UNO 🌺

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- Hey Kim, te ves pésima - Su amigo Jin le hablo al momento de verla.

La pelinegra no hizo más que hacerle un mohín.

- Tú tan delicado desde siempre - Musitó con sumo sarcasmo.

- La honestidad ante todo Kim, pero venga... ¿Qué haces aquí? No era tu turno... - Nam se acercó hasta ella para darle un cálido abrazo.

- Hyejin tuvo un pequeño percance con su hijo y decidí venir yo, ¿Acaso está mal? - Sonrió mientras se ponía la ropa necesaria para auxiliar a quien lo necesitará.

- ¿Aún sigues creyéndolo? Jennie, aquella mujer del infierno se aprovecha de ti y tú vas ahí - Apunto hacia abajo dramáticamente - hacía la mentira.

- Prefiero estar aquí y no en casa, para ser honesta - Comento. - Y deja de ser tan dramático, juro que te daré un Óscar la próxima vez que intentes darme lecciones de vida.

Ambos amigos rieron y se dedicaron a vestirse adecuadamente.

Kim Jennie, veintidós años de puras aventuras y sonrisas.

Kim Nam-Joon, veinticinco años de risas y regaños para ella.

Jamás creyó estar en situaciones así, pero Jennie siempre amo lo que fue la medicina y cuidado de personas.

Por eso cuando tuvo la edad suficiente, comenzó sus estudios para ser paramédico, llevándole dos años, consiguió ser el mejor promedio de todos.

Junto a Nam eran los mejores alumnos de toda la clase.

-¿Alguna noticia o novedad? - Pregunto la pelinegra mirándolo.

Jin acomodaba los apósitos y maquinaria necesaria que ellos acudían cada vez que debían trasladar a alguien.

- De hecho no, aún no sucedió nada y ruego que siga así. La ventisca está muy fuerte y la nieve no tardará en caer - Murmuró mirándola.

Jennie asintió de acuerdo con el chico y se estiró en el sofá que tenían en aquella oficina donde esperaban siempre algún llamado.

Aunque si no había ninguno, festejaban por tener una noche o día en paz.

El silencio comenzó a reinar por la sala, aquello relajaba demasiado a los chicos quienes tenían una vida demasiado atareada.

Su tiempo se dividía en estudiar y servirle al público cuando los necesitaran.

Los negros orbes que poseía la chica miraron hacia la ventana donde por fin los pequeños copos de nieve comenzaban a dejarse notar, sonrió un poco mientras sus ojos fueron cerrándose debido a la relajación que sentía.

<...>

Un movimiento conocido para Kim Jennie comenzó a despertarla mientras le llamaban con desesperación, abriendo sus ojos de golpe se encontró con Namjoon y Jin que estaban muy cerca de su rostro.

- Bien, aléjense antes que les dé un beso a ambos - Murmuró. Nam rodó los ojos mientras que el castaño y muy amigo suyo, coloco sus labios listos para lo que Jennie había dicho.

Riendo y sacándolo de encima suyo, se paró acomodándose el atuendo que traía.

- Tus pelos son de otro mundo - Nam se burló al ver sus cabellos para todos lados.

- Son especiales, déjalos en paz - Musitó y comenzó a acomodarse el cabello en una chula con algo de brusquedad.- ¿Qué sucede?

- Un accidente en el puente Seongsu, se reportó hace dos minutos, una mujer y un hombre, tienen graves heridas, debemos irnos y ya - Comento seriamente Jin.

911- JENLISADonde viven las historias. Descúbrelo ahora