrojo.
Con una furia corriéndome en las venas me acerque a él, y le di un empujón.
- ¿Qué me has hecho, cabrón?. le grité, y él solo sonrió.
- Tu me diste permiso. dijo sonriéndome aún más y acercándose a mí, mi espalda chocó contra el árbol de atrás.
Él me tenía acorralada.
Subió su mano y me acarició el cuello, mi piel se estremeció ante su tacto.
- Me prometiste que serías mía, para siempre, y me cediste tu alma אהובי. En cuanto dijo eso me quedé en shock, que yo que.
-No, no. Dije negando con mi cabeza, no podía ser verdad.
De repente otra vez sentí ese agudo dolor en mi estomago y me doblo sobre mi misma.
Él me cogió en brazos mientras yo me retorcía del dolor.
Saliendo de mis pensamientos me doy cuenta de que el pelirrojo me había traído a una casa de color negra entera hecha de mármol, y con grandes ventanales abiertos por donde entraba una fría corriente de aire ,y se veía el cielo gris, con tonos negros y muchas nubes, el me dejo en un sofá largo de terciopelo color obsidiana.
Y se fue, después de unos minutos cuando volvió traía un vaso con un líquido rojo oscuro, que parecía espeso.
- Toma. Me lo tendió, yo lo cogí y lo olisquee, e inmediatamente se lo devolví era sangre, iuu.
- Tómatelo o te seguirá doliendo. Dijo perdiendo la paciencia.
Yo lo cogí de mala gana, y lo volví a oler, olía horrible, me lo acerqué a los labios, pero me lo retiré enseguida, no iba a beber sangre.
Escuché un gruñido y sentí que el pelirrojo me cogía de las manos y me las ataba tan rápidamente que no pude evitar.
- Ya me has cansado. Dijo enfadado. Cogió la copa y me la acerco a los labios, pero yo me aparte.
- Mira no me gusta coger el control de tu cuerpo, pero si no lo haces por ti misma lo tendré que hacer. Yo asustada me revolví.
Intento dármelo de nuevo pero me removí de nuevo tirándole un poco encima, y el gruño fuertemente tanto que me asuste, vi como bebía un sorbo y, suspire aliviada, me dejara ya en paz.
Pero sentí un fuerte agarre en mi cara y sus labios estampándose contra los mismo rudamente, el me paso el liquido a mi boca y yo lo probé era delicioso, hambrienta lameteé su boca saboreándolo cuando nos quedamos sin aire, nos apartamos y el a super velocidad desapareció yo confundida por lo que había pasado cogí la copa y me la tome sin pestañear.
BELIAL
Me toque los labios hinchados, y cerré los ojos, no podía esperar a probarlos de nuevo, mi hermosa Alikah estaba de nuevo conmigo, y esta vez el maldito de Zercán no nos volvería a separar, esta vez el no la asesinara, no le tocara ni un solo puto pelo a mi hermosa אהובי.
Sonríe para mis adentros, faltaba poco para el ליקוי חמד, y ahí sacrificaría a el cabrón de Zercán.
Dentro de poco acabaremos nuestros planes Alikah.
Me encaminé al salón pero mi amigo Cedric se interpuso en mi camino.
- ¿Qué haces aquí?. Le pregunté sorprendido, El me miro preocupado, y me guió a mi despacho.
Entramos en el enorme despacho sin paredes, cubierto de ventanales abiertos, por donde se veía el tormentoso cielo, el suelo era mármol negro, y había una gran mesa de piedra onix en el centro, y sillones de terciopelo negro, con grandes estanterías del mineral coral negro, llenas de libros antiguos, y manuscritos.
Yo me dirigí a una de las sillas y me senté, él repitió mi acción sentándose en la silla de delante.
- ¿Qué ocurre?. Le pregunté algo preocupado.
- Se escapó señor, el Alpha ese que me mandaste a matar, el mate de Alikah. Me respondió.
Yo enfadado azote la mesa, eran unos incompetentes, tan difícil era matar a un jodido Alpha desterrado.
- Mira, no me jodas Cedric, no me importa lo que hagas pero lo quiero muerto para mañana, o sino te voy a arrancar las tripas, me oyes. Le dije furioso, no podía hacer ni la tarea más fácil.
Dando por terminada la conversación, me teletransporte al salón donde se encontraba dormida mi hermosa Alikah, la estuve contemplando unos minutos, hasta que decidí cogerla en brazos, la apreté contra mi, extasiado por tenerla por fin conmigo.
Nos teletransporte a mi cuarto, parecido a mi despacho solo que con distintos muebles, tenia una gran cama con sabanas de terciopelo color negro.
Tenía lámparas plateadas con lágrimas de onix, unas estanterías y armarios negros y una puerta de cristal que daba al baño.
La acosté en la cama, y me metí junto a ella una vez que ya estábamos dentro la apreté contra mi pecho, y le olisquee el cuello, inmediatamente sentí a mi amigo crecer, sin poder evitarlo me restregué contra su hermosos culo, y le empecé a besar el cuello, cada vez me ponía mas caliente, y en vez de restregarme le daba pequeñas embestidas por encima de la ropa.
Joder no me podía aguantar la deseaba aquí y ahora, deseaba a mi mate Alikah.
Estaba a punto de despertarla y arrancarle la ropa de cuajo para poder follarla bien duro como en los viejos tiempos, pero sentí como me desvanecía.
Abrí los ojos y vi desde los ojos de otra persona, de Zercán, y aquí volvía mi condena de tener que ser la maldita alma demoníaca que debía de habitar dentro de Zercán.
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Pienso publicar de ahora en adelante mucho más seguido, aquí esta un instagram (hesthauthor-w) en el que pondré cuando actualizaré, y demás cosas sobre mis libros.
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tu rechazo, será tu Propia perdicion
WerewolfY entonces escuché esas palabras que me rompieron el corazón. -yo Dylan, futuro alfa de darkblood te rechazo a ti Phoenix miller, como mi compañera destinada por la diosa luna. todos empezaron a reír y a insultarme, siempre lo habían hecho pero esta...