911- JENLISA

SIETE 🌺

Este es el estilo de lisa en este fic 😎

—¿Aún no puedes moverte sin está molesta silla? — Jimin le pregunto mientras caminaba de su lado, Lisa negó sonriendo.

Ella pensó que estaría más que molesta al usarla, pero no fue así, le encantaba poder moverse en ella sin tener que andar con muletas, sería algo agobiante para su persona, así se sentía veloz y podría ir donde le plazca.

Era un niño con un juguete.

— Calla, que quien la usa es ella y no tú — Hoseok intervino dándole un pequeño golpe en su hombro. Jimin sonrió ante su amigo.

— Solo decía — Se excusó levantando sus manos en señal de rendición.

—¿Seguirán en su estupidez habitual o me abrirán la puerta? — Lisa bufó al hacerse notar, sus amigos miraron hacia abajo en signo de burla. Ella sabía lo que debía hacer, refunfuñando y acomodándose mejor, musitó;— Por favor...

— He esperado veintitrés años para esto — Jimin volvió a burlarse mientras abría la puerta hacia el pasillo, Hoseok río con él.

Lisa no era alguien que pudiera decir un "Por favor" fácilmente. Siempre se valía por si misma y que ahora esté en esas condiciones la dejaba a la deriva de pedir favores. Algo que no le gustaba demasiado.

— A tomar por culo, ¿Sí? — dándole la mejor sonrisa falsa a ambos, comenzó a adelantarse dejando a sus dos mejores amigos atrás.

—¡Lisa, ven aquí! — Hoseok le llamo pero el menor los ignoro como el mejor orgulloso que podría ser.

Ya habían pasado dos semanas del fatídico accidente que tuvo, y aunque estuviera extrañando horrores su vida normal, no la pasaba tan mal cuando tenía a un doctor que parecía ser su padre, había hecho un buen lazo y eso no se veía a menudo.
Tampoco ella era alguien que pudiera hacer relaciones sin ser tosca y seca, pero no, con el hombre mayor lo hizo sin ningún problema.

Cómo lo hizo con Jennie, a quien no veía desde hacía tres días, la pelinegra le había dicho que estudiaba y trabajaba al mismo tiempo. Algo que admiraba en demasía, él resistía en su trabajo para mantenerse en la Universidad, apenas podía con su vida y se encontró con alguien que amaba tener sus horarios tan cambiantes.

—¡Que los follen! — Alzó la voz soltando una risa divertida.

Pero el buen clima y la buena vibra que había allí, dejo de existir cuando un tumulto de gente comenzó a chillar en horror mientras escuchaba como algunos gritos de desespero retumbaban por los pasillos.

Lisa miro a sus amigos quien también optaron por un semblante serio mientras se acercaban a él, se sentía algo perdida y desorientada con el desorden que empezó sin previo aviso.

Los orbes negros que poseía la peliverde captaron como una gran cantidad de enfermeros y paramédicos venían en su dirección con dos camillas. Un escalofrío lo recorrió desde la punta de su dedo del pie hasta el último cabello, escuchando los gritos de auxilio se quedó estática cuándo notó como dos personas conocidas llevaban la segunda camilla.

Distinguió perfectamente a Nam y Jennie, su ropa manchada de sangre delataba que estuvieron en horario de trabajo cuando el siniestro pasó.

Hoseok y Jimin se quedaron estáticos cuando notaron la gran cantidad de sangre que emanaba de los cuerpos, tanto así, que algunas gotas se perdían en el piso del hospital.

Lisa no entendía muy bien lo que sucedía, pero ver cómo Nam y Jennie eran alejados de las camillas mientras el mayor lloraba desconsoladamente, la chica lo atrajo hasta ella para abrazarlo sin importar nada, Nam se dejó caer al suelo de rodillas mientras gritaba por el dolor ocasionado.

Ella, que miraba estupefacto aquella escena, quiso acercarse pero una mano lo detuvo, mirando a Jimin él negó, tal vez tenía razón, no debería entrometerse pero ver como ambos lloraban con dolor, le hacía dar ganas de estar a su lado.

Pero tendría tiempo, luego los vería, estaba segura que sí.