CAPITULO 22✓

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Héctor estaba besando a Jennifer, mis ojos se abrieron de golpe, él se separo de ella, y ella me sonrió con cinismo.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, tire la ecografía, y corrí hacia el ascensor.

— ¡Lucia, no es lo que tu crees! —. Se cerraron las puertas del ascensor

Me toque el pecho me sentía tan mal, sentí como mi corazón se rompió en mil pedazos.

Narra Héctor...

Mire la puerta, entro esta Jennifer con los papeles que le encargue.

— Aquí esta lo que me pediste Héctor, perdone señor de la Barrera —. Hablo acercando los papeles al escritorio

— Gracias —. Los tome

Ella se posiciono aún lado de mi, la mire extrañado.

— ¿Que sucede? —. Pregunte

Ella solo sonrió y se abalanzo a mi boca, quiso besarme pero la tome de los brazos y la aleje.

— ¿Que haces? —. Dije limpiandome los labios

— Solo quiero demostrarte que yo soy incondicional para ti y que yo te amaria sobre todas las cosas —. Sus palabras me desconcertaron

— ¿De que hablas? —. Frunci el ceño confundido

— De que tu y yo sabemos que Lucia no te ama —. Mi corazón dolió

Me quede callado por un par de segundos, pensando en que decirle.

— No me importa, ella es mía y yo solo la amo a ella —. Le di la espalda

Sus manos rodearon mis brazos, mire otro punto de mi oficina.

— Sabes por que se que ella no te ama, por que seguramente el hijo que ella esta esperando no es tuyo —. Me di la vuelta y la mire con rabia

La tome fuertemente de los brazos, ella sonreía sin apartar su mirada de la mía.

— ¿De que estas hablando? ¿Como puedes decir que el hijo que espera no es mio? —. La mire con rabia

— Por que me entere de que ella también se acostó con Andrés —. Mi mundo se derrumbo

Ella se acercó y me beso, pero en eso entro Lucia, su mirada se notaba triste sentí como me miro con odio, salio corriendo y yo salí tras de ella.

— ¡Lucia, no es lo que tu crees! —. Grite tratando de detenerla

Pero se cerraron las puertas del elevador, pegue varias veces mis puños con las puertas con rabia.

Camine a mi oficina y antes de entrar observe algo tirado en el piso.

Me acerque a recogerlo y me di cuenta de que era una ecografía, mi corazón latió con fuerza.

Me sentí el hombre más feliz del mundo, mire a Jennifer que sonreía triunfadora.

— Toma tus cosas por que estas despedida —. Sus ojos se abrieron de golpe

— ¿Que? —. Su voz chillona me irritó

— Lo que escuchaste, si regreso y te veo aquí voy a mandar a los de seguridad —. Tome mi saco y salí con rapidez

Subí a mi auto y maneje lo más rápido posible, me sentía tan enojado y a la vez tan triste.

Por permitir que Jennifer me besara, pero lo que más me dolía era saber que Lucia me había engañado con Andrés de nuevo.

Golpeé el volante varias veces, la ira me consumía por dentro, no permitiría que nadie la alejara de mi, por que es mía solo mía.

MÍA, SÓLO MÍA (+18)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora